El lugar al que Bita dejó a Mauren irse fue Muelle Suerte.
Sin embargo, lo que Mauren le dijo a Claudia fue Muelle Playa.
No podía dejar a Claudia irse con ella, a causa de que Bita se lo había dicho que siempre y cuando que no se fuese sola, el abuelo correría el peligro.
Sin embargo, ella sabía también que tendría que encontrarse con muchos peligros si realmente se fue sola.
Pero el tiempo fue corto, una hora. Si no se fue, no sabía qué Bita haría al abuelo.
Mauren miró el móvil y le llamó a Emiliano. Inesperablemente, no podía conectarlo.
Probablemente se fue hacia la alta mar.
En ese momento, estaba tan lejos que no podía conectarlo normalmente.
Fue una trampa absolutamente de Bita. Dejó pistas a propósito con el objetivo de que sedujo a Emiliano a irse a la alta mar.
Después de probar varias veces, todavía no podía conectarle. Mauren lo renunció.
Ella llamó otro número.
Llamó el número telefónico de Senda, pero fue igual que lo anterior. Aún estaba apagado su móvil.
Incluso la última esperanza se disipó por completo.
A través de la abertura de la puerta de la habitación, Mauren vio que Claudia estaba llamando con alguien mientras que entró en la habitación.
Mauren cambió la ropa de inmediato, salió de su dormitorio, encontró algo en la cocina y se fue del salón por la noche.
En el garaje había muchos coches y las llaves también estaban en los coches respectivamente.
Mauren abrió la puerta de un coche. A la hora de que encender el coche, la cara de Mauren se puso seria.
En él, aún con un poco de confianza, por lo demás, con algo dependencia.
En el momento se sentía más indefensa, lo que se le ocurrió fue siempre Senda.
Sacó el móvil y envió un mensaje a Senda, -Bita me pidió que ahora me fuera a Muelle Suerte. Ahora me voy sin saber cuántos peligros me esperan.
Después de hacerlo, encendió el coche y lo condujo hacia fuera del garaje.
Quizás Senda y Bita fuesen novios ya.
Quizás a Senda no le importara nada ella.
Quizás hubiera innumerables posibilidades, pero, ella todavía quería creer en él incluso depender de él.
Quizás ese fuera la última dependencia a él.
La vida pasada, probablemente condujo muchos años.
Viviendo de nuevo, parecía que nunca hubiera conducido.
Al inicio, se sentía un poco difícil en conducir y rápidamente volvió a recordar cómo conducirlo.
El coche lujoso de color negro, dentro de la oscuridad, fue como el demonio…
***
Muelle Suerte.
Ese embarcadero, que habían abandonado durante varios años, estaba particularmente tranquilo esta noche.
Experto de las luces débiles en la distancia, su entorno estaba totalmente negro.
Mauren se paró el coche en el claro del embarcadero. Se bajó y corrió hacia donde había luces. En el medio camino, alguien le llamó.
Creía que fue Bita, pero le sorprendió que fuese Senda.
-¿Qué quieres hacer?- Senda le dijo con una poca rudeza.
Experto su voz, podía escuchar el sonido del viento violente. Parecía que estaba contra el viento, y el viento era muy fuerte.
Incluso, el sonido se puso más grande. ¿Parecía que estaba corriendo?
No, parecían más que estaba conducir el coche contra el viento o conducir el barco.
¿Dónde estaba él?
-Bita me dijo que solo yo me fui, podría dejar a mi abuelo regresar a casa.-
-¿Eres tonta o idiota? ¿Ella verdaderamente dejaría a su abuelo regresar si se fue? ¿No sabía qué tipo de persona fue Bita?-
Afortunadamente Senda encendió su móvil. Al revés, perdería la información de esa chica tonta.
¡Esa mujer, fue tan tonta!
-Ahora vuelvas en seguida. He dicho que tu abuelo está bien. ¿Me oyes?-
La voz de Senda tenía mucho frío. Aunque el sonido del viento era grande, no podía tapar la indiferencia suya.
-¿Por qué me ordenaste a hacer eso? ¡Quieres perjudicar a mi abuelo! ¡Eres un hombre con malas intenciones!-
Mauren casi tiró el móvil por su estado emocionado.
A la hora de su callado, se sintió desesperada.
No podía entender las razones. ¿Por qué lo hizo Senda?
Él ayudaba a Bita a engañar a las personas de la familia López para impedir a Mauren reconocer como la nieta del abuelo.
¿Desde que estaba en Ciudad Norte, ya había participado en ese plan?
Senda podía poseer todo lo que quería. ¿Por qué lo hizo?
¿Acaso la riqueza fue tan importante para él? ¿Aunque tenía el Grupo Pérez, no se sentía satisfecho y quería robar la propiedad de Grupo López?
No podía creer en que Senda fue un hombre como así.
¡Pero el hecho fue que fue él que cambió las muestras de cabellos del abuelo y ella!
Quizá Bita le dijera muchas mentiras, por lo menos le dijo unos hechos.
Que había tantas personas a su lado que querían perjudicarle o engañarle, pero no lo sabía nada. ¡Ella estaba tan tonta efectivamente!
-¡Mauren, mantén obediente! ¡Regresa a la casa. Puedo prometerte que tu abuelo está bien. Después de unos días, podrá regresar a casa.-
-Entonces, ¿dime dónde está mi abuelo? ¿Qué está haciendo? ¿Cuándo podrá regresar a casa?-
-Ahora no puedo decirte eso, tú…-
Después de un bip, Senda se dio cuenta de que Mauren ya la colgó.
¡Al llamarle de nuevo, estaba apagado!
Miró la pantalla que iba apagando. Senda se puso tan ansioso que las venas azules de la frente quedaron levemente expuestas.
Esa chica, realmente no confió en él más.
Él llamó otro número y le dijo, -¡Inmediatamente manda ir a Muelle Suerte, ahora mismo!-
Después de colgar, volvió su cabeza y miró furiosamente hacia Hedi que estaba conduciendo el yate, -¡Qué lento! ¡Vete! ¡Déjame conducirlo!-
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: El corazón de Señor Peréz