El Esposo Piadoso romance Capítulo 118

"Tienes suerte de haberte encontrado conmigo hoy, o de lo contrario estarías muerto en poco tiempo", se burló Darryl mientras colocaba la Flor Bicolor en la olla de barro. Comenzó a preparar los demás ingredientes.

Aparte de la flor bicolor, el antídoto requería vinagre de arroz y pétalos de peonía. Darryl dejó estupefacto a Skyler mientras lo veía trabajar.

¿Estaba refinando el antídoto allí mismo? ¿Sabía la receta o solo estaba fingiendo? El antídoto del Elixir del Culto Celestial... ¿Cómo podría alguien más que el Gran Maestro saberlo?

Las preguntas inundaron la mente de Skyler. Finalmente, apareció un elixir en la mano de Darryl. ¡Había terminado!

"Cómela", exigió Darryl mientras ponía la pastilla en la boca de Skyler. Aunque Darryl parecía tranquilo, en el fondo estaba nervioso. Si la píldora no funcionaba y Skyler moría, los discípulos de afuera asumirían que mató a Skyler. Sería mortificante.

Sin embargo, Darryl estaba pensando demasiado. En menos de cinco minutos, el rostro pálido de Skyler volvió a la normalidad y su cuerpo dejó de temblar.

Darryl suspiró aliviado. ¡Parecía que el 'Elixir Infinito' era cierto! Había refinado con éxito dos Elixires, primero la píldora Divina y ahora este antídoto.

"¡Gracias... gracias!", Skyler finalmente se puso de pie, tambaleándose.

Lo que sucedió a continuación tomó a Darryl completamente desprevenido.

Skyler cayó de rodillas con lágrimas rodando por sus mejillas.

“Darryl... Oh, no. Hermano Darryl, por favor salva a mis hermanos. Todos ingirieron el Elixir un día después que mí. Sin el antídoto, morirán mañana. Por favor, te lo ruego…”, sollozó.

Con eso, inclinó la cabeza en el suelo tres veces.

Darryl bajó la cabeza para mirarlo y suspiró.

Para ser honesto, el Culto Celestial no le causó una buena impresión. Como decían, este culto estaba lleno de discípulos malvados y violentos. Sin embargo, mientras miraba a Skyler, quien suplicaba en nombre de sus hermanos, supo que era un hombre de palabra. ¡Incluso como un Maestro de alto rango, se arrodilló para suplicar por la vida de sus hermanos!

El acto de Skyler conmovió a Daryl mientras asentía.

"Skyler, estoy muy impresionado por cómo tratas a tus hermanos. Sin embargo, para hacer este antídoto, necesitaré un ingrediente esencial. Es la Flor Bicolor que utilicé".

La emoción llenó el rostro de Skyler.

“Hermano Darryl, este ingrediente no es difícil de encontrar. ¡Conozco un lugar con muchas flores bicolores! Sin embargo, el lugar es peligroso, con muchas bestias acechando. No se preocupe; Les pediré a mis hermanos que se las traigan. ¡Puedo llevarte allí con nosotros si lo prefieres!".

Darryl agitó la mano apresuradamente: "¡No, te equivocas! No te miré con desprecio”, intervino. Después de eso, Darryl apretó los dientes y anunció: "Bien, te lo prometo".

No tenía forma de rechazarlo. Eran un grupo de hombres sinceros y honestos. ¡Simplemente no podía!

"¡Esas son buenas noticias!", Skyler estaba complacido. Se arrodilló, "Saludos a nuestro Maestro de División de parte de su discípulo, Skyler Burr".

"Por favor, levántate", Darryl lo ayudó a levantarse.

Rayos, ¿qué acababa de pasar? ¿Me he convertido en un Maestro de División?

Skyler estaba lleno de emoción a su lado. "¡Hermano Darryl, les diré a los hermanos que recojan las flores bicolores de inmediato!", exclamó y se fue apresuradamente con los otros hombres.

En la sala de estar, las tres mujeres que estaban atadas suspiraron de alivio al ver salir a los hombres. No tenían idea de lo que había sucedido desde que Darryl y Skyler hablaron en el dormitorio.

Darryl entró en la sala de estar con una sonrisa de alegría, listo para desatarlas. Su determinación era fuerte; tener tres hermosas damas frente a él no era tentador en absoluto. ¡Incluso estaban atadas!

A medida que se acercó a ellas, su ligera fragancia se hizo más fuerte. Yvonne vestía un vestido largo, suave y elegante; Lily usaba pantalones cortos ajustados, caliente y sexy; y Jade estaba en minifalda, sus hermosas piernas eran encantadoras. Incluso los discípulos del Culto Celestial tuvieron dificultades para contenerse mientras las miraban.