El hombre con la máscara de zorro romance Capítulo 300

-¿Quién eres y cuál es tu propósito?-

-Jefe Oscar, ¿no lo investigaste antes de venir? En cuanto a qué propósito tengo, jaja.-

Olivia miró hacia abajo, se puso a jugar con su cabello ignorando a Oscar en absoluto.

-Solo he comprado los derechos de autor de una novela de tu mujer. ¿Qué propósito puedo tener? Oscar, te dejas llevar mucho por lo que dicen. Aunque ames a tu esposa, no tienes que tratar a todos los demás como enemigos-

Olivia al decir eso, levantó la cabeza para mirar a Oscar, una expresión de desprecio pasó rápidamente por sus ojos.

-Tu comportamiento me hace dudar de si realmente eres un presidente de una empresa. Pareces más a un novato que quiere mandar sin ni siquiera saber cómo funciona la sociedad. Este no es el estilo habitual del presidente del Grupo Rasgado.-

El rostro de Oscar se volvió frío debido a las continuas burlas de Olivia, su mirada penetrante se le dirigió con más dureza.

-Dime, ¿cuál es tu propósito? No quiero escucharte decir estas cosas tontas, solo quiero saber una cosa, ¿estás estableciendo relación con Laura realmente solo por el guion?-

-¿Si no qué iba a ser?-

Olivia arqueó las cejas ligeramente, sintió que estuvo divertido.

-Según el punto de tu vista, ¿con qué propósito lo debería hacer? Como productora, si no fuera por un buen guion, ¿quién buscaría a una novelista recién llegada de la industria?-

Olivia parecía normal, pero sin saber por qué, Oscar mirando en silencio a esta mujer que sonreía pero a la vez tenía una expresión frías, sintió que las cosas no eran tan simples como parecían.

El propósito de esta mujer definitivamente no era solo comprar el supuesto guion.

Pero aparte de eso, Oscar no le podía sacar ninguna información más.

Pensando en esto, el hombre no dudó más, se puso de pie directamente para salir de la habitación privada.

Como no podía sacar ninguna información en Olivia, ella también estaba decidida a no decir la verdad, entonces no tendría sentido quedarse.

Pensando en esto, Oscar dejó de mirar a Olivia, estaba a punto de salir de la habitación.

-En ese caso, Olivia, tú sabrás lo que haces. Espero que tengas una buena cooperación con mi esposa.-

Cuando llegó a la puerta, Oscar volvió a mirar a la mujer que mostraba un poco de desdén y hostilidad, volvió a advertir.

-Pero, quiero recordarte, que al fin y al cabo las cosas que haces te serán devueltas. No te pases. No me importa cuál sea tu propósito, no te dejaré en paz si intentas dañar a mi familia.-

-¿Por qué la voy a dañar?-

Olivia levantó la cabeza, sus encantadores y dulces ojos se encontraron de directo con los fríos ojos de Oscar. Los labios rojos de la mujer se curvaron y sacó una sonrisa inesperadamente juguetona.

-Me hace tan feliz mientras sea algo que no te guste a ti.-

Tan pronto como terminó de hablar, el ambiente en la habitación privada se enfrió instantáneamente.

El rostro de Oscar estaba sombrío, su mirada era como un cuchillo y se dirigió a Olivia.

-¿Qué dijiste?-

-Nada.-

Apartó Olivia la mirada y no mencionó la pregunta en absoluto.

-Oscar, no te preocupes, tu esposa es muy linda y me gusta mucho, así que no le haré cosas malas. En cuanto a mi identidad y las cosas entre nosotros, puedes hacer tus propias adivinanzas, pero creo que, no sabrás la respuesta, da igual cuántas vueltas le des.-

Después de que Olivia terminó de hablar, no vio la reacción de Oscar. Se tapó la boca con una mano y se puso a reír, como si el hombre que estaba frente a ella no fuera un gran personaje del mundo de los comercios, sino una persona común y corriente.

Los ojos de Oscar brillaron, pareció saber algo a través de sus palabras.

En el momento en que las dos personas se miraron, Oscar vio una inexplicable familiaridad en los ojos de la otra. Esta familiaridad le hizo comprender rápidamente que los dos eran en realidad el mismo tipo de personas.

Después de darse cuenta de esto, la mirada de Oscar cambió. Aunque su expresión era fría, su actitud hacia Olivia era aún más cautelosa.

-Será mejor que recuerdes lo que dijiste.-

Oscar se dio la vuelta, no quería decir más tonterías, como ya sabía que era inútil hablar, no quería seguir perdiendo el tiempo.

-Si descubro que has hecho algo para dañar a Laura, no te perdonaré, independientemente de quién seas.-

Inmediatamente después, los pasos del hombre sonaron y la pesada puerta de la habitación privada cerró de golpe.

Olivia apoyó una mano en su frente y quitó la sonrisa de su rostro. Frunció sus labios rojos, y miró con calma la dirección en la que se fue el hombre. En su rostro hermoso no había ni una expresión.

En verdad, ella no lastimaría a Laura, porque después de todo, solo era una persona inocente la que se vio involucrada, ella tenía cosas más importantes que hacer.

Pensando en esto, Olivia también se puso de pie, ni siquiera miró la deslumbrante variedad de platos de la mesa, salió directamente de la habitación privada.

¿Cómo podría ser suficiente que solo fuera Oscar quien supiera esto?

En caso de que esa persona no actuara según lo acordado y no lo dijera a los demás, todo lo que había hecho habría sido en vano.

Para estar segura, debería aparecer frente a la otra persona.

***

Fin de semana, el campo de golf.

Lorenzo dejó el garrote, movió las manos y miró al enérgico Iker que estaba a lo lejos, no pudo evitar suspirar.

“Por desgracia, parece ser que ya soy mayor, no tengo suficiente fuerza física y tampoco soy tan activo como los niños.”

Pero afortunadamente, Iker era inteligente y le gustaba aprender. Estaba capacitado para ser heredero de la familia Rasgado.

Simplemente…

Lorenzo recordó lo que dijo Oscar cuando regresó ese día, y también la información que vio, sus ojos se nublaron por un momento.

Esa niña se parecía mucho a su hija, si su niña creciera hasta el día de hoy, probablemente tendría la apariencia de esa niña.

Pero esa niña negó por completo su relación con ellos.

A parte, Lorenzo cerró los ojos con dolor, no quería pensar más en el pasado. Vio a su niña morir con sus propios ojos.