El Hombre que Robó Mi Corazón romance Capítulo 268

¿Fotos?

El personal de Hai Rui definitivamente tendría algunas, pero, no había forma de que las compartieran con el mundo exterior. Dado que todavía trabajaba técnicamente en Hai Rui, conseguir una fotografía no sería una tarea difícil. Pero, ¿qué había de la compensación por incumplimiento de su contrato? ¡La indemnización sería cercana a los cien millones! Charlene no se atrevía a correr el riesgo.

—Mientras puedas hacerte con una foto para mí, podrás pedirme lo que quieras —se ufanó el editor Lin.

—Pero, el destino de quienes exponen uno de los secretos de Hai Rui no es nada agradable.

—Ese es un tema fácil de solucionar. Si uno de los empleados de Hai Rui deja caer su teléfono, y alguien lo toma, ¿quién es el culpable? Incluso si Mo Ting buscara alresponsable, atacaría a la persona que dejó caer su teléfono y no a ti.

Charlene caviló por un momento y creyó que lo que decía era bastante razonable:

—¿Qué obtengo de esto?

—Acciones para el estudio de Hua Rong. Una vez que se exponga el escándalo de Tangning, Hua Rong se volverá famoso. ¿Pensaste que faltaría gente dispuesta a tirarte el dinero? —se jactó el editor Lin, sonriéndole frívolamente a Charlene.

Charlene lo pensó por un momento. La sola idea de los artistas de Hai Rui, e incluso de Tangning, arrastrándose a sus pies la hacía excepcionalmente feliz. Esto la animó más que ganar dinero, así que, al final, Charlene asintió con la cabeza y firmó un contrato. Su tarea ahora era regresar a Hai Rui y obtener evidencia de intimidad entre Tangning y otros artistas. Solo podía esperar que todo transcurriera sin problemas, de lo contrario, si Mo Ting la atrapaba, desaparecería sin dejar rastro.

• ••

Después de la cena de celebración, Mo Ting y Tangning regresaron a casa apestando a alcohol. Desde el momento en que entraron en su casa, Tangning se aferró a Mo Ting mientras giraban vertiginosamente. Al final, la pareja se cayó al sofá. Tangning se tendió sobre el cuerpo de Mo Ting y frotó su nariz contra su cuello.

—Ting, estoy muy feliz.

—Me doy cuenta —repuso Mo Ting, permitiéndole continuar frotándose la nariz contra él. Era raro que viera a Tangning relajada y sonriendo desde lo más profundo de su corazón. Si ella podía permanecer tan feliz, él estaba dispuesto a hacer cualquier cosa.

—¿Qué más sabes hacer? ¿Puedes bailar? ¿Puedes?

Mo Ting se envolvió con fuerza en el abrazo de su mujer, pero ella no estaba sobria. Entonces, Mo Ting la ayudó a levantarse y la llevó a bailar sobre el suelo de baldosas resbaladizas. Por supuesto, como estaba guiando el baile de una borrachína, solo podía hacer el baile más simple.

Tangning se apoyó en el cuerpo de Mo Ting mientras ella se movía a su ritmo. Ninguno de los dos habló, pero Tangning sintió que la atmósfera en ese momento era hermosa. No necesitaban decir nada ni hacer nada, todo lo que ella tenía que hacer era seguir su movimiento hasta el final de los tiempos.

Después de lo que pareció medio día, Tangning murmuró:

—¿Has pensado en qué hacer si la gente en Hai Rui no acepta nuestra relación? Ting, ¿sabías que esta noche estuve verdaderamente inquieta? Estaba realmente preocupada de que hubiera un segundo o tercer Zhen Manni aquí para buscar problemas. Si eso sucediera, me culparía y me enfadaría mucho.

—Pero has mostrado mucha seguridad al enfrentarte a Zhen Manni.

—¿Cómo podría dejar que otros te intimiden? — respondió de forma natural—. Ni siquiera yo puedo soportar quejarme de ti, así que otros definitivamente no tienen el derecho. ¿Cómo podría no estar enojada?

Mo Ting la abrazó y de repente reveló una sonrisa feliz. Aunque en el pasado había experimentado que lo admiraran de esta misma manera, ser protegido por Tangning nuevamente lo hacía sentir excepcionalmente dulce. Su corazón nunca había estado lleno de tanta dulzura.

—De ahora en adelante, si nos encontramos con una situación como esta otra vez, lo daré todo.

Mo Ting de repente se congeló en su lugar, la rodeó con sus brazos y la presionó contra el sofá.

—No necesito que tú lo des todo, solo necesito que te entregues a mí.

Capítulo 268 - Acepto Mi Destino Dulcemente 1

Capítulo 268 - Acepto Mi Destino Dulcemente 2

Capítulo 268 - Acepto Mi Destino Dulcemente 3

Verify captcha to read the content.Verifica el captcha para leer el contenido

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: El Hombre que Robó Mi Corazón