Le sonreí a Celine para que pudiera ver quién manda y me miró como si quisiera estrangularme. Sabía que mi insinuación de que ella quería mi atención al otro lado de la habitación la haría sentir incómoda. La mesa se convirtió en mi escondite personal, aunque mi polla mostró cuánto me atraía Celine, usé mi cara para demostrar lo contrario, no quiero que piense que tiene algún poder sobre mí. Parecía un poco aireada, así que después de hacerle pensar en lo útil que era la alfombra para mí, pude follarla allí mismo. Ella no estaba exactamente escuchando nada de lo que estaba diciendo. Les pedí a los estudiantes que completaran un cuestionario y presté atención a las acciones de Celine, quien claramente se sobresaltó cuando se dio cuenta de que la estaba mirando. No iba a perder la oportunidad de confrontarla, así que me acerqué a ella y la acusé de no prestar atención en mi clase, lo que me dio motivos para pensar que estaba pensando en todo lo que le decía. Se quedó en silencio, lo cual no era normal viniendo de ella.
- ¿Qué pasa Sr. Celine, estaba tan hablador, el gato le comió la lengua? Ya sabía lo mucho que esta chica era capaz de responderme lo que quisiera, porque ya podía decir que no es el tipo de chica que se lleva una mierda a casa, pero nunca esperé que usara mis propios métodos para golpearme.
Miró alrededor de la habitación, teniendo mucho cuidado de no llamar la atención de los demás y dijo que su idioma estaba intacto, porque hay cosas que solo puede hacer con ella, como si fuera poco, dijo que su idioma tenía varios habilidades, a diferencia de la mía que se utiliza para hablar mierda.
- Oh niña, si supieras el poder que tiene mi lengua, te enamorarías de mí, pensé. Cuando le dije que mi lenguaje tenía habilidades que ella no conoce, pero que rogaría saber, se quedó atónita, al mismo tiempo que la hice bajar de su pedestal. Y hasta dije que hay guerras que la gente ya entra a perder. Tuve que volver a darle la espalda, porque no hay mujer en el mundo que me haya puesto tan duro como me estaba poniendo esta nínfula. Fui a leer un libro tratando de dejar de pensar en lo que la lengua de esta chica podría hacerle a mi pene. La clase casi había terminado, y no podía caminar por los pasillos con tanta fuerza. Cuando terminó la clase, Monique vino a hablar conmigo, me burlé al mismo tiempo, ya esperaba que viniera a buscarme después de que me la había comido la noche anterior, pero eso no era lo que estaba pensando, así que de alguna manera ayudó a controlar mi erección. No presté atención a las cosas que decía, solo presté atención a Celine que ya se levantaba para irse.
- Señor. Celine, ¿puedes venir aquí, por favor? Noté que Monique la miraba detenidamente, probablemente se sentía amenazada por la incomparable belleza de Celine.
En toda mi vida, nunca he visto a una chica más hermosa y sexy que Celine, pero nunca le diré eso, no estoy loco por perder el poder que sé que tengo sobre ella, aunque luche por ocultarlo. Una vez más me habló con arrogancia, parecía estar enojada, pero su rudeza no pasó desapercibida para Monique quien pronto la estaba regañando. Celine usó todo su desenfreno para enfrentarse a Monique, imitando la forma en que me trataba. El problema fue cuando Celine dejó su escote más profundo y acercó sus tetas a mi cara.
- Mierda Celine. Dije dejando fluir todo mi líquido, imaginando esa boquita suya lamiendo todo. Abrí la ducha y me lavé, luego usé una toalla de papel para secarme, me vestí y abrí la puerta. Tuve suerte de que nadie quisiera ir al baño mientras golpeaba uno. Fui a tomar un café, ya que tenía 40 minutos libres hasta la próxima clase. Seguía pensando que en todos los años de mi vida laboral, nunca había salido con una chica tan joven, vi en el registro que solo tenía 18 años, todo en ella estaba perfectamente dibujado, su boca, sus ojos, las pecas en ella. la piel, el pelo lacio y pelirrojo, los pechos en la justa medida, el culo entonces? ni soy capaz de hablar sin volver a ponerme duro. Nunca pensé en ninguna mujer con la que me follara para masturbarme, cuando le pegaba a una siempre recurría a videos pornográficos, pero pegarle a Celine, aunque nunca me la follaba, era algo que me preocupaba.
Fue suficiente que esta chica se burlara de mí, que yo pensara que debería tenerla.
- Joder, el que acabó jodido fui yo. Yo hablé. Necesito comerme a esta nínfula, no sé cómo voy a conseguirlo, pero me va a subir la polla.
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