El Prohibido Amor de un CEO romance Capítulo 30

Edward se vestía para ir a la cena con su familia en casa de la abuela Situ.

Emily dormía exhausta en su cama.

Había tenido sexo con ella en todas las posiciones que se le ocurrieron.

Después de que ella le hubiera preparado la comida y un té vigorizante.

Salió del departamento satisfecho y se fue silbando una melodía.

Flora despertaba con un terrible dolor de cabeza y la visión muy nublada..

"Dónde estoy?"

Se preguntó.

Ella quiso levantarse mientras se llevaba ambas manos a su adolorida cabeza, pero estaba atada por el torso a una silla.

El hombre que la había secuestrado estaba sentado en un rincón de esa habitación y la observaba con gran interés.

Flora se quejó y Él se acercó a ella para ponerle un poco de hielo en la cabeza.

"Quién...quien eres?"

"Porque me trajiste aquí?"

Cuestionó Flora.

El hombre no contestó nada.

Poco a poco los ojos de Flora pudieron enfocar mejor.

Entonces lo vió.

Le parecía conocido...

Pero de donde?

"Veo que aún no me reconoces."

"Es mejor así."

"Descuida, te trataré mejor que ese hombre y serás feliz conmigo."

"Ya lo verás."

El hombre habló mientras se acercaba a ella con una navaja.

Flora tembló del miedo.

Ryan estaba recostado en el sillón de Sarah incapaz de moverse mientras ella le tomaba interminables fotos y las subía a su estado.

El tono insistente de su celular, logró despertar a Emily quien somnolienta contestó.

"Diga?"

"Señorita Emily Mu?"

"Si?"

"Su hermana, es Flora Mu?"

"Si."

"Porque, le pasa algo a mi hermana?"

"Reportaron que fue secuestrada está tarde."

"Podría venir a la estación de nuevo por favor?"

"Que?"

Emily se despertó por completo.

A toda prisa, sin importarle el dolor que sentía por el sexo salvaje que tuvo horas atrás con Edward, salió corriendo hacia la estación de policía.

En el camino marcó el número de Ryan pero la mandaba directo a buzón...

"Ellos me llamaron juntos esta tarde."

"Ahora ella fue secuestrada!"

"Dios mío, todo va de mal en peor."

Reflexionó Emily.

Marcó el número de Maggie y para su buena suerte ella si contestó.

Le pidió que la vería en la estación.

Ella junto con James llegaron a la estación y vieron a una Emily temblorosa, pálida y con ojos rojos por haber llorado tanto.

En el camino a la estación, Maggie le había comentado a James que Flora, la hermana de su mejor amiga Emily, había sido secuestrada.

Al llegar Maggie le presentó a James a Emily.

Pero al estar tan triste, Emily solo abrazó a Maggie.

James se despidió y las dejó a las dos chicas con el inspector Dan.

"Bueno, nos volvemos a ver señorita Mu."

"No pudimos contactar ni a su padre ni a su madre."

Dijo el inspector Dan.

"Papá está en el hospital sin celular."

"Mamá nos abandonó hace unos meses."

"Por favor que nadie visite a mi padre!"

Rogó Emily a toda prisa.

"Él está muy delicado y está noticia podría hacer que tenga otro paro cardíaco."

Emily tomó la mano del Inspector.

"Su hermana fue secuestrada, sabe de alguien que quisiera hacerle daño a ella?"

"No."

"Alguien que fuera su enemigo?"

"No, ya llamaron a Ryan Nim?"

"Flora y Ryan me llamaron por la tarde."

"Él podría saber más del paradero de mi hermana."

Dijo Emily.

El inspector entonces marcó el número de Ryan, pero también lo mandaba a buzón.

Envió a varios agentes a casa de Él y de Sarah, su novia.

Ryan poco a poco fue recuperando sus fuerzas y se encontró en ropa interior en la cama de Sarah.

Ella estaba acostada a su lado desnuda.

"No!"

"Otra vez No!"

Pensó Ryan mientras veía la escena.

"Hola querido, gracias por lo de hace unas horas..."

"No pensé que me hubieras extrañado tanto."

Dijo Sarah en voz coqueta mientras sonreía y se agazapaba cerca de Él.

Ryan sin decir nada, se levantó y comenzó a vestirse haciendo memoria de lo que había hecho.

Había llegado a casa de Sarah con ella después de recogerla del Hospital.

Después habían entrado a hablar a su casa pues quería terminar la inexistente relación con ella...

Entonces, porque despertó, otra vez en una situación comprometedora con ella?

"Sarah, esto tiene que parar!"

"No puedo estar contigo..."

"Lo siento pero..."

Dijo Ryan.

"Oh, yo creo que si podemos continuar con esto, mira."

Ella le enseñó varias fotos que había tomado de ellos.

Desnudos y en varias posiciones sexuales.

"Si no quieres que envíe está fotos a los periódicos y tú reputación se vea afectada, seguiremos juntos como antes."

"Si me tratas bien pensaré en borrar las fotos después."

"Y no creas que soy tonta."

"Las he subido a la nube y ahí las guardaré aún si llegarás a borrarlas de este dispositivo."

Sarah amenazó a Ryan.

"No creí que fueras tan calculadora y chantajista Sarah, me decepcionas."

Dijo lastimosamente Ryan.

"En la guerra y en el amor todo se vale Ryan."

"Yo te tengo en mis manos, deberás hacerte responsable de mi."

"De acuerdo?"

Ryan a regañadientes aceptó.

Él empezó a idear una estrategia para borrar esas imágenes.

Cuando pudo encender su celular tenía más de 30 llamadas de Emily, de un número desconocido y de Flora.

"Emily, que sucede?"

"Ryan, Flora fue secuestrada!"

"Que?"

"Dónde estás?"

"Estoy en la estación de policía!"

"Un hombre la secuestro!"

"Ryan tengo miedo de que le haga daño!"

"Iré enseguida."

Dijo Ryan encendiendo su auto.

Condujo rápidamente hacia la estación de policía.

James manejaba rumbo a la casa de la abuela Situ después de haber dejado a Maggie.

Meditaba que ambas chicas eran muy bellas cuando notó que un auto lo seguía.

"Demonios."

James y aceleró el auto.

El auto detrás de Él también aceleró.

Comenzó la persecución del auto de James durante unas calles.

Edward llegó sin problemas a la casa de su abuela.

Después de recibir varios regaños de parte de ella, saludó a Elizabeth y a Carl.

James detuvo el auto bruscamente y bajó desenfundando su arma para apuntó al auto que lo perseguía.

El auto lo rebasó y se perdió en las calles oscuras adelante.

"Sabe que estoy aquí."

"Debo ser más cuidadoso."

Pensó y subió a su auto para marcharse de ahí.

El chófer de la casa Situ llegó con la señorita Shirley quien había sido invitada a la cena por la abuela Situ.

Edward con disgusto la saludo con un beso y tuvo que fingir que la adoraba.

"Mi amor Edward, te extrañe tanto!"

Dijo Shirley.

Edward le dió una mano para ayudarle a descender del auto.

El vestido negro de Shirley era hermoso y se ceñía bien a su figura.

Revelaba justo lo necesario sin ser vulgar.

Le dio un beso a Edward en los labios y juntos entraron a la casa.

Shirley saludó a todos y en especial a la abuela Situ.

"Abuela, Edward ya hizo formal nuestro compromiso en una cena que tuvimos en casa junto con su padre."

"Espero que pronto nos casemos y podamos darle muchos nietos!"

Luciendo inocente y esbozando una sonrisa, Shirley dijo estas palabras.

La abuela Situ no le creyó nada.

Elizabeth también pudo sentir la falsedad de las palabras de Shirley.

Ella se limitó a mirar a otro lado en espera de James.

A Elizabeth no le agradaba Shirley pues le parecía superficial y frívola.

Pero su padre, Joseph Situ, quería que Edward se casara con esa mujer.

Asi las familias se unirían y las empresas se volverían más poderosas.

James fue el último en llegar y se disculpó con todos por el retraso.

"Les pido me disculpen."

"Tuve que llevar a la periodista que me está entrevistando a la estación de policía."

"La hermana de su mejor amiga fue secuestrada."

"Que terrible!"

"Esta inseguridad va en aumento!"

Dijo la abuela Situ.

"Elizabeth quiero que salgas acompañada del chófer."

"Tal vez considere contratarte un guardaespaldas."

"No quiero que nada malo te pase."

La abuela Situ habló mientras le daba palmaditas a Elizabeth.

"No será necesario Abuela!"

"Si James me acompaña cuando salga no temeré a nada."

Respondió Elizabeth.

"Me encantaría que fuera conmigo a todos lados."

"Y también acompañarlo a todos lados"

Elizabeth esbozo una enorme sonrisa.

James, muy serio, solo la escuchaba algo molesto.

Edward tampoco estaba feliz al tener a Shirley tomada de la mano.

"Ojalá encuentren a la chica secuestrada."

"Dinos, pudiste escuchar su nombre?"

Preguntó la abuela Situ.

"Si abuela la chica se llama Flora Mu y si hermana Emily Mu."

Edward cerro sus ojos un poco.

Flora era hermana de Emily.

Pero lo que más le molestaba, es que no le había avisado que saldría del departamento.

La abuela de Edward reconoció el apellido.

Era el apellido de esa chica que Edward había humillado pero no dijo nada.

Todos se dirigieron al comedor para cenar.

Carl también escuchó las noticias y se disculpó un momento para ir al baño.

Él llamó a alguien.

"Está en la estación de policía."

"Averigua que está pasando porque puede sernos útil."

"Mándame fotos y vigila a la chica."

Había colgado y un segundo después, recibió una llamada de la propia Emily.

"Señor Carl disculpe que lo moleste a esta hora pero tengo un problema familiar."

"Quisiera pedirle libre el día de mañana..."

Rogó Emily con voz temblorosa.

"No importa si me lo descuenta pero por favor, necesito uno o dos días libres."

"Necesito encontrar a mi hermana, por favor señor Carl."

"Emily, necesitas mi ayuda en algo?"

"Necesitas dinero o algo más?"

"No señor Carl, muchas gracias, solo los días, por favor."

"Te quedarás conmigo y me amarás como yo te amo!"

"O podemos morir juntos como Romeo y Julieta."

"Tu decides!"

"Estás loco!"

Dijo Flora.

Por la adrenalina del momento lo pateó para quitarle el tubo para forzar la puerta y salir.

El hombre solo se hizo ovillo en el piso por el dolor.

Ella abrió un poco la puerta y trató de salir.

Pero era muy estrecha la abertura.

Asustada, se deslizó por ella sin importarle que una parte de la puerta la cortara en el vientre, brazos y piernas.

Lo importante era salir viva de ahí.

Cuando estuvo fuera, solo podía ver a su alrededor árboles y campo.

Echó a correr hacia las luces que ella veía en la lejanía.

Cuando estaba a punto de llegar de repente sintió que alguien le golpeó las piernas.

Era el hombre que aún no se rendía.

De una pierna la jalaba en dirección a la casa donde la había retenido.

Flora comenzó a gritar.

Él la iba a golpear en la cabeza cuando otro hombre lo arrojó al suelo.

Le dió un puñetazo en la cara para desmayarlo.

"Gracias.... gracias..."

Dijo Flora.

Ella comenzó a llorar.

"Mariel!"

"Avisa a la policía que hay una chica muy golpeada aquí!"

Dijo el hombre a una señora que estaba recogiendo leña.

"Él..Él me secuestró"

"Allá, de esa casa me escapé."

Señaló debilmente Flora antes de desmayarse.

Edward conducía a toda velocidad a la casa de Shirley para dejarla lo antes posible e ir a ver a Emily a la estación de policía.

"Edward vas muy rápido, nos podemos matar, ten cuidado."

Edward detuvo el auto.

"Sal, llama a un taxi que te recoja."

"Debo hacer algo mas importante"

"No, no saldré, no me vas a dejar en medio de una vía oscura y sola."

"Quieres ver cómo te bajo del auto?"

"No serías tan malo Edward...'

"Verdad?"

"No abuses de mi paciencia, ahora SAL."

Shirley molesta bajó dando un portazo a su carro.

Marcó el número de un taxi.

Edward dio la vuelta y condujo hacia donde estaba Emily.

"Desgraciado!"

Gritó Shirley enojada.

"La encontraron!"

"Esta en el hospital del pueblo vecino."

"Emily debemos ir!"

Ryan corrió hacia Emily.

Ambos subieron al auto para reunirse con Flora.

Los espías que habían estado vigilando ahora estaban en una batalla feroz.

Ellos eran rivales acérrimos.

Uno de ellos sacó una pistola y disparó.

El otro cayó al suelo en silencio, dándole oportunidad al otro de huir del lugar pero dejando atrás su celular.

Edward llegó 10 minutos después de que Emily y Ryan se fueran con Flora.

Pateó las llantas enojado por haber llegado tarde.

Sacó un cigarro y fumó distraído.

Sin tener más que hacer regresó a su departamento.

Al entrar olió el perfume de Lucy y su puerta estaba abierta.

"Tal vez Emily olvidó cerrarla al salir apresurada."

Pensó Edward cerrándola.

Unos brazos delicados lo abrazaron por detrás cuando estaba desvistiendose.

"Lucy."

"Si amor, regrese a ti porque no puedo olvidarte."

Edward la tomó en brazos.

La besó con nostalgia.

Ella tenía un sabor peculiar pero no le dió importancia.

Él se entregó a ella.

"Te amo, sabía que no habías muerto."

"Ya no te irás, verdad?"

"No amor, me quedaré aquí contigo..."

"Déjame demostrarte cuánto te he extrañado."

Lucy conducjo a Edward a la cama.

Edward besó todo su cuerpo como lo había hecho antes.

Ambos gemían y jadeaban excitados.

Edward había soñado tantas veces con tenerla una vez más.

Había soñado con su voz, sus caricias, su característico perfume.

Ahora era real.

Ella estaba debajo de Él.

Ambos disfrutaban del placer que cada uno podía ofrecer.

"Edward...mmmmhhh..."

"aaahhh...sigue...mmmhhh..."

"Sigue...si..."

Gemía Lucy.

Edward era un mejor amante que Carl.

Edward no hablaba, solo se concentraba en el placer y en besarla.

Gotas de sudor se formaron en su espalda y frente.

En un momento sus ojos miraron a la mujer que tenía debajo de Él y ella cambió de cara..

En su mente un solo nombre se repetía una y otra vez.

"Emily..."

"Emily..."

"Emily..."

***By Liliana Situ***

Valoro mucho tu opinión.

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