Embarazada y rechazada por mi alfa

Bastien se casa conmigo sólo por responsabilidad. Le rechazo y me marcho para siempre fingiendo mi muerte. Sin embargo, se vuelve loco buscándome. Dice que me ama cuando nos volvemos a ver. ¡No! No me lo creo. ¡No puedo dejar que me robe a mi hijo! ** - ¡Ella no es tuya! La puerta principal estaba cerrada con llave, pero Bastien y sus Betas sólo tardaron un momento en romper esas defensas. Cuando Bastien se eleva en la puerta, sus ojos plateados brillan con una furia apenas contenida, me doy cuenta de que todo ha terminado. Todo por lo que he trabajado estos últimos tres años ya está perdido; cada lágrima que he derramado y cada sacrificio que he hecho han sido en vano. Me paro frente a mi ex marido. Diosa, había olvidado lo guapo que es, lo alto que es. No me siento bien estando tan cerca de él sin que nuestros cuerpos se toquen; necesito todas mis fuerzas para no acercarme a él. - Hola Bastien.