Esposa Pecadora romance Capítulo 352

Después de que Meredith dijera eso, Eloise no la detuvo.

Meredith llevó su equipaje a casa de Jeremy. No tenía las llaves, así que la criada le abrió la puerta.

La criada se había enterado de la boda de Meredith y Jeremy. Cuando vio a Meredith, la llamó halagadoramente: "Señora, ha vuelto".

Meredith se alegró mucho cuando la oyó.

A pesar de que su boda se arruinó, ella siguió teniendo su estatus.

¿Quién en Glendale no sabía que Meredith Crawford era la esposa de Jeremy?

Meredith subió las escaleras. Cuando quiso entrar en la habitación de Jeremy, se dio cuenta de que estaba cerrada.

En ese momento, los ruidos venían de la planta baja. "Señor, ha vuelto. La señora acaba de volver también".

"¿Señora?". Jeremy frunció el ceño mientras miraba a la mujer sonriente que estaba a su lado.

La sirvienta se sintió incómoda cuando miró a Madeline, que sostenía el brazo de Jeremy.

"Deberías ir por las compras". Jeremy la mandó a hacer algo.

"De acuerdo, señor", respondió la criada antes de marcharse.

La enorme casa se sumió en un instante en el silencio. Sin embargo, la atmósfera silenciosa fue rota por la pretenciosa voz de Meredith.

"Jeremy, has vuelto...".

La voz de Meredith perdió su confianza hacia el final.

Cuando vio que Jeremy sostenía íntimamente la mano de Madeline, el rostro de Meredith se ensombreció.

"Oh, ¿así que tú eres la 'señora' de la que habla?". Madeline sonrió y levantó una ceja. "Entonces, ¿qué señora se supone que eres?".

Las comisuras de los labios de Meredith se crisparon mientras se esforzaba por controlar sus emociones. Se acercó a Jeremy con indignación. "Jeremy, aunque nuestra boda haya sido interrumpida, seguimos casados", dijo, mirando furiosamente a Madeline. "Soy la señora

Whitman. No solo de nombre, sino también en la realidad".

"¿No solo en el nombre, sino también en la realidad?". Madeline se rio antes de levantar la cabeza. "Jeremy, tengo un poco de sed. Quiero beber ese té con leche tan característico de esa tienda que hay al final de la calle. ¿Puedes comprármelo ahora?".

"Por supuesto", respondió Jeremy sin siquiera pensarlo. Sus ojos recorrieron el rostro de Madeline con la misma suavidad que el agua que fluye.

Cuando Meredith vio que Jeremy la ignoraba pero trataba las palabras indiferentes de Vera como un edicto imperial, sintió una presión tan fuerte en el pecho que casi no podía respirar.

Por otro lado, Madeline sonreía al ver a Jeremy darse la vuelta.

"¡Vera Quinn!".

Después de que Jeremy se fuera, Meredith finalmente explotó sin contenerse.

"¡Vera Quinn, eres una absoluta z*rra! ¿Cómo puedes ser tan desvergonzada? ¿Cómo te atreves a seducir a mi marido tan descaradamente?".

Madeline se giró con indiferencia al oír los gritos desesperados de Meredith. "¿Y qué si soy descarada? Es mucho mejor que ser una z*rra de dos caras como tú. Haces una cosa delante de la gente pero haces todo lo contrario a sus espaldas. Lo más importante es que a Jeremy le gusto así".

"Tú...". Meredith temblaba de rabia. "¡P*ta! ¡Seduces a mi marido como si fuera lo inevitable y lo correcto! ¡Bruja!".

"Si soy una bruja, entonces ¿qué clase de bestia eres, Meredith?". Preguntó Madeline. "Te lo recordé por teléfono ese día. Te dije que te arrepentirías si querías que apareciera en tu boda. Sin embargo, insististe con orgullo en que no puedo competir contigo. ¿Puedes ver los resultados ahora?".

Meredith abrió los ojos al darse cuenta. "¡Lo sabía! Vera, lo sabía todo. Ya tenías un plan! Ya tenías un plan para arruinar mi boda con Jeremy. Habías planeado robarme a Jeremy. ¿Por qué tienes que robarme a mi hombre? ¡P*ta! ¿Por qué quieres robarme a mi hombre?".

Meredith estaba furiosa y gritó mientras intentaba golpear a Madeline.

Sin embargo, en el momento en que levantó la mano, se detuvo en el aire. En un instante, Madeline apartó la muñeca y le dio una fuerte bofetada a Meredith en la cara.

Madeline agarró con fuerza la muñeca de Meredith mientras un brillo agudo aparecía en sus ojos. Parecía extremadamente prepotente. "¿Por qué? ¿En serio me preguntas por qué?

Meredith, ¿ya has olvidado lo que hiciste entonces?”.