El lodo salió disparado por todas partes y los rugidos llenaron el cielo, después de luchar durante más de dos horas, el último en pie fue el número tres. Se paró y sonrió, ni siquiera se molestó en limpiar el fango de su cara.
-¿Intentan luchar conmigo? Tienen que darse prisa -El Número tres se regodeó, y luego se giró para mirar al Hermano Gou-. ¿Qué tal? ¿Puedes tomar una decisión ahora?
-Claro, -el hermano Gou asintió-. Número tres, escucha.
Esta es una misión muy importante, así que no nos avergüences.
—Incluso si muero, me aseguraré de que el suegro del gran jefe esté a salvo.
Nadie se lamentó, habían perdido merecidamente y estaban dispuestos a luchar de manera justa por ello, también estaban dispuestos a admitir la derrota. Pero sabían muy bien que iban por el camino correcto para no dejar de hacerse más fuertes. Nunca debían dejar de mejorar, Todos ellos estaban entusiasmados, no porque Jiang Ning les recompensaría, sino por la fe y la confianza que Jiang Ning tenía en ellos.
Su Mei estaba en el hospital cuidando a Lin Wen, así que el deber de cocinar en casa naturalmente recaía en Lin Yuzhen. Pero comparada con Su Mei, la cocina de Lin Yuzhen no era realmente buena en absoluto.
-Podemos a salir a comer, yo Invito.
Lin Yuzhen echó un vistazo a todos los platos que había cocinado y que ahora estaban en la mesa, nada parecía estar bien en términos de color, olor o sabor. Rara vez cocinaba, Su Mei era una esposa y madre perfecta, así que nunca tuvo la oportunidad de cocinar.
-No hay necesidad. -A Jiang Ning no parecía importarle y comía como si todo fuera realmente sabroso.
Cuando salía a completar las misiones, había comido todo tipo de cosas antes y su estómago podía soportar cualquier cosa ahora. Además, era la primera vez que comía la comida de Lin Yuzhen, y parecía que Jiang Ning estaba disfrutándolo. En cambio, era Lin Yuzhen quien no soportaba comer nada de eso, estaba demasiado salado.
¡RING! ¡RING!
La familia de Su Mei era pobre y no podía contribuir tanto, así que su tía los había menospreciado durante varios años. Como resultado, Su Mei nunca compró nada para sí misma y guardaba el dinero para comprar algo lindo para su madre ya que de lo contrario sería etiquetada como una mala hija de nuevo.
-Papá definitivamente no puede ir -dijo Lin Yuzhen-. Mamá tiene que cuidarlo y definitivamente tampoco puede ir, así que ¿qué voy a hacer? Si nuestra familia no envía a alguien, no sé qué otras cosas horribles dirá mi tía.
Conocía a su tía mejor que nadie, ella decía lo que quería y se atrevía a decir absolutamente cualquier cosa.
-Entonces nosotros iremos -respondió Jiang Ning-, Es justo que celebremos el cumpleaños de nuestros mayores, yo también prepararé un regalo.
-Espera, ¿qué? —Lin Yuzhen negó rápido con la cabeza-. No, no gastes dinero.
Muy dentro no quería ir en lo absoluto, no le gustaba ver a esos parientes. Después de que Lin Wen quedó lisiado, ¿cuál pariente había mostrado alguna vez alguna preocupación por ellos? Incluso se rieron a sus espaldas diciendo que Lin Wen era un lisiado para el resto de su vida y que Su Mei estaba ciega por pensar que se había casado con un hombre rico cuando en realidad se había casado con un lisiado. Lin Yuzhen nunca habló de ello, pero lo sabía todo; era de buen corazón, pero eso no significaba que pudiera seguir fingiendo que no sabía que otros la maltrataban.
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