El Grupo Lin se había expandido a Shengcheng y era un asunto importante que afectaría la confianza de Lin Yuzhen y Jiang Ning no iba a dejar que nadie la derribara. Si alguien hacía que su preciosa esposa se sintiera infeliz, entonces las consecuencias serían muy graves, por lo que Shengcheng tenía que estabilizarse y estar en orden. Nadie iba a crear problemas.
Incluso a las así llamadas «familias poderosas» del Norte tampoco se les permitía causar problemas. Si alguien se atrevía a causar problemas, entonces Jiang Ning haría las cosas feas.
Jiang Ning se fue, mientras que el hermano Gou y el resto pusieron manos a la obra. En secreto, enviaron a Ye Kuang a Shengcheng y lo entregaron a manos de su enemigo.
Mientras. Lin Wen y Lin Yuzhen estaban en la sala de reuniones en el piso más alto del Grupo Lin. Estaban teniendo una reunión con socios de Shengcheng para hablar sobre su próximo paso.
La reunión estaba siendo un poco tensa porque hubo una competencia desagradable del lado de Shengcheng. Eso había afectado el progreso de sus proyectos.
La empresa del lado de Shengcheng no podía resolver esto por sí mismos, por lo que no tuvieron más remedio que buscar al Grupo Lin y ver si había algo que pudieran hacer.
Había competencia en todas partes, especialmente el tipo que luchó con uñas y dientes. No importa la industria en la que estuvieras, el líder sin duda había alcanzado la cima pisando innumerables cadáveres.
Ahora, el Grupo Lin enfrentaría tal problema. Tenían que enfrentarse a los veteranos de Shengcheng.
—¿La familia Jin?
Lin Yuzhen se sorprendió un poco cuando escuchó a quién se enfrentaban. Por supuesto que recordaba a la familia Jin. En aquel entonces, Jin Ran había intentado ligársela y Jiang Ning acabó rompiéndole las piernas. Luego, cuando quiso que un médico famoso tratara sus piernas, Jiang Ning lo expulsó de Donghai.
Ella no esperaba que la familia Jin intentara vengarse de esa manera.
—Sí, es esa familia Jin —asintió el representante de la compañía asociada—. La familia parece haber recibido una inyección de capital en efectivo y alguien les está diciendo qué hacer. Así que se han vuelto muy atrevidos, con decisión y bastante violentos.
No están tratando de alcanzar una relación de ganar-ganar con nosotros. Están aquí para tumbarnos y destruirnos.
Lin Wen frunció un poco el ceño.
El primer pensamiento de Jiang Ning fue que Shengcheng no era un lugar muy tranquilo en ese momento.
—Sí, tengo que ir esta vez —dijo Lin Yuzhen con impotencia mientras suspiraba.
Si no calmaba a la familia Jin, entonces sería difícil para el Grupo Lin sostenerse en Shengcheng e incluso podrían tener que pagar un alto precio por intentarlo. Eso no era lo que quería.
Aunque Lin Wen dijo que pondrían todos sus esfuerzos para ganar esta batalla, Lin Yuzhen esperaba poder resolver esto de una manera más pacífica. Lo peor sería que ambas partes sufrieran daños.
—Ok, iré contigo —dijo Jiang Ning con una sonrisa.
Lin Yuzhen no dio más detalles. Se centró en analizar sus datos y poner en orden sus informes. Mientras tanto, Jiang Ning terminó todos los bocadillos y dio la vuelta a la oficina para ver si alguien más había escondido en secreto más bocadillos.
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