—Hola amigo, ¿quieres algo de beber? —Yang Luolin preguntó con una sonrisa, tenía una expresión cálida y amistosa.
Jiang Ning lo miró.
—Tengo que manejar así que no puedo beber.
En realidad, era un simple chofer, Yang Luolin estaba aún más seguro.
—Eso es verdad, la seguridad de la directora Lin es lo más importante —dijo Yang Luolin—. Hace rato mi chofer tuvo un malentendido contigo, me gustaría disculparme en su nombre, no lo tomes muy a pecho.
Jiang Ning entrecerró los ojos, ¿en verdad ese sujeto estaba allí para disculparse? Lo miró con detenimiento, su mirada parecía escudriñarlo todo, y sabía lo que Yang Luolin estaba pensando en realidad, ¿creía que podía ocultarle sus verdaderas intenciones?
—Esta es mi tarjeta de presentación, puedes llamarme si necesitas algo.
Yang Luolin sacó de manera despectiva una tarjeta y se la dio a Jiang Ning con una mano.
Jiang Ning sonrió de manera burlona al ver el nombre en la tarjeta.
—¿El joven amo de la familia Yang en Jianzhou? —Lo miró con esa sonrisa extraña, no se esperaba toparse con un Yang de esta forma.
La información del mayordomo Zhao en realidad era confiable, la familia Yang tenía en la mira al Grupo Lin y Yang Luolin parecía tenerla en Lin Yuzhen y pretendía acercarse a ella a través de Jiang Ning.
—Un placer conocerlo. —Jiang Ning extendió la mano y contestó con cortesía—. No sabía que usted era el joven amo Yang, disculpe mi rudeza.
Yang Luolin estaba satisfecho con la reacción de Jiang Ning, era con exactitud el efecto que buscaba. En un instante Yang Luolin se mostró arrogante de nuevo, el hecho de que se acercara a hablar con un chofer como él lo debería considerar un gran honor. Estrechó las manos con Jiang Ning con ligereza y le dijo con calma.
—Si eres el chofer de la directora Lin eso quiere decir que eres una persona de confianza para ella.
El chofer de Lin Yuzhen en definitiva sabía más sobre ella, pero Yang Luolin no creía necesitar clases de nadie para cortejar a una mujer, eso era una broma.
—¿No me cree?
Jiang Ning mantuvo una sonrisa extraña y mientras terminaba de decir eso los músicos comenzaron a tocar un número de baile, algunos invitados formaron parejas y comenzaron a bailar.
—Joven amo Yang, si no me cree trate de sacar a bailar a la directora Lin y vea si acepta. —dijo con indiferencia—. Si lo logra, me comeré todos estos pastelillos.
Yang Luolin arqueó la ceja, no se quería rebajar a hacer una apuesta con Jiang Ning, pero sus palabras en realidad lo habían irritado.
Lin Yuzhen rechazó el vino hace unos instantes ¿lo rechazaría para bailar? No era posible. Nadie lo rechazaría, era el hijo primogénito de la familia Yang, ¡El heredero del Grupo Yang!
—Y si pierde, entonces tendrá que comer… —Jiang Ning sostuvo una bandeja grande llena de pastelillos muy coloridos— estos pastelillos.
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