Héroe Retrasado romance Capítulo 361

¡PAM!

Yang Dong estaba furioso y azotó con fuerza la palma de la mano en la mesa.

―¿Qué está pasando? ―rugió―. ¿Dónde están? ¿Por qué no ha vuelto ninguno? ¿Dónde están?

―Me temo que están muertos. ―Yang Huang se veía tan sombrío como siempre, pero en su voz había algo de regocijo.

―¿Muertos? ―A Yang Dong le temblaron los labios.

La familia Yang había gastado mucho dinero para entrenar y cuidar a esos peleadores. Gastaban tanto en ellos cada año. Nunca habían fracasado en ninguna misión que les asignara la familia Yang. ¿Cómo fue que murieron todos esta vez? Era una pérdida terrible.

La familia Yang quería vengarse de los Lin y quería destruir a los proveedores del Grupo Lin en Jianzhou, pero se habían retirado para que no pudieran descargar su ira. Habían enviado hombres directamente a Donghai pero no hubo noticia de ninguno. Esos dieciséis hábiles peleadores le pertenecían a los Yang.

―Ha sido una pérdida realmente terrible para la familia Yang ―dijo Yang Huang―. Papá, no podemos ignorar el desarrollo de la familia sólo porque Yang Luolin está muerto.

Su tono de voz era distante y sonaba un poco molesto. Yang Huang se volteó y lo miró.

―¿Qué dijiste? Es tu hijo. Lo mataron. ¿No quieres vengarlo?

Yang Huang no dijo nada pero se rio con frialdad por dentro. ¿Su hijo? En realidad, Yang Luolin era su hermano y Yang Huang no quería admitirlo.

―Tenemos que vengarnos pero no podemos dejar que la familia sufra pérdidas a causa de esto. ―Yang Huang sacudió la cabeza―. Si esos dieciséis de verdad cayeron en Donghai, entonces es una pérdida enorme. Si el heredero está muerto, podemos nombrar a alguien más. Pero será difícil encontrar nuevos peleadores para criarlos y entrenarlos.

La cara de Yang Dong comenzó a ponerse roja de la rabia. ¿Qué quería decir Yang Huang? ¿Cambiar el heredero?

―¿A qué te refieres con cambiar el heredero así sin más? ¿A quién? ―bramó Yang Dong―. ¿Quieres que te retire del puesto de líder de la familia?

Yang Huang también estaba enojado pero sólo apretó la mandíbula.

―Si crees que necesitas reemplazarme, hazlo. De todos modos siempre tienes la última palabra.

Yang Dong tembló un poco al oír eso. Miró con firmeza a Yang Huang y tuvo un mal presentimiento. Su hijo siempre había sido muy obediente. Aunque era dominante fuera de la casa, siempre escuchaba todo lo que Yang Dong decía cuando estaban ahí. Hoy le había respondido. ¿Acaso ya lo sabía? De inmediato Yang Dong se obligó a calmarse. Pudo controlar la familia Yang por tantos años, así que no era un idiota. Supuso que Yang Huang lo sabía. Esa loca le había dicho.

―Luolin está muerto, entonces, ¿quién heredara el futuro de la familia Yang? No sólo teníamos a Yang Luolin. Mientras sea un Yang y tenga la capacidad de llevar a la familia al siguiente nivel, cambiar de heredero no necesariamente es algo malo. ―Yang Huang siguió con frialdad―. Siempre he sentido que Yang Xiao es una buena opción.

―¡Tonterías! ―rugió Yang Dong―. Ni siquiera puede considerársele un miembro de la familia. ¿Acaso vas a encontrar otro? ―Las palabras de Yang Huang destilaban sarcasmo―. ¿O quieres otra oportunidad de darme un hermano mientras todavía puedes? ¿Necesitas una nuera que te ayude?

Eso era casi como pelearse a golpes con su padre. Yang Dong casi se desplomó. Se apoyó en una mesa justo a tiempo para no caerse. Miró Yang Huang y su respiración se aceleró un poco. Después de un momento, dijo lentamente:

―¡Lo hice por el bien de la familia!

―Ajá, ¿de verdad? ¿Por el bien de la familia? ¿Y ahora? ―Yang Huang se rebeló contra su padre por primera vez―. ¿Vas a hacerlo de nuevo por el bien de la familia?

―¿Qué? ¿Cómo te atreves a cuestionar lo que hago? ―Yang Dong entrecerró los ojos y tenía una mirada maliciosa en el rostro―. En esta familia, yo, Yang Dong, tomo las decisiones.

Si él quería, podía cambiar al líder de la familia cuando fuera. Yang Huang no dijo nada más. Respiró hondo varias veces y se tranquilizó.

―Entonces hazlo. Quieres vengar a Yang Luolin para poder seguir enviando gente a Donghai y atacar al Grupo Lin. Tienes la última palabra sobre todo lo que hace la familia Yang.

Luego se dio la vuelta y se fue sin mirar atrás. Yang Dong estaba tan enojado que le temblaba el cuerpo pero sólo podía golpear su bastón y gritar:

―¡Hijo desleal! Todos ustedes son hijos desleales. ¿De verdad cree que no podré con esa familia Lin? ―se mofó―. Si voy en serio, nadie sobrevivirá.

Había muchos recursos que podía utilizar. ¿Qué era para él el Grupo Lin? ¿Qué más daba si los dieciséis peleadores estaban muertos? ¿De verdad Yang Huang creía que Yang Huang no tenía más ases bajo la manga?

Yang Dong podía darse cuenta de que su hijo se había puesto en su contra. Yang Huang iba a ponerse del lado de Yang Xiao y le iba a arrebatar los bienes de la familia. ¡Pues que siguieran soñando! Padre e hija podían seguir soñando. Mientras él siguiera con vida, Yang Xiao podía olvidarse de quitarle un solo centavo a la familia Yang.

Pronto, Yang Dong tomó una decisión. Iba a ser malvado y decidido e iba a dejar de andarse por las ramas. Ya que los peleadores que la familia había preparado no eran lo suficientemente buenos, iba a gastar dinero para contratar a alguien más. Quería un asesino, así que iba a conseguir un profesional para hacer el trabajo.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Héroe Retrasado