Héroe Retrasado romance Capítulo 391

Jiang Ning colgó el teléfono y miró a Su Mei.

—Mamá, Yuzhen hizo una nueva amiga, ¿quieres invitarla a casa para cenar?

—¿Una amiga?

Su Mei estaba gratamente sorprendida, Lin Yuzhen había trabajado muy duro por muchos años para mantener a su familia y no le sobraba tiempo para hacer amigos, siempre se había sentido mal por ella, así que cuando escuchó que tenía una nueva amiga, consintió de inmediato.

—Por supuesto, en un rato más haré las compras y prepararé uno de mis mejores platillos.

Jiang Ning asintió con la cabeza y se marchó. Por lo que Lin Yuzhen le había contado, esto no era para nada un problema, la otra parte era de Shenghai, una ciudad que estaba bastante cerca del norte. La expansión en la región del sureste iba según el plan del Grupo Lin, la familia Yang había sido eliminada y el círculo ilegal de Jianzhou también había sido purgado, llevaría un tiempo restablecer el orden en la zona. Huang Yuming ya había enviado hombres a hacerlo, así que Jiang Ning no estaba preocupado y no tenía prisa. Todo giraba en torno a la expansión del Grupo Lin, se aseguraría de que Lin Yuzhen fuera más sobresaliente que esa mujer. Si esa gente de Shenghai viniera ahora, eso haría las cosas más interesantes.

Lin Yuzhen seguía aturdida después de que Jiang Ning colgara el teléfono, Ye Qingwu estaba acostada a su lado y también lo había escuchado, estaba tan perpleja como ella. Se dio cuenta de que Lin Yuzhen estaba un poco nerviosa y temía que la regañaran cuando le contara a su esposo lo sucedido, pero en lugar de enfadarse con Lin Yuzhen por meterse en un problema tan grande, se molestó porque Lin Yuzhen había recordado mal lo que le había dicho. Le dijo que no había nadie en el mundo a quien Lin Yuzhen no pudiera ofender, esas eran unas palabras muy dominantes, Ye Qingwu se giró y la miró con asombro.

—Yuzhen, ese... ¿era tu esposo?

Se sentía como si estuviera en un sueño, había visto a mucha gente rica y poderosa, pero nunca había conocido a nadie que se atreviera a decir palabras tan arrogantes. Lin Yuzhen, que estaba aturdida, asintió un poco con la cabeza. Así que Jiang Ning había dicho el mundo entero. ¿Cómo es que ella lo recordaba sólo como Donghai? Debía ser una idiota.

—¿Tu esposo tiene un segundo nombre? —Ye Qingwu preguntó con curiosidad y a la vez con nerviosismo—. ¿Acaso «arrogancia» es su segundo nombre?

—Joven amo Su, se dice que Donghai es territorio prohibido y a nadie se le permite causar problemas. ¿Quieres recurrir a una de tus conexiones para enviar un mensaje primero?

Ya todo el mundo conocía la reputación de Donghai como territorio prohibido y eran famosos en la región del sureste, incluso la gente de Shenghai había oído hablar de ello.

—¿Territorio prohibido? Patrañas.

A Su Mingquan no le importó en lo absoluto, era sólo una pequeña ciudad, así que ¿cómo podría ser un territorio prohibido? No le importaba si se las habían arreglado para engañar a la gente del sureste, pero ¿cómo podían pretender ser todopoderosos frente a una ciudad tan importante como Shenghai? La familia Su nunca se había preocupado por ningún territorio prohibido.