incitame a pecar romance Capítulo 42

PROTECCION

MONICA

Me encuentro en mi oficina revisando unos papeles cuando de repente se me viene a mi mente algo que no había pensado, que idiota me siento como no lo había pensado antes, como él no lo había pensado, en todas las veces que Maxwell y yo hemos estado juntos nunca hemos usado protección y eso me hace ponerme nerviosa ya que yo no estoy lista para tener hijos ya que apenas empecé a vivir un poco y aunque ame a Maxwell todavía no llevamos mucho tiempo, Maxwell es un idiota, pienso en esto como media hora y sin perder el tiempo le llamo a Ángel, pensando en que hare si estoy embarazada, solo sé que voy a matar a Maxwell para luego suicidarme yo.

-Ángel ¿me puedes hacer un favor?- le digo por el teléfono, un poco nerviosa se oye mi voz.

-Claro señorita ¿Qué se le ofrece?- me da pena decir esto pero no aguanto la duda, así que lo suelto.

-Necesito que vayas a la farmacia y.... me compres tres pruebas de embarazo, que sean las mejor por favor y de distinta marca- ella se queda callada por unos segundos y eso hace que me dé más vergüenza.

-Claro señorita en un momento se lo llevo- la espero con ansias, minutos que se me hacen eternos y estoy que hago un hoyo en la oficina de tantas vueltas que estoy dando, me llevo las manos a la cabeza jalándome el cabello y me restrinjo por querer gritar, creo que nunca me había sentido tan tonta.

-Aquí tiene señorita- entra una agotada Ángel, se ve que estuvo corriendo, la miro hago una mueca me siento en mi silla, ella pone las pruebas en mi escritorio y le digo.

-Gracias ya te puedes retirar y gracias por este favor, por favor no digas nada de esto- asiente y se despide, cuando veo que cierra la puerta yo apresuradamente me dirijo a mi baño el cual está en mi oficina y me hago las tres pruebas leyendo primero las instrucciones, las tomo en mis manos mirándolas y las dejo en el lavabo ansiosa por lo que salga.

Han pasado veinte minutos pero yo no me atrevo a verlos, simplemente no tengo el valor, suspiro abriendo la primera con un poco de temor, pero cuando la veo suelto un suspiro de alivio.

Salió negativo, un poco más confiada saco la otra y también sale negativa, la tercera salió de nuevo negativo a lo que yo suspiro aliviada nuevamente recargándome en la puerta, tiro las cajas en el bote de basura de mi oficina y me siento en mi silla, viendo el techo pero siento una incomodidad en mi pecho, una parte de mi descanso de no estar embarazada pero la otra está un poco decepcionada, pero bueno ahora tengo que hablar con Maxwell respecto a la protección así que espero a que me visite como lo hace casi todos los días, pero esta vez lo espero con ansias.

Pasa un poco tiempo cuando me comunican que Maxwell ha llegado me preparo para lo voy a decir, así que me acomodo mejor en mi silla cuando el pasa por la puerta, con sus manos metidas en los bolsillos de su pantalón de vestir.

-Hola mi bella novia, ¿Por qué tan seria?- pregunta cuando me ve, pero yo no quito mi expresión seria y solo digo.

-Tenemos que hablar- el frunce el ceño.

-Siéntate- él lo hace todavía viéndome con el ceño fruncido.

-¿De qué quieres hablar?- pregunta dudoso.

-Es de algo importante que nos concierne a los dos- hago una pausa y se tensa.

-Dilo- ordena, hago una pausa, preparando mis palabras.

-Debemos de cuidarnos, en este tiempo no nos hemos estado cuidándonos, y puede que pase un accidente como un bebe- a él le brillan los ojos y se levanta de la silla con una sonrisa dirigiéndose a mí.

-Ah yo pensé que querías terminar conmigo- se ríe y se pone junto a mí- solo era eso, no te preocupes seremos buenos padres- yo lo miro mal, y me di cuenta de que si es un idiota.

-Debemos cuidarnos y punto este tema no se discute- el me toca la mejilla queriéndome convencer con esos ojos de depredador pero no voy a caer, no esta vez.

-Pero yo quiero ser padre además nuestros hijos serán hermosos- concuerdo con lo último pero me niego a tener un hijo ahora- se parecerán a mí- si es un idiota.

-La decisión está tomada usaras condón o yo tomare pastillas o ambas, iré a que me recomiende el mejor método anticonceptivo un ginecólogo- me paro de la silla para estar frente a frente y vea que no voy a declinar, él se recompone.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: incitame a pecar