La Caída y el Rescate del Amor Novela romance Capítulo 1199

Capítulo 1199

ɔia que los lazos de sangre no se podían romper completamente, por eso dejó un lugar suave en su corazón para ellos.

ro, eso le trajo un problema subyacente.

raba de reojo al Sr. Morales, viéndolo parado en silencio, con el rostro inexpresivo.

siento, abuelo.”

Sr. Morales no reacciono, solo se quedó mirando las llamas que ardian intensamente y dijo con indiferencia:

i era hora. Cuando no tienes nada, deseas menos”

imo un mendigo que no tiene nada, todo lo que queria era una comida abundante.

lena frunció el ceño, también miró el incendio y dijo con calma:

oy a encontrarles un nuevo lugar para vivir”

lo es necesario.”

ustavo rechazó suavemente. “Compré una casa en el campo porque el aire alli es mejor, yo… la llevare a vivir alli

lo ire al campol

eyes rechazó rotundamente, “Ella tiene que pagarme mi casa! ¡Fue ella quien quemó mi casal Debe pagärmela! No iré al campol Prefiero morir antes

ue ir!”

abia disfrutado de la riqueza y el lujo toda su vida, ¿cómo podría ir a un lugar tan remoto ahora?

Esta casa, nunca fue tuya Gustavo parecia haber agotado su paciencia con Reyes, su tono era calmado, como si lo hubiera visto todo

¿Que no es mio?! Gustavo, que me has dado después de vivir juntos toda nuestra vida?”

1 finalmente cerro los ojos con cansancio y no respondió mas.

¿Que te dio? Te dio una vida de paciencia. Todo lo de la familia Morales, lo destruiste Reyes, doscientos millones de dólares, estoy esperando el día en jue pagues! ¿No te encanta el dinero? Entonces, vive y muere por el dinero.”

Selena no podia ser indiferente al Sr. Morales, ante las acusaciones de Reyes, solo sentia una tristeza infinita.

El fuego seguia ardiendo, los bomberos finalmente llegaron.

Jero, todos sabian que todo, lo que debía quemarse y lo que no, ya estaba casi quemado.

Todo estaba mas allá de la reparación

Despues de decirle la última palabra a Reyes, respiró hondo, se preparó para irse, pero alguien la agarro fuertemente del brazo

Selenal Te lo advierto, ¡debes casarte con Rhys la próxima semanal Esos regalos de boda…”

Ella sonrio débilmente, qué descarada.

“¿Quien eres tú para advertirme? ¿Y si no me caso, que vas a hacer? Los regalos de boda. ¿Cómo deberiamos manejarlos?”

Dicho eso, agarro la muñeca de Reyes, apretando sus huesos y la alejo de ella,

Al final, solo le dejó una mirada fria, se metió las manos en los bolsillos de su abrigo y se fue.

“Selena! ¡Eres una desgraciada“”

Un grito agudo vino de detras, seguido por la voz enojada de Gustavo

¿Has terminado de hacer un escándalo?”

Ella se detuvo un momento, pero al final subió directamente al coche en el que había venido

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