Capítulo 257
Y al lado, otra mujer, al ver a Rosa y Raquel en ese estado, instintivamente saltó para intentar rescatarlas. Sin embargo, Selena levantó una pierna y pateó
con fuerza y precisión la rodilla de la mujer. La mujer tropezó, gritó y en un instante cayó de rodillas al suelo.
Estos movimientos pueden no parecer gran cosa, simplemente sujetando un brazo de una persona y sométiendo a dos con fuerza bruta.
Pero esta serie de movimientos se ejecutó con tal fluidez y estilo, que dejó a los presentes asombrados.
Pero pronto, la gente se calmó.
En esta sociedad, no hay nada malo en que una chica que se preocupa por su propia protección aprenda algunas técnicas de autodefensa.
Solo David seguía mirando a Selena, entrecerrando los ojos ligeramente.
“¡Sueltame! ¡Selena, maldita!”
Raquel, que nunca había sufrido tal humillación, reaccions de inmediato, sintiéndose tanto avergonzada como enfadada, y empezó a insultar a Selena sin ningún respeto. Selena apretó su agarre, torciendo aún más el brazo de Raquel.
Petrona corrió de repente para ayudar, restringiendo a otra mujer que parecía querer moverse.
Rosa estaba tan furiosa que se puso pálida y no dejaba de temblar.
¡Nadie podía soportar tanta humillación!
¡Había sido humillada por Selena frente a todos!
¡Había sido humillada por una maldita!
“¡Habla!” Selena gritó.
“¡Lárgate! ¡Petra! ¡Te arrancaré… ah!!”
“¡Ah!”
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