Capítulo 263
Cuando Héctor se enteró de que Rosa había sido intimidada por Selena en el centro comercial, inmediatamente se apuró para llegar.
Abrió la puerta del coche con impaciencia y bajó, sin embargo, vio dos figuras familiares no muy lejos.
Eran Selena y Petrona.
Petrona ya se había dado la vuelta para irse.
Y los otros dos hombres estaban de espaldas a él, no podía decir quiénes eran solo por ver sus espaldas.
¿Por qué Selena estaba tan cerca de aquel hombre?
¿Cómo pudo permitir que otro hombre la abrazara?
Además, cuando ella se dio la vuelta, claramente vio a él, pero sus ojos…
No había ninguna emoción, tan fríos como si estuviera mirando a un extraño.
¿No sentía ni un poco de culpa ni pánico mientras estaba en los brazos de otro hombre frente a él?
Después de todo, ella solia preocuparse tanto por él, en la oficina, incluso si accidentalmente tenía contacto físico con algunos colegas masculinos, se pondría nerviosa y se disculparía con él, y conscientemente evitaría a los del sexo opuesto, teniendo que él malinterpretara.
¿Cómo pudo ser tan fría ahora, incluso con la mirada tan natural?
Incluso si él le había fallado, ¿cuánto tiempo ha pasado desde que se separaron?
Héctor frunció el ceño cada vez más, sin embargo, Selena no volvió a mirarlo, sino que se metió en el coche.
Héctor sintió un inexplicable pánico en su corazón, y sin poder controlarse, dio unos pasos hacia adelante.
“Héctor!”
En ese momento, un grito lloroso de Raquel detuvo a Héctor.
Luego, un cuerpo suave y fragante se arrojó en sus brazos.
Héctor…
Al ver a Héctor, Rosa se lanzó inmediatamente en sus brazos.
“Héctor… tienes que vengarte por nosotros, Selena, esa perra, nos intimidó tanto hoy, mira la frente de Rosa, todo fue ella, incluso forzó a Rosa a golpear
su cabeza contra el suelo tres veces!”
Cuando David se dio la vuelta para ir al otro lado del coche, se detuvo un poco, entrecerró los ojos y miró a José antes de meterse en el coche.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: La Caída y el Rescate del Amor Novela