La mate de Hades. romance Capítulo 4

Había corrido ya varios kilómetros, estaba tan lejos de casa. Ella quiso ir a su hogar, pero al parecer era lo suficientemente estúpida como para correr hacia el bosque tratando perderse en él, el alfa la había perseguido de cerca y en ese momento la mirada de Hades estaba puesta sobre el cuerpo lobuno de la chica. —Transfórmate —La mirada de él era pesada, su voz salió dura, lo había repetido ya tantas veces que Ónix se sorprendió del hecho de que conservara la paciencia.

Los ojos de ella lo miraron desde su estatura, este la miraba fijo. Había hecho una hasta lo imposible por no ser arrastrada hasta la cabaña del alfa, pero lastimosamente en los planes de Hades no estaba aquello. Ella se quedó ahí de pie y no había hecho ni un movimiento.

—Es la última vez que te lo ordeno, si no lo haces en el minuto restante créeme que no te gustara—La mirada del alfa era oscura, ¿Por qué le toco él? ¿no podía haber sido alguna otra persona?

La chica se movió de inmediato, entro a una habitación en la que estaba el alfa hacia varios minutos atrás, al entrar se transformó y envolvió su cuerpo en una de las sabanas que estaban frente al mueble sin espaldar delante de la cama. —Debiste seguir corriendo estúpida—se dijo así misma en un susurro.

—Si hubiese sabido que encontraría a mi mate al llegar hubiese venido hacía mucho tiempo. —Su voz salió tan lejana pero su cuerpo estaba tan cerca, tan cálido, el olor de su mate la envolvió violentamente y no tuvo más remedio de cerrar sus ojos y disfrutar. —Vendrás a vivir conmigo—Sus palabras parecían haber sido un anuncio, no era una consulta, parecían ser un hecho.

—Lo siento alfa, pero yo no puedo hacer eso. —Aquella chica tomo valentía alejándose del cuerpo de su alfa.

Él se carcajeo, tan sexy. —No es cuestión de que puedas cachorra, es cuestión de que yo lo quiera—La mirada de ella había viajado hasta el negando.

—Tú no puedes hacer eso.

—¿tú? Al parecer empezamos mal esta relación. —Ella lo miro mal.

—¿Relación? Yo no he empezado ninguna.

—Tu forma de osarme me prende porque créeme que amare someterte, omega insolente —Sus palabras estremecieron a la chica a su frente internamente.

—Entiendo sus palabras alfa Hades, pero yo no quería encontrarlo, no quiero vivir con usted y mucho menos ser sometida. Me iré.

—Haría una guerra si no te tengo conmigo y si la contrincante eres tú... luchare, ganare y te tendré.

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