La secretaria Indomable romance Capítulo 82

Jack Bill

La paciencia se había ido por la borda. Y si estaba ya arta de que mi tío se pase conmigo. Lo había soportado durante mucho tiempo. Claro está que ese carbón no quiere vivir. Miro a mi padre, que trata de encontrar una palabra razonables, para decirme y que me calme. Algo que él sabe que no encontrara. 

Antes, de buscar mi arma favorita, le llega un mensaje a papa, él lo mira y arquea una cejas. Eso me dice que no es buena señal. Tira del vaso que tiene en su mano. Y lo veo volar hasta queda añico en la pared. Ahora lo veo, en mi estado. Loco por meterle dos plomos en sus bolas sucias.

_ ¿Cómo se atreve, a amenazarme, yo Marcelo le he dado de todo a este hijoputa?

_ ¡Pues, su sed, es verte en la tumba! _ soplo sin morder mis palabras.

_ ¡Ya está bien, pero lo quería ahora mismo es eso! ¡Que estemos furiosos salgamos corriendo!

¨_ ¡Pues, lo logro, toco a la persona equivocada!

_ ¡Calma, pensemos en un plan, él debe tener todo tipo de trampa!

_¡Pues, a mí me vale un puto carajo, sus trampas, mi chica está en sus manos!

_ ¡Cálmate, y piensa, así no lograrás nada!

_ ¡Hayyyyy, que me lleve el carajo, lo mataré!

 Grito desesperado No quiero perder un minuto más, si pudo intentar con papa imagino que ya debe de haber torturado a mi katty, y si eso pasa, le are pedacito esos dedos que la toco.

_ ¡Deja tu enojo, y piensa, que ahora me pones nerviosos de tanto moverte!

_ ¡Papa, llámalo ahora!

_ ¿Qué quiere decirle?

_ ¡Pues, negociar que más!

Ante de Marcelo, hacer su llamada, Víctor ya había pensado en un plan. Contestaron la llamada. Mientras tanto, Jack seguía la línea de la llamada y estaba ahora viajando lejos porque la línea rastreada estaba en un avión. 

_ ¡Maldicen, desgraciados! ¡Se la está llevando!

_ ¡Víctor, como se te ocurre! Bastardo. Así me pagas después de limpiar todas tus mierdas.

_ ¡Bueno, hermano, gracias por eso, Pero ahora quiero algo más! Quiero tus posesiones, y tu hijo trabajo mucho y veo lo prospero que es, ahora quiero lo que tienes y la dejo vivir. 

_ ¿Qué? ¿Cómo se te ocurre pedir cosas, que nunca tendrás?

_ ¡Pues, mira, no hay de otra, tendré que quedarme con ella, te juro que gusta todo de su cuerpo, es tan sexy!

Jack, jalo el celular y hablo.

_ ¡Imbécil, demente si la tocas te sacaré las bolas y te las haré comer, te juro que olvidaré que fuiste sangre de los Bill, te dejaré muerto!

_ ¡Hablas, mucho porque no vienes, a buscar la así sabré tu valor!

_ ¡Ahhhh, demonio te mataré! 

Jack, gritaba desesperado. Ahora recordó a la chica que había dicho que la mujer que hablo mal con katty fue quien llamo. Cogió su celular y llamo a Flavio.

_ ¡Tráiganla aquí, ahora! 

Flavio, desde el otro lado, escucho los gritos de Jack y él, más que nadie, sabía que el mismo demonio estaba suelto.

Un momento después, trajeron la chica, ella gritaba desesperadamente. Cuando le quitan el moño negro de la cabeza, ella vio a Jack sentado, y una botella de whisky en su mano, su cara esta lleva de facciones, muy elevada y malévola, la mirada de este ardía. Solo falta un chispeo más estallaría en sangre.

_ ¡No… hice…, nada porque me traen…! Aquí. _ dice ella entre sollozo

_ ¿Con quién hablaste, hoy?

_ ¡¿Ehy? Con mi hermano. 

_ ¿Qué hace tu hermano, llámalo hora? 

_ ¿por qué?

_ ¡Pregunta una vez, más te dejo una bala en la entre pierna!

La chica, cerro sus piernas, bien duras. Y cogió su móvil temblando, y hablo con su hermano.

Jack, le indico donde que él tenía que venir y la dejo de lado.

_ ¡Él va la vieja, mina en bajo inframundo!

_ ¡Ohhhh, así que eres su confidente aquí cierto! Sabes muy bien sus pases, dime cuáles on sus hombres. ¡Los traicioneros como tú!

_ ¡ahhy, señor él tiene muchos hombres ahora! Los más temerosos están con el.

_ ¡Claro que sé que compro algunos cavos míos, por eso se atrevió a atacarme y tú eres que le dictaban mis pasos!

_ ¡Lamento haber hecho eso!

_ ¡Pues, muy tarde el que me traiciona me la paga!

Una cosa, si estaba claro, el que traicionara estaba claro lo que le pertenecía. Y lamento lo de tu hermana no me gusta tocar mujeres, dejaré algo en ti para que en tu próxima vida me recuerde y me busque.

_ ¡Nooo... por favor señor nooo... ella es inocente!

_ ¡Mi mujer también, y aun así se la llevaron, por cada una de las cosas que no sé que le estarían haciendo ahora, pagaras las consecuencias antes!

Dicho, eso, el hombre se va, camina entre los demás y deja a los otros hombres dentro con Felipe y su hermana, solo el infierno sabría lo que le pasara haya adentro.

Jack subió su jeep con la cabeza puesta en una ruta que solo lleva al mismo infierno, llamo a así un clan y como jefe del valle de primavera. Bajo su carro a medio camino y empezó a caminar, era su barrio, su puta ruta. Su santuario.

El lugar está más sobrio que la misma soledad, desde que se escuchó el motor de Jack todo entraron a su escondite, Jack sostenía dos pistolas y una ametralladora por la espalda. Con la camisa desabotonada. Esos tatuajes de lobo hambriento está al aire libre.

Disparo como pudo al aire libre y todo su manada salían uno por uno.

Jack grito y todo sentían que la ira y la rabia de este estaba por la cabeza de cualquiera. Todo lo llamado clan estaban en una fila frente a él.

El que hablara debía tener más bolas que la misma sandia.

Al ver que todo un clan, una manada, estaba en una fila, miro y disparo en una dirección. Su puntería era tan buena que claro la cabeza de Víctor en el papel.

Todo sus hombres sacaron sus armas y le quedaron mirando.

_ ¡Me traerán la cabeza de este imbécil, lo quiero en mi bandeja!._ dijo jack con la ira en su obtente cabeza

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