Lo Mejor de Tu Vida romance Capítulo 129

Noelia bajó la ventanilla del auto y dijo:

—Te llamaré tan pronto como termine.

Marc la miró afectuoso:

—Vale, te espero.

Nunca necesitaban palabras adicionales, solo una mirada podía saber lo que pensaba el otro en el corazón.

Ella mantuvo su mirada hacia atrás hasta que Marc desapareciera de su vista, fue entonces en que empezó a pensar en lo de la ceremonia de bienvenida.

Todavía faltaba una hora para que comenzara la ceremonia.

Ella siguió las instrucciones de Sabela y esperó en una sala de descanso secreta.

Todo estaba listo, Sabela le dijo a Federico sobre las cartas de renuncia de las dos personas, lo que a ella solo le parecía muy ridículo y gracioso.

Los dos confiaron en la traición y las intrigas para poder estar en la industria de entretenimiento hasta el día de hoy, sin embargo, todavía no habían hecho ningún progreso. El Olay Entretenimiento los ayudó a desarrollarse, pero no estaban agradecidos en absoluto.

El deseo por la fama y la fortuna ya los había tragado por completo.

—Bienvenido de nuevo —al ver a Federico, los personas que llevaban muchos años trabajando en el Olay Entretenimiento lo saludaron con mucho entusiasmo—, te hemos estado esperando.

Él asintió con su cabeza sonriendo, y entró en el ascensor junto con ellos.

Fue una coincidencia que Esperando entró en el ascensor con Mónica también, en un instante la atmósfera en ese espacio pequeño se volvió un poco vergonzosa.

—¡Qué emoción que tengo para la ceremonia de bienvenida! Director Federico, ya regresaste esta vez, no te vas más, ¿sí?

Antes, Federico había sido el director de las artistas en el Olay Entretenimiento, hasta ahora el puesto estaba vacante, por eso, los personales seguían tratándolo del director.

Federico vio que Esperanza estaba parada adelante de él, quien era tan arrogante y engreída, y contestó:

—No, no me voy más.

Esperanza resopló con desprecio cuando escuchó las palabras, salió del ascensor y esperó específicamente a Federico.

Federico también salió del ascensor.

—Ahorra tus energías ya. Cuando te fuiste del Olay Entretenimiento, la empresa no tenía nada que ver con la de ahora. Hemos sido nosotros quienes acompañan a la presidenta Sabela hasta hoy. ¿Crees que ahora volviste y puedes gozar los frutos de todos?

—Nuca lo he pensado así, no me impongas tus ideas —respondió con indiferencia.

—¿Ah sí? Pues esperaremos y veremos —Esperanza lo miró, mostrando una sonrisa de desprecio.

Federico sabía lo que estaba pensando y la miró a la ligera diciendo:

—He estado esperando durante cinco años y no me importa esperar unos minutos más. Con lo que me pertenece, nunca te lo cederé.

—Olay se ha desarrollado hasta el día de hoy, no gracias a ustedes dos en absoluto. Tal vez Olay Entretenimiento habría sido mejor sin ustedes.

Si fuera antes de hoy, Esperanza estaría preocupada por estas palabras, pero por la mañana ella y Alan ya habían amenazado a Sabela y de seguro la presidenta sabía qué era lo más importante. Ella pensaba que Federico sería el que perdería en este juego!

Pensando de esta manera, Esperanza se volvió más creída.

Ella levantó la barbilla con arrogancia:

—¡Veo que eres tú quien está soñando despierto!

—Ya que elegiste irte, ¿por qué ahora vuelves ahora?

—La situación interna del Olay Entretenimiento ha cambiado mucho. La presidenta Sabela solo toma en cuenta el pasado de trabajar contigo, por eso te ha invitado a regresar. Si yo fuera tú, me iría lo antes posible. Esto será bueno para todos.

Esperanza se fue con Mónica, dejando a Federico quedarse en su sitio solo.

Federico había escuchado claramente el orgullo y el desprecio entre sus palabras, y mostró una sonrisa impotente.

—Cinco años les han hecho aún más ignorantes.

A medida que el tiempo se acercaba cada vez más, Eva seguía mirando la hora, estaba más nerviosa que Noelia.

—Todavía quedan veinte minutos, Eva, siéntate un rato —dijo Noelia.

—¡Quiero ver a Federico perderlo todo de nuevo!

Alan sonrió, se dio la vuelta y fue al otro lado para esperar a Sabela. Después de eso, Alan acompañó a Sabela a ingresar a la ceremonia, mientras que Esperanza estaba abajo del escenario para organizar bien el trabajo.

Entre los asientos en el escenario, Sabela se sentaba en el medio, Alan se sentó a la izquierda y el otro gerente del Olay estaba sentado a la derecha.

Sabela echó un vistazo en su reloj, sonrió a los espectadores y luego tomó el micrófono.

—Señoras y señores, por favor, estén tranquilos. Nuestra ceremonia de bienvenida comenzará pronto.

—En primer lugar, me gustaría agradecerles a todos por presentarse. Lo que voy a anunciar a continuación es muy importante para el futuro del Olay Entretenimiento. Me siento honrada de poder compartir esta alegría con ustedes.

—El Olay Entretenimiento se ha desarrollado espectacularmente durante estos años y tiene la fuerza y el nivel para expandir su negocio. Las tres subsidiarias abrirán oficialmente a fin de mes y actualmente están en proceso de reclutar a talentosos. Quiero aprovechar esta oportunidad para hacer un anuncio de recluta aquí. Si están interesados en unirse al Olay Entretenimiento, el salario es absolutamente agradable.

Al escuchar las palabras insignificantes de Sabela, Esperanza se puso mucho más aliviadas.

Parecía que no hablaría de Federico. Entre la multitud, levantó la cabeza e intercambió una mirada con Alan.

¡Su plan fue exitoso!

Sin embargo, Sabela capturó la mirada de ella.

Cuando todos pensaba que este era el tema de hoy, volvió a hablar y le dio a Esperanza un golpe fatal.

—Lo más importante es que invité a un viejo amigo hoy. Él fue una vez el director de las artistas en Olay Entretenimiento, y también será el director de los artistas en el futuro. Es Federico Cabrera. Por favor, aplaudan y denle la bienvenida más calurosa.

Sabela tomó la iniciativa de levantarse y miró en dirección a la entrada.

Todos se dieron la vuelta. Federico, vestido con un traje blanco plateado, elegante y guapo, caminó lentamente hacia el escenario y se paró junto a Sabela.

En este momento, tanto Esperanza como Alan se quedaron estupefactos, y entraron extremadamente en pánico.

Su amenaza no sirvió para nada a Sabela.

«¡No es posible! ¡¿Sabela no se preocupa por si llevamos a todas las artistas en el Olay Entretenimiento?!»