Lo Mejor de Tu Vida romance Capítulo 93

—Dime, ¿con quién te has casado? —Felipe no la creía, por eso, seguía preguntándola.

Marc notó la expresión de Noelia y la tomó de su mano suavemente diciendo:

—Pues reúnete con él y dile que abandone sus ideas tontas de una vez por todas.

En realidad, Marc había planteado arreglado a Felipe para Noelia.

—Eva va a llamarte después —Noelia colgó la llamada inmediatamente después de terminar de la frase, y se volvió a mirar a Marc:

—No te hace falta...

Él apretó un poco su mano que estaba tomándola de Noelia y dijo:

—¿Sabes cómo me siento después de escuchar lo que él te dijo? Noelia, puedo protegerte bien.

Sintiendo el ambiente entre ellos, Eva se fue en silencio.

Noelia asintió la cabeza con emoción, abrazó a Marc y confesó sus pensamientos finalmente:

—Marc, pero no quiero molestarte tanto con esas tonterías.

El hombre sonrió y también se abrazó a ella:

—Vale, a lo mejor no sabes que es un gran honor para un hombre ser capaz de proteger bien a su mujer en cualquier momento.

Noelia levantó la cabeza en su brazo.

Los dos podían sentir la confianza mutua.

***

En el coche, Noelia estaba mirando afuera por la ventanilla con la expresión muy tranquila.

La secretaria llamó a Marc diciendo que Felipe había llegado al restaurante.

Marc le dijo:

—Pues llévalo adentro.

Este restaurante era uno donde Noelia y él frecuentaban.

El coche aparcó delante de la entrada del restaurante donde Felipe podía observar todo desde su asiento.

La chica, quien le había amado mucho, se bajó del coche elegantemente. Cuando cruzó su mirada con la de ese hombre, ella esbozó una sonrisa felizmente.

Felipe, viendo esta escena, se puso tan celoso como enojado.

Desde su vista, Felipel no podía ver la cara de Marc, pero podía ver su silueta. El hombre era alto y fuerte.

Felipe frunció el ceño y ahora ya estaba seguro que Noelia le había puesto los cuernos cuando ellos estaban justos.

—¡Qué perra! —maldijo, dio un vistazo hacia todo el restaurante sentado y dijo—. Este restaurante es tan humilde y nadie va cenar aquí.

El camarero estaba a su lado. Al escuchar sus palabras, respondió con cortesía:

—Señor, se ha reservado todo el restaurante por el señor Navarro hoy.

«¿Cuánto dinero se necesita para reservar este tipo de restaurante?»

—Ja, ja, le cuesta tanto dinero para presumirse a mi frente —ahora él quería saber quién era el hombre.

El camarero no le hizo más caso.

Al escuchar los pasos acercándose, Felipe se levantó la cabeza. Su mirada se fijó lentamente en Noelia y Marc.

Felipe se congeló.

«¡Marc, presidente de Halo Entretenimiento, es esposo de Noelia!»

—No puede ser...

Felipe estaba atónito.

«¡Es imposible! ¿Por qué ella…?»

«Si no, ¿por qué ella se bajó del coche de Marc cogiendo su brazo de una manera tan natural?» Felipe se bajó la cabeza al recordar los disparates que él había dicho en la mañana.

Felipe sabía la distancia entre sí mismo y Marc.

Marc podía vencerlo fácilmente. Noelia y Marc se sentaron bajo la mirada sorprendida de Felipe.

Felipe no se atrevió a mirar a ellos con la cabeza inclinada.

Marc dijo al camarero:

—Puedes servir la comida ya.