Apolo le dirigió a Katarina una mirada de eres un idiota:
—Pero que no se entere, ¿vale?
—Pero Noela ya no es una niña. Ella es mi jefa y tú no —protestó Katarina entre dientes.
Apolo dijo:
—Entonces devuélveme mi dinero.
Después de que Katarina escapara de la boda, había dependido económicamente de Apolo. Ella había recibido mucho de su dinero.
No podía permitírselo.
Tendría que ponerse en venta para pagar las deudas.
Katarina hizo un mohín y dijo:
—Cuando me necesitas, me ves como una hermana. Cuando no me necesitas, te ves como un acreedor. ¿Es eso lo que hace un caballero?
—¿Caballero? Ve a buscar a Juan —Apolo se dio la vuelta y se fue.
—¿Qué tiene que ver con Juan? ¿Por qué tú y Noela seguís mencionando a Juan de vez en cuando como si fuéramos parientes?
—Apolo, ¿a dónde vas ahora? ¿Vas a buscar a Noela? ¿Por qué no la llamaste antes de venir? La próxima vez, acuérdate de llamarla antes... —Katarina le siguió.
Apolo se volvió y miró fríamente a Katarina.
Katarina se calló inmediatamente y dio unos pasos hacia atrás para escapar.
Pero era demasiado tarde.
Apolo ya se había defendido:
—¿Crees que soy tan estúpido?
Katarina negó inmediatamente con la cabeza.
...
El foro al que acudió Noela estaba lleno de compañeros con experiencia en su línea de trabajo.
Los actores ordinarios, o los novatos, no recibirían la invitación.
Cuando llegó a su fin, ya era de noche.
La fiesta de la noche se suspendió porque algunos estaban programados.
—Noela, esa es una broma realmente mala.
Noela respondió:
—Ya veo.
—Vamos. Te invitaré a cenar. Tendremos una relación de cooperación a largo plazo en el futuro —Pascual se rió y se acercó a abrirle la puerta del pasajero.
Noela se sentó dentro.
Se abrochó el cinturón de seguridad y miró fuera del coche. Pasó un coche. Al pasar, vio a Apolo conduciendo.
La espalda de Noela no pudo evitar enderezarse.
Apolo también llegó allí.
Pero ella ya había subido al coche de Pascual.
Fue él quien llegó demasiado tarde.
El coche se fue alejando poco a poco. Noela vio a Apolo detener el coche en la puerta por el retrovisor. Se bajó del coche y entró.
Luego, desapareció de la vista de Noela.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Matrimonio de primera
Quiero seguir leyendo...