Matrimonio de primera romance Capítulo 258

Delfino no le permitió ver a Alejandro, por eso ella quería ir sola.

Sin embargo, Delfino dijo anoche que se quedara en casa, y debió haber ordenado en secreto al guardaespaldas que no la dejara salir.

Ella entendió esto en su corazón, pero decidió intentarlo.

La detuvieron cuando llegó a la puerta.

-Señora, ¿adónde vas?-

Yadira arqueó las cejas y entrecerró los ojos levemente, luciendo un poco arrogante, -¿Adónde quiera, te importa?-

El guardaespaldas parecía obstinado, -Señora, el señor Delfino me lo ha ordenado, que será mejor que no salgas recientemente. Si hay algo, déjenos hacerlo por ti.-

-¿Y si tengo que salir sí o sí? -

El guardaespaldas asintió levemente, -Lo siento.-

La actitud y el tono del guardaespaldas eran muy duros, parecía que Delfino le había dado un ultimátum esta vez y no la dejaría salir resueltamente.

Yadira no se quedó allí, se dio la vuelta y regresó a la villa.

Estaba paralizada en el sofá de la sala de estar sin energía, y su mente estaba vacía.

-¡Yadira! ¡Ya estoy aquí!-

De repente llegó una voz de Noela.

Yadira miró hacia afuera después de oír el sonido y vio a Noela entrando por la puerta y caminando hacia ella.

Noela entrecerró los ojos e instantáneamente pensó que cuando los de la familia Jimenez vinieron ayer, los guardaespaldas los dejaron entrar.

-¿Te dejan entrar?- dijo Yadira, palmeó el sofá de al lado señalándole a Noela que se sentara.

Noela se sentó a su lado, -No, todavía me conoce, y él me saludó, así que me deja entrar.-

Al escuchar esto, inmediatamente cayó en la cuenta.

Cuando la familia Jimenez llegó, los guardaespaldas no los dejaron entrar, y Noela vino a buscarle, los guardaespaldas la dejaron entrar directamente.

No necesitó preguntar, y supo que esto definitivamente fue ordenado por Delfino.

Noela volvió la cabeza y vio que Yadira estaba pensando sin hablar, por lo que la aconsejó, -No pienses demasiado en eso ahora, tienes que dar a luz al niño, lo que pasa en los periódicos lo manejará el jefazo Delfino por ti.-

-Otra vez no me deja salir.- dijo Yadira débilmente.

Noela pensó por un momento y dijo, -Tal vez sea por tu bien. Ahora que lo del señor Alejandro se difundió en toda la ciudad, puede ser algo bueno que no salgas.-

-Pero no quiero quedarme quieta. No sé quién quiere incriminarme. No sé en qué está pensando Delfino. Fui yo la que ha causado todo esto, pero ahora soy la que no se ha informado de nada.-

Después de hablar, Yadira agregó, -Quiero salir.-

Noela sintió que lo que dijo Yadira era un poco razonable.

Noela le preguntó, -¿De verdad quieres salir?-

-¿Tienes alguna forma?- Yadira se volvió para mirarla.

Noela parpadeó y luego gritó hacia la puerta, -Yadira, ¿qué te pasa? ¿Por qué te has desmayado?-

Después de que terminó de hablar, extendió la mano para empujar un poco a Yadira, -Date prisa, finge desmayarte.-

Cuando Yadira cerró los ojos, fingió estar desmayada.

La voz de Noela llamó la atención de los guardaespaldas y sirvientes.

-¿Qué le pasa a la señora?-

Noela negó con la cabeza con expresión de pánico, -Se ha desmayado, no sé qué pasa, vamos a llevarle al hospital, ella está embarazada...-

Noela era una experta para actuar como si esto fuera real y los guardaespaldas llevaron a Yadira directamente al hospital sin sospechar nada.

El hospital al que fue resultó ser del Grupo Dominguez y el lugar donde estaba hospitalizado señor Alejandro.

Naturalmente, Noela siguió detrás de ellos.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Matrimonio de primera