MI JEFE EL INOCENTE romance Capítulo 56

En ese sitio apenas iluminado, con manchas de sangre seca ya que allí ya habían pasado muchos soplones, traidores y los habían matado, en esa estancia estaba un hombre inocente, trabajador, buen padre que jamas hizo daño a nadie, allí estaba con su peor enemigo gratuito frente a él, en compañía de otros hombres hambrientos de causar dolor sufrimiento y que les encanta lastimar, golpear y matar

Hadrien estaba parado allí en medio de esa habitación blindada con Cris al frente y los otros tres mirándolo con saña con odio, pero con una sonrisa tan malévola que hicieron temblar las rodillas a su victima

Cris se acerco a su victima tan odiada, lo arrincono contra la pared sucia y maloliente, agarro el rostro con su mano y dijo en tono burlón

—Mi querido Hadrien jajajaja, ¿qué te pasa ah? ¿estás…temblando? Jajajaja oigan ustedes el gran hombre el gran señor Collins esta jajaja temblando, esta con miedo, ¿vas a llorar Hadrien? Jajajaja

El pobre solo miraba a Cris, claro que sentía miedo estaba con su peor enemigo con quién siempre lo odio, estaba a su merced, sabía que le haría daño, claro que estaba temblando ya y Cris lo miraba como si fuera un animal depredador jugando con su presa le decía

—Sabes…soñé con este momento, así quería tenerte solo, sabes que te odio ¿verdad riquillo de mierda? Te robaste a Arlenn, la he amado desde niños y tú…te entrometiste me la quitaste, maldito idiota

Y Cris golpeo fuerte la pared haciendo gritar del susto a Hadrien y eso hizo reir a todos los maleantes

—Vaya la señorita se asusto jajajaja, que lindo grito de lo maricón que eres, ¿por qué no tratas de golpearme ah? A ver…ustedes aléjense, quiero ver si este estúpido se atreve, hazlo idiota trata de golpearme jajajaja

Hadrien no se movió, sabía que sería en vano tratar de golpearlo, agacho su cabeza y no movió ni un músculo, Cris ya no era el mozalbete que conoció, ahora era un hombre rudo, salvaje con cuerpo ejercitado y sin pizca de piedad

Cris se alejo un poco al ver que no se movió le grito

—Hijo de puta, maldita sea solo de imaginarme como te la cogías a mi mujer me dolía mi corazón, ella era mía para mí, me la vas a pagar riquillo de mierda

Lo golpeo en el estómago haciendo que se agache de dolor, Hadrien se quejo del tremendo golpe que recibió, Cris estaba realmente furioso ávido de venganza, volvió a golpearlo esta vez en las costillas haciendo que su victima caiga arrodillado del dolor y quejándose por el dolor intenso

Hadrien estaba en el infierno un infierno que no se merecía, pero estaba con su verdugo que lo golpeo ya, lagrimas bajaban por su riostro por ese dolor tan fuerte que no soportaba, Cris se agacho y le agarro fuerte de los cabellos alzando su cabeza, observo las lagrimas rodar por el rostro de su victima, pero nada de piedad tuvo pues no la conocía, lo golpeo en el rostro sacando sangre de su nariz y boca y cayendo como fardo al suelo y ordeno a sus hombres

—Golpéenlo ya —Esos malditos comenzaron a golpearlo con patadas, con las mancuernas, con las macanas, allí se escuchaba los gritos lastimeros de dolor de su victima y las risas de los causantes de su dolor, de repente se escucho una voz conocida que ordeno

—Basta ya…déjenlo, salgan de allí…todos —Todos salieron y Nicolay que había estado viendo todo por la ventana blindada entro a revisar al inconsciente Hadrien, su rostro todo herido y magullado por los golpes, su ropa ensangrentada por las heridas, respiraba con dificultad

Tomo el celular y llamo a su médico que estaba en ese sitio pero en otra habitación, no demoro mucho al entrar miro al hombre en el suelo, solo miro a Nicolay y fue a tomarle el pulso y revisarlo todo y dijo

—Camarada unos golpes más y lo matan, esta vivo de milagro ¿Qué hago?

Nicolay no lo quería muerto, quería torturarlo, hacerlo sufrir, asi que llamo a dos de sus hombres y les ordeno que o acuesten en la cama y al doctor le dijo

—Quiero que en dos días este mejor, pero nada de sacarle la ropa o asearlo asi se queda —el doctor se alarmo a ninguno de sus enemigos lo había tratado de esa manera, a veces prefería rematarlo de una vez

Lo acomodo, le puso suero, un respirador y en el suero le adiciono antibióticos y desinflamatorios, miraba a la victima y decía

—Pobre hombre, no se imagina lo que le espera, que crueldad con este hombre, Cris se ha ensañado como a ninguno

Termino de ponerle el suero y salio de allí, Nicolay ordeno que nadie se le acerque, que Él en persona le va a dar vueltas para ver su recuperación a lo que Cris reclamo

—¿Por qué no me deja matarlo? Lo odio y usted lo sabe ¿para qué lo quiere vivo?

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