En el Grupo Santángel.
Después de que Édgar salió de la sala de conferencias, Vicente inmediatamente dio un paso adelante y dijo, —Sr. Édgar, algo malo ha sucedido.
Hizo una pausa de repente, su mandíbula se puso ligeramente estirada, —¿Tiene algo que ver con Doria?
—Sí... pero no...
Édgar lo miró inexpresivamente, —La próxima vez, simplemente termina de hablar.
Vicente continuó apresuradamente, —La Sra. Santángel volvió a la casa de Armando con Ismael hoy. Y descubrieron, descubrieron...
Édgar presionó la punta de su lengua contra sus dientes, —¿Vas a poder hablar o no?
No fue que Vicente no era capaz de hablar. Solo que llevaban casi treinta años en este mundo, además había experimentado mucho acompañando a Édgar, pero este asunto era realmente extraño, cuando él consideraba los detalles, sentía mucho horror y escalofríos.
Le dijo en voz muy baja, —Sr. Édgar, han encontrado a la madre de la Sra. Santángel.
—¿Dónde la encontraron?
—En la casa de Armando.
La expresión de Édgar de repente se volvió fría, y volvió su cabeza, le preguntó, —¿Estás seguro?
Vicente asintió con su cabeza, —La noticia vino de ahí. Parece que Daniel también está en la escena. Estoy casi seguro.
Édgar entrecerró levemente sus ojos oscuros y, después de unos segundos de pausa, se volvió la vuelta y dijo con un tono frío, —Pospónme otras cosas, tengo que salir ahora.
Vicente lo siguió, —Sí.
Después de responder, Vicente se apresuró a sacar su móvil para arreglar otras cosas.
Después de subirse del auto, Édgar le preguntó, —¿Cómo está la situación ahí?
—¿Te refieres al lado de William o el lado de la Sra. Santángel?
—Ambos.
—Según la situación actual, la Sra. aún no ha llamado a la policía. Supongo que lo más probable es que Daniel la haya detenido. después de todo, si llaman a la policía, va a causar un quilombo, no sería una cosa buena para ambos lados. Además, si Rivera quien está escondido en algún lugar actualmente se entera, va a ser más problemático.
Vicente continuó, —En cuanto al lado de William, dado que Daniel está en presente, seguramente ellos están informados, sólo que no sé cómo van a resolver este asunto. Sr. Édgar, ¿quieres que les pregunte?
Édgar frunció sus delgados labios, después de un rato, dijo, —No hace falta, sabremos en un rato.
***
Daniel se fue a hacer una llamada, pero no regresó más.
No solo eso, Ismael tampoco regresó más.
Doria había estado sentada en el sofá, mirando por la ventana sin que su mirada se posara en algún objeto, nadie sabía lo que estaba pensando.
Después de mucho tiempo, se escuchó sonido de pasos desde la puerta.
Claudia se puso de pie rápidamente, estaba a punto de hablar, pero vio que la persona que vino era Édgar.
«Bueno, por lo menos no siento tanto miedo.»
Al ver que vino Édgar, Claudia salió con la excusa de ir a buscar a Daniel.
Édgar se sentó junto a Doria, la abrazó por el hombro y le susurró, —Está bien, está bien.
Doria se retractó de la mirada, lo miró confundidamente y dijo, —¿Por qué estás aquí? ¿No tienes algo que hacer hoy?
—Nada es más importante que tú.
Doria inconscientemente agarró la camisa de la parte de su pecho y murmuró, —Realmente no esperaba que fuera así...
Édgar la abrazó y no supo qué decir durante un rato.
Doria y Ismael habían vivido aquí durante casi veinte años, fueron tantos días y tantas noches, no obstante, no esperaban que hubiera un cadáver en la pared.
Además, este cadáver era de su madre biológica.
—¿Qué pasa con el cadáver?
—Ha sido enviado al médico forense. Una vez que el examen haya confirmado la causa de su muerte, se puede continuar sobre el tema del funeral.
Édgar dijo a la ligera, —¿Aún no ha aparecido?
Vicente negó con la cabeza, —No.
—Ya veo, te puedes ir.
Después de que Vicente se fue, la mirada de Édgar se posó en Doris, extendió su mano para tomar la mano de ella.
Parecía que tenía telepatía, las pestañas de Doria temblaron y lentamente ella abrió los ojos.
Miró a su alrededor perdidamente, sus ojos dispersos se enfocaron durante mucho tiempo antes de mirar a Édgar, —¿Estoy en el hospital?
—Sí, te desmayaste, ¿te sientes incómoda? —él
Ella se sentó en la cama con una mano, —Me siento mareada... por cierto, ¿dónde está Ismael?
—Fue a la comisaría.
Ella se quedó sorprendida, luego dijo, —¿Alguien le acompañó?
Él dijo, —Daniel y Claudia lo están acompañando.
Doria dio un suspiro de alivio, —Está bien.
—¿Por que te preocupas por él? Eres tú quien está en el hospital?
—Con todo lo que ha pasado, me temo que Ismael no pueda aceptar.
Él dijo con un tono frío, —Él no puede aceptar, ¿tú puedes?
Echó un vistazo por el entorno y continuó sin piedad, —¿Lo aceptaste de esta manera?
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Los comentarios de los lectores sobre la novela: Mi pretendiente es mi EX-MARIDO
Quiero el finall...