¡No huyas, mi amor! romance Capítulo 313

Rosaría se recobró en poco tiempo. Mirando la pintura de Julio en la habitación de Verónica, pensó en el sueño que tenía.

Ella susurró -Papá, no te preocupes. Voy a proteger a la abuela y a la familia Suárez. Todo resultará bien -

Después de decir eso, se levantó y se sentó en el asiento principal del sofá. Luego, respondió.

-¡Adelante! -

La puerta se abrió y Alana entró.

A diferencia de hace unos días, Alana había perdido mucho peso y parecía mucho demacrada. Cuando vio a Rosaría, estaba algo emocionada.

-¿Dicen que Jaime todavía está vivo? ¿Es verdad? -

Su voz estaba quebrada.

Estaba allí cuando Jaime estaba muriendo. Desafortunadamente, no pudo llevarse el cadáver. Más tarde, Anabel le dijo que la ayudaría a recuperar las cenizas de Jaime, pero no lo logró.

Dijeron que Mateo había matado a Jaime y había tirado las cenizas al mar. Alana no podía aceptarlo. Esta fue una de las razones por las que siguió a Anabel para vengarse de Mateo y Rosaría.

No podía aceptar que Jaime muriera sin un cadáver completo o un cementerio. Tenía que hacer justicia para Jaime.

Al escuchar la noticia de que Jaime todavía estaba vivo, Alana estaba muy emocionada.

Rosaría también sabía que Alana había hecho todas las cosas malas por el amor a Jaime.

Se sorprendió por la capacidad de Mateo porque sabía muy bien aprovechar la debilidad de una persona.

En aquel entonces, Mateo deliberadamente dejó ir a Alana, dejando a Jaime para controlarla. Todo era el plan de Mateo. Ahora, parecía que este plan era perfecto.

Era como un jugador de ajedrez. Estaba jugando sin prisa, porque podía controlar los movimientos de todos.

Rosaría pensaba que todavía tenía mucho que aprender de Mateo, pero ahora no era el momento adecuado.

Al ver la esperanza en los ojos de Alana, Rosaría sacó su teléfono y le mostró el video que Mateo acababa de enviarla.

Jaime estaba recuperándose de las heridas en un sanatorio. Parecía estar saludable y tener una vida tranquila.

Alana sostuvo su teléfono y lo miró fijamente. Las lágrimas finalmente cayeron por sus mejillas.

Uno de sus ojos estaba herido pero el dolor no podía impedir su emoción y alegría.

-¡Está vivo! ¡Está realmente vivo! ¿Dónde está? ¿Dónde está ahora? -

Alana le preguntó a Rosaría.

Rosaría respondió con indiferencia -No puedo decirte dónde está ahora, pero si puedes ayudarme, te prometo que os dejaré ir. Puedo pedirle a Mateo que os ayude a emigrar al extranjero. Podéis dejar la Ciudad H y encontrar un lugar donde nadie os conozca. Además, os daré mucho dinero y podéis tener una vida feliz en el futuro. A partir de entonces, todos los rencores y odios no existirán -

Alana se quedó sin palabras.

Miró fijamente a Rosaría, queriendo saber los pensamientos por sus ojos. Desafortunadamente, la mirada de Rosaría era muy sincera.

-¿Puedo confiar en ti? -

Alana finalmente se recobró y dijo.

Rosaría estaba un poco nerviosa y dijo con indiferencia -Puedes elegir no creerlo y puedes seguir haciendo las cosas malas con Anabel. Sin embargo, será imposible tener relación con Jaime. Incluso podemos quitar la memoria de Jaime. Puede que nunca te recuerde -

-¿Me estás amenazando? -

Alana estaba enojada.

Mario estaba un poco preocupado. Quería entrar pero Rosaría lo detuvo con la mano.

-Todo depende de tu decisión. Como he salvado a Jaime, me agradece mucho. Si quieres hacerme daño, tienes que asumir las consecuencias de tus actos -

Dijo Rosaría con calma, pero sus palmas ya estaban cubiertas de sudor.

Esto también era lo que le enseñó Mateo.

¿Si había errores en sus palabras?

No podía practicar todo esto por adelantado, entonces tenía que adaptarse a la situación y fingir estar tranquila. Sin embargo, frente a Alana, Rosaría todavía se sentía estresada.

Alana estaba mirando a Rosaría y considerando sus palabras. El vídeo era real y se podía ver que Jaime ya no odiaba a nadie y estaba muy tranquilo.

¿Si Jaime realmente eligió ir con Mateo y Rosaría?

Alana no podía entender lo sucedido. Ella estaba viendo el video una y otra vez. Y sus ojos estaban llenos de codicia y anhelo.

Rosaría conocía este tipo de mirada. Como mujer, ella realmente entendía lo que pensaba Alana. Desafortunadamente, los dos tenían diferentes puntos de vista, por lo que no podía decir nada más.

Alana finalmente se comprometió.

-Vale, te prometo. Voy a traicionar a Anabel y te ayudo a encontrar lo que quieres, pero tienes que cumplir tu promesa. Después de que este asunto se complete, tienes que dejarnos salir y darnos el dinero. Vamos a dejar la Ciudad H. Nunca volveremos a aparecer en esta vida -

-¡Está bien, te lo prometo! -

Rosaría estaba contenta, pero lo mostró.

Alana dijo sospechosamente -¿Tienes la capacidad de hacerlo? -

-Mateo puede morir por mí. No hay la cosa que no puedo hacer -

Escuchando las palabras de Rosaría, Alana finalmente se sintió aliviada.

-¿Puedo copiar este video? -

-Me temo que no. Anabel es una persona muy sospechosa. Si lo ve, no podemos llevar a cabo nuestro plan. Hay demasiadas personas involucradas en este asunto. No puedo darte este video por el momento -

Rosaría sabía que Alana quiere el video, pero tenía que ser muy cautelosa.

Alana no dijo nada más. Cuando escuchó la respuesta de Rosaría, miró fijamente la cara de Jaime en el video para memorizarlas en su mente.

Rosaría no la instó.

Después de un largo tiempo, Alana devolvió el teléfono a Rosaría y dijo en voz baja -Anabel tiene mucha sospecha, así que no puedo garantizar que pueda obtener la información de primera mano, pero haré todo lo posible. Antes de eso, tienes que herirme para engañarla. Ella no me creerá si no me pasa nada mal -

Al escuchar las palabras de Alana, Rosaría asintió y dijo -Mario se encargará de esto -

Con eso, Mario se fue con Alana.

Cuando Rosaría se quedó sola en la habitación de nuevo, su espalda estaba cubierta de sudor frío.

Mateo podía resolver los problemas fácilmente. Ella siempre no lo creía difícil. Pero hoy sabía que este hombre era tan poderoso y fuerte.

Rosaría se sentó relajadamente en el sofá.

Mirando la foto en la cabecera de Verónica, dijo en voz baja -No te preocupes, abuela. Voy a ser capaza de proteger a ti, a la familia Suárez y a los padres González. No dejaré que la gente que amo sufra ningún daño -

Verónica estaba sonriendo en la foto, como estaba respondiendo a las palabras de Rosaría.

No mucho después, se escuchó el grito de Alana. Estaba sufriendo la tortura.

Aunque esta mujer era muy mala, su amor por Jaime era digno de respeto.

Rosaría llamó a Mateo. El hombre preguntó con preocupación -¿Estás bien? -

-Siempre me preguntas eso. ¿Crees que soy una mujer muy débil? -

Rosaría estaba muy relajada.

Mateo se dio cuenta de la alegría de la mujer.

-Solo estoy un poco preocupado por tu encuentro con Alana -

-De hecho estoy nerviosa. Afortunadamente, todo iba bien según nuestras expectativas. Mateo, trátalo bien con Jaime. Le prometí a Alana que los dejaría salir después de este asunto. Aunque hicieron muchas cosas malas, todo era por el amor, por eso -

Rosaría sabía que tenía que ser más despiadada, pero no lo logró.

Mateo ya sabía que ella diría esto y respondió -Ya lo veo. Si todo está terminado, vuelves. La abuela ya salió de la sala de operaciones. La persona que más quiere ver ahora eres tú. Voy a llamar a Mario para enviarte y durante este tiempo se puede dar a Alana y a Anabel una oportunidad -

-Entendido, profesor -

Rosaría bromeó.

Mateo se sentía contento por este trato.

-Tengo mucho que enseñarte en el futuro. Sin embargo, tienes que pagarme -

-¿Pagar? ¿Cómo puedo pagarte? -

Rosaría estaba un poco aturdida.

El hombre sonrió y dijo -Si quieres aprenderlo bien, tienes que dormir conmigo -

La cara de Rosaría se puso roja al instante.

-¿En qué estás pensando todos los días? No voy a hablar más contigo. Mario y yo iremos al hospital. ¿Estás ahí? -

-Estoy en la sala. Estoy preocupado por los niños -

-Está bien, voy a visitar a la abuela primero -

-Ten cuidado -

-Lo sé -

Rosaría y Mateo hablaban cariñosamente y luego terminaron la llamada.

El cansancio se desapareció totalmente.

Se puso de pie y colocó en la mesa la foto de la anciana. Luego, volvió a mirar la habitación antes de irse.

Mario ya estaba esperando afuera. Al ver salir a Rosaría, se adelantó apresuradamente y dijo -Todo va según el plan -

-Ordena que vigilan a los dos en secreto. Dejamos la familia Suárez ahora mismo -

-¡De acuerdo! -

Mario inmediatamente entendió y ordenó en voz alta -Señora, la señora Verónica terminó la operación. ¿Si necesita visitarla? -

-¡Sí! Vamos ahora mismo -

Rosaría fingió estar tan ansiosa que casi se cayó cuando escuchó esta noticia. Afortunadamente, Mario la ayudó ponerse de pie.

Luego dijo ansiosamente -Envíame al hospital. ¿Cómo está la abuela? Tengo que verla ahora -

Mientras hablaba, Mario y Rosaría salieron rápidamente.

Una criada salió de la cocina. Después de escuchar la conversación entre Rosaría y Mario, se quedó pensativa y luego mostró una sonrisa extraña.

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