A Rosaría no le importaba la señora Verónica en absoluto, y ahora estaba aún más enojada.
¡La señora Verónica realmente vino a persuadirla de divorciarse de Mateo por Marta!
¿Cómo se le ocurre pedirme tal cosa?" Pensaba Rosaría.
Ella regresó a su habitación enojada.
Después de que Alana y Jaime se despidieron de la señora Verónica, rápidamente llamaron a Mateo y le dijeron al respecto.
Al oír esto, Mateo frunció el ceño.
Al verlo así, Mariano le preguntó -Señor Mateo, ¿qué pasó? -
-Dile al Rolando a atacar la propiedad de la familia Suárez a toda costa. Quiero que la propiedad de la familia Suárez experimente una crisis económica dentro de un día. ¡Junto con nuestra compañía de capital de riesgo, atacaremos a su familia juntos! -
Esta vez, Mateo estaba realmente furioso.
La señora Verónica trajo a Marta a la casa de los Nieto para obligarle a casarse con ella. Eso no le importaba a Mateo de verdad, podía manejarlo, pero encontró personalmente a Rosaría y la obligó a divorciarse de él. ¡Esto era demasiado odioso!
Al oír esto, Mariano no dijo nada más e inmediatamente fue a hacerlo.
Rolando retiró la presión sobre la familia Serrano y comenzó a atacar a los Suárez.
-Hombre, ¿a quién quieres atacar? El Grupo Nieto tiene que desarrollarse constantemente. ¿Quieres que apunte a la familia Suárez a largo plazo o a corto? ¡Esto depende de la situación económica de nuestra empresa!-
Rolando sintió que Mateo era un poco impulsivo recientemente.
Estar en contra de la familia Suárez no era igual que contra los Serrano. Los Serrano acababan de dar el comienzo comercial, y muchos fondos quedaron atrapados en los proyectos. Así que sería más conveniente apuntarlos, porque ninguna de las dos partes tenía mucha liquidez en los fundos. Pero la situación de la familia Suárez era diferente.
La familia Suárez era un clan militar y político, y recientemente había invertido en el campo del comercio. Además, parecía tener mucho éxito, ¿quién sabía qué tenía guardado la familia Suárez?
Además, los patrocinadores de la familia Suárez eran de la capital, por lo que las consideraciones de Rolando tenían razón.
Sin embargo, a Mateo no le importaba nada de esto y dijo fríamente -A largo plazo, sería mejor suprimir a la familia Suárez hasta tal punto que no podrían recuperarse -
Rolando estaba aturdido por esta frase.
-Tienes una buena relación con Javier, ¿verdad? ¿No es esto un poco...? -
-Eso fue la culpa de la señora Verónica, no la mía -
Tan pronto como Mateo dijo esto, Rolando entendió algo.
-Vale, lo arreglaré inmediatamente -
Cuando Rolando empezó sus trabajos, Mariano también comenzó los suyos con las empresas de capital riesgo.
Javier nunca imaginó que de repente apareció un desastre. Por sólo una tarde, el precio de las acciones de la familia Suárez cayó hasta el límite diario. Los negocios estaban monopolizados. Los acuerdos que habían llegado anteriormente fueron rechazados por los compradores, quienes preferían pagar la condena que cooperar con los Suárez.
Si en este momento Javier todavía no podía descubrir que había ofendido a alguien, entonces sería un tonto.
-Ve a averiguar quién nos está apuntando, ¿o a quién hemos ofendido? -
Javier estaba un poco ansioso.
A la familia Suárez todo le fueron bien en la Ciudad H durante tantos años, pero ahora, parecía que de repente alguien se puso en su contra. Era simplemente imposible para ellos seguir adelante.
Javier rara vez había experimentado tal cosa antes, incluso en la zona de guerra, nunca había pasado tan difícil.
Un rato después, la secretaria regresó.
-¡Señor Javier, es la familia Nieto! -
-¿Quién? -
Javier no podía creer lo que oía. Incluso si a Mateo no le importara su amistad, no lo haría por el bien de Rosaría. Después de todo, la familia Suárez también era la familia de la madre de Rosaría. Aunque había un malentendido entre ellos ahora, no podría ser tan extremo, ¿verdad?
-¡La familia Nieto! -
La secretaria pensó que Javier no lo había escuchado claramente y lo repitió.
Javier frunció el ceño fuertemente.
-¿Sabes la razón? -
-Parece que fue porque la señora Verónica había ido a la villa de los Nieto y provocó un caos -
La secretaria no podía averiguar la conversación entre la señora Verónica y Rosaría, pero sabía bien que la señora había sido echada fuera por los guardaespaldas de la Familia Nieto.
Javier se sintió deprimido.
¿Qué le pasó a su madre?
-¡Regreso a casa! -
Javier no se atrevió a retrasarse. Dejó completamente los asuntos de la compañía y fue directamente a casa.
La señora Verónica estaba tan enojada que todavía estaba regañando a Rosaría en la sala, mientras que Marta le dijo a un lado -Abuela, no te enojes con mi hermana. Ella tiene mal carácter, por eso te trató así. En realidad, ha amado a Mateo durante tantos años, y los dos tienen hijos, así que naturalmente no quieren divorciarse. Abuela, has sido demasiado impulsiva hoy -
-¿Impulsiva? Rosaría es la más desvergonzada. Ella ha hecho tantas cosas vergonzosas. Eres su hermana menor, si te casas con Mateo, ¿tratarías injustamente a tu propio sobrino? Mira cómo está ella ahora, ¿acaso los Nieto no la despreciarían? Ya he dicho que voy a darle la mitad de la riqueza de los Suárez, dejarla ir al extranjero, y encontrarle un lugar donde nadie la conozca para empezar de nuevo. ¿Acaso no es suficiente? -
Cuando ella vio a Javier, se enojó de nuevo.
-Rosaría, esa zorra, se atrevió a tratarme de manera tan arrogante hoy. Escúchame, si te atreves a hablar por ella en adelante, ¡no te reconoceré como mi hijo! -
-¿Qué hiciste en la casa de los Nieto? ¿Qué le dijiste a Rosaría? -
Javier no se preocupó por la amenaza de la señora Verónica en absoluto y le preguntó fríamente.
Tal vez fue porque nunca había esperado que Javier se pusiera tan desobediente con ella, elle se quedó atónita por un momento, luego sintió que su autoridad había sido desafiada y se volvió seria de inmediato.
- ¡Soy tu madre! ¿Así es como hablas con los mayores? -
-¿Qué le dijiste a Rosaría hoy? ¿O qué le hiciste? -
Preguntó Javier con una expresión seria. Ya no tenía la obediencia que solía tener.
Cuando Marta vio esto, se apresuró a decir -¿Por qué le hablas así a la abuela? Se enfadó con Rosaría. ¿Por qué todavía la proteges? -
-¡Cállate! No tienes derecho hablar aquí-
A Javier no le gustaba Marta, ahora sentía que Marta había causado todos los problemas, era la culpable de todo.
Marta tembló de miedo por el grito de Javier. Luego, se puso a llorar con los ojos rojos.
Verónica estaba un poco sorprendida, pero ahora vio a Marta llorando debido a Javier, se enfureció al instante.
-¿Qué estás haciendo? Nos gritas así a Marta y a mí. Si no te van bien las cosas en la empresa, no vayas a casa a descargar tu ira con nosotras. Mírate a ti. Desde que conociste a esa Rosaría, te has vuelto cada día más atrevido. ¡Soy tu madre!-
-Si no dices nada, iré a preguntarlo a Rosaría. Creo que me dirá exactamente lo que hiciste -
Javier estaba a punto de darse la vuelta y marcharse, pero la señora Verónica lo detuvo.
-¿Qué demonios quieres hacer? Solo fui a persuadirla para divorciarse de Mateo y dejar que Mateo se casara con Marta. Ellas son hermanas. Marta ya está tan miserable, ¿Por qué Rosaría no puede ceder? Además, también prometí darle la mitad de la riqueza de la familia Suárez y enviarla al extranjero para que pudiera comenzar una vida nueva. ¡La he tratado muy bien! -
Las palabras de la señora Verónica sorprendieron a Javier.
Miró a la señora Verónica con tanto asombro como si no la conociera, y luego de repente sonrió sarcásticamente.
-¿Obligas a tu propia nieta a divorciarse de su esposo y quieres que ella te agradezca? ¿Crees que Rosaría quiere la mitad de nuestra riqueza? ¿De verdad crees que ella es una mujer que puede vender todo por dinero? ¡Madre, te has vuelto loca! No es de extrañar que Mateo haga todo lo posible para apuntar a nosotros. Déjame decirte, ya no tienes que darle a Rosaría la mitad de la riqueza de nuestra familia, ¡porque en poco tiempo no nos quedará nada! -
-¿Qué dijiste? ¿A qué te refieres? -
La señora Verónica cambió la expresión inmediatamente.
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