Notas de un asesino. romance Capítulo 20

Me siento pérdida, veo por toda la habitación y sé que esta no es mía, porque es extraña, lo digo en el sentido de que está completamente diseñada con colores neutros, de hecho en la cama en la que estoy las sábanas son todas negras y grises.

Me levanto de un salto de esa cama y veo que en la habitación hay tres puertas, creo que las habitaciones serían baño y armario y, si me preguntan por la tercera, ni idea... Camino hacia una de las puertas y ¡Bingo!, Si es el baño. Entro al mismo me despojo de mi ropa la cual era la que tenía cuando llegué aquí... hablando del tiempo, ¿Que día es hoy?

No sé cuanto duré en este lugar y no se tampoco donde estoy, es extraño que después de que el idiota de Mikhail llegase a mi vida todo tipo de cosas extrañas me están pasando y, hablando del rey de Roma, todos los recuerdos de aquel hombre que se hace llamar su padre vienen a mi, jefe de la organización, asesino, recolector de jóvenes, Psicópata.

Me lavo el cuerpo, y cuando finalizo me coloco la misma ropa, al hacerlo salgo del baño con el pelo mojado haciendo que un camino de gotas se hagan presente por todo el piso de la habitación. Me siento en la cama de nuevo y miro hacia la puerta, es extraño que no he intentando huir de aquí.

Me levanto de la cama y me dirijo a la puerta, al llegar giro el cerrojo y al hacerlo me doy cuenta de que la puerta tiene seguro... ¿Por qué estaría abierta? Eso sería estúpido, si yo rapto a una persona y la encierro en una habitación no la dejaría abierta. No lo voy a secuestrar para que haga una expedición por toda la casa.

Vuelvo a la cama y me vuelvo a sentar y al hacerlo comienzo a tararear una canción, la cual es perfect de Ed Sheeran, no me culpen, lo amo. Al tararear la canción me dan ganas de bailar y lo hago, me levanto y me muevo al ritmo de la canción, visualizo un futuro, un futuro el cual no tenga que ser tan triste como estos días, un futuro en el cual pueda disfrutar la vida, un lugar en el que no respire tanta maldad.

Al terminar pronuncio una maldición a todo volumen, la cual no duró mucho en hacer que se escuche el eco por toda la habitación, me dirijo a la puerta y comienzo a golpearla de una manera descontrolada, para que así puedan escucharme y sacarme de aquí, golpeo un golpe tras otro. Hasta que noto que mis nudillos están ligeramente rojos y que las manos me duelen como la mierda. En un momento se escuchan voces y pasos de tacones que creo se dirigen hacia acá, porque se escuchan muy cerca, al igual que nítidos.

Los tacones de detienen y veo como el cerrojo, al abrirla me exalto ¿No podía haber sido otra puta persona?.

Candy...

Ella me mira de arriba hacia abajo con asco y yo la miro de igual manera, ¿Que se cree esta? Entra a la habitación y le da un vistazo y veo la sorpresa en sus ojos. Se sienta en la cama y pasa sus manos por las sábanas, se hecha hacia atrás y se acuesta boca arriba en la misma, me quedo pasmada por su acción y mas por la voz que se escucha a mis espaldas..—: Te doy diez segundos para que te levantes de mi cama, recojas tus cosas y te vayas de mi habitación.

Candy se levanta de un salto de la cama y mira la figura tras de mí asustada, puedo jurar que se a los lejos como tiembla su cuerpo, yo por mi parte pongo mis manos en mi boca para no echarme a reír.—:Ahora.

Ella pasa por su lado y lo hace con duda—:Señor yo...

— Silencio.

Ella sale de la habitación y escucho como las puertas se cierran tras de mi, me tenso y giro sin ninguna pisca de disimulo, cuando lo miro sólo me quedo fascinada con la persona que se encuentra ahora frente a mí, Mikhail trae puesto un traje azul marino oscuro y ese vestuario la verdad lo hace ver más sexy de lo que es. Su pelo está peinado hacia atrás y yo solo puedo pensar en mil maneras de como despeinarlo.

Me acerco hacia el y este me regala una mirada fría...—:Como ya sabes mi nombre es Mikhail Bakunin, jefe de la organización de asesinos personalizados, el puesto se me fue cedido hace unos días ya que el que era jefe de esta organización fue asesinado por, Adler Bakunin, mi hermano. El lugar se me fue dado ya que mi empeño en este lugar era excelente y porque siempre lograba reclutar mas personas...

El se acerca un poco más a mi y pasa sus nudillos por mi mejilla—: Ahora bien es tu decisión estar conmigo, pero si lo haces, tienes que convertirte en un asesino, aquí tenemos un tipo de religión, sólo puedes estar con una persona como tú...

Me quedo pasmada, ¿Cómo que una persona como él?...

—:Si no aceptas sólo tendrás mi amistad y créeme que yo no sé qué es la amistad.

Me tragué una carcajada por el pensamiento que tuve, lo miro a los ojos y me pregunto ¿Que debo hacer?

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