—Susana, estás aquí... la Niña se va, llegas justo a tiempo.
Selena miró a un lado con el rabillo del ojo y no volvió a mirar a Susana, sino que levantó sus pasos alrededor de Xavier y se fue enseguida.
Susana vio a Selena marcharse, con su pequeño y claro rostro teñido de pérdida.
Acercándose a Xavier, le preguntó con voz lastimera:
—Xavier, ¿cuándo vais a aclarar tú y Selena el malentendido que hay entre vosotros? No quiero verlos ir a por el otro en todas partes. Yo, realmente pienso en Selena como una buena amiga.
A Susana sí le gustaba mucho Selena y la consideraba una amiga.
Después de todo, habían pasado por muchos juntos.
—El tiempo es la mejor prueba.
Xavier levantó la mano por encima de su cabeza y la pasó por su pelo, cogiéndola en brazos y apoyando la barbilla en su frente de forma tierna.
Susana cerró lentamente los ojos, sumergiéndose en sus mil ternuras, sintiéndose feliz y hermosa.
—Xavier, estoy segura de que algún día Selena y tú aclararéis el malentendido y volveréis a estar juntos.
—Sí, eso es lo que pensé. Pero ahora es un verdadero dolor de cabeza con la constante actitud cuestionadora de Selena hacia mí.
Los ojos de Xavier brillaron y un plan cobró vida:
—Ella no confiaba en mí, así que Aaron tampoco confiaba en mí. Tanto es así que el Grupo Galaxia dejó de trabajar con mi empresa en varios proyectos.
—¿Por qué?
Susana se zafó de los brazos de Xavier y arrugó sus bonitas cejas con una mirada desconcertada:
—¿Qué quieres decir? ¿Por qué dices que Selena no confía en ti y Aaron no confía en ti?
Estaba un poco confundida por las palabras de Xavier.
—¿Por qué eres tan estúpida que no sabes de la relación de Selena y Aaron a estas alturas?
El comentario de Xavier hizo que Susana se deprimiera cada vez más:
—¿Qué relación? ¿No es porque Selena es la nieta de su tía, por lo que debería llamar a Aaron hermano? ¿Es todo lo que hay en la relación?
Ante eso, Xavier no pudo evitar decir:
—Eres una estúpida, a Selena le gusta Aaron, y la foto que salió el otro día en las noticias de Aaron con ese hombre, ese hombre es Selena vestida de hombre.
—¿Qué? ¡¿Una mujer vestida de hombre?!
La noticia fue tan impactante que Susana no pudo evitar que el nivel de decibelios aumentara.
Las cejas entintadas de Xavier se fruncieron en una expresión de sorpresa:
—¿No lo sabías? Estás muy cerca de Selena, ¿no te lo ha dicho?
Susana negó mecánicamente con la cabeza:
—No. Pero Xavier, te equivocas. Debe haber cometido un error. Si Selena quería estar con Aaron, podría haberlo hecho abiertamente y, sinceramente, ¿por qué andar a escondidas? Además, ese incidente tuvo una gran repercusión en el Grupo Galaxia, y a Patricia… se enfadó tanto que casi manda matar a Aaron a golpes. Si lo que dices es cierto, Selena se lo habría dicho a ella.
Como Xavier llamó madre a la señora Patricia, Susana, ahora embarazada de Xavier, la llamaría en el futuro 'Madre'.
—Cómo ha pasado eso, pensaba que Selena y tú estabais tan unidas que te lo habría dicho.
Xavier sacudió la cabeza y añadió:
—Naturalmente, mi madre lo sabía, de lo contrario no habría responsabilizado de repente a Aaron.
Al final de su frase, los labios de Xavier se curvaron ligeramente, sus ojos astutos brillaron con un poco de astucia. Su propósito, logrado.
Provocando problemas, utilizando a Selena para irritar a Susana, que luego utilizó a Susana para mover las conexiones de sus padres y ayudar a su empresa.
Dos pájaros de un tiro.
Los dos se quedaron un tiempo en la Villa Tamayo y luego se fueron.
Xavier se fue entonces a la oficina a ocuparse de su trabajo y Susana volvió a casa y no tuvo nada mejor que hacer que llamar por teléfono a la familia y mencionar la colaboración entre el patrimonio doméstico de sus padres y la empresa de Xavier.
Los padres de Susana dijeron entonces que lo investigarían primero. Dicho esto, Susana sabía que era un hecho.
Selena estaba de vuelta en casa, lista para empacar sus cosas y planeando volver a casa mañana, cuando recibió una llamada de Adelina.
Al ver el nombre de Adelina en la pantalla, Selena se quedó pensativa. No había visto a Adelina desde su última lesión y ahora la llamaba, seguramente por Alberto.
Selena no quería involucrarse con la familia Donel, así que colgó, pero poco después, Adelina volvió a llamar. Desesperada, Selena se acercó al sofá y se sentó, contestando al teléfono:
—¿Pasa algo?
Cuando la llamada fue atendida, preguntó con voz fría.
—Selena, quiero verte.
Adelina no estaba tan enfadada como Selena esperaba y se mostró muy tranquila en todo momento. El carácter extraordinariamente desenfadado de Adelina sorprendió un poco a Selena.
—Si tienes algo que decir, dímelo por teléfono.
Después de lo que había pasado antes, Selena fue muy cuidadosa con la familia Donel, sin atreverse a darles ninguna oportunidad de llegar a ella.
Todavía era joven y no quería morir joven.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Pedido de Amor
Seguirán escribiendo esta historia bonita...
Bella novela continuarán escribiendo capitulos...