Renació, la Reina en el Mundo del Entretenimiento romance Capítulo 209

Lea no tenía idea de que el director general había sido hospitalizado de nuevo.

Llegó con precaución a esa habitación donde la chica pecosa se había convertido en un fantasma, acompañada por otras cinco personas.

Encendió la luz, la habitación estaba igual que cuando la dejó, se veía descuidada y en el aire, había olor a madera podrida.

Sara se aferró a Lea, aterrorizada, y dijo: "No quiero vivir aquí..."

Nerea también se acercó y abrazó a Sara, diciendo con miedo: "Yo tampoco quiero vivir aquí."

La habitación estaba en mal estado, no parecía en absoluto un lugar donde alguien pudiera vivir.

Lucio se había quitado ya el vestido y la peluca, y dijo: "Voy a ver si hay otras habitaciones donde podamos quedarnos."

"Voy contigo." Dijo Amir.

Lucio lo miró.

Amir se acercó y le dio una palmada en el hombro, diciendo: "En las películas de terror siempre hay una regla: si te quedas solo, es más fácil que te pase algo malo."

Lucio pensó un momento y decidió que serían más seguros juntos, así que dijo: "De acuerdo."

Después de que se fueron, Lea comenzó a inspeccionar la habitación.

La cámara y el micrófono en el suelo habían sido reinstalados, la habitación parecía un poco desordenada, y había mucho polvo en la mesa.

Lea se acercó a una de las camas inferiores y tocó las sábanas, diciendo: "Al menos las sábanas y las mantas están limpias."

Sara negó con la cabeza decididamente: "¡No importa que estén limpias, no voy a dormir aquí! ¡Prefiero quedarme despierta toda la noche!"

"¡Yo también! ¡Yo también!" Dijo Nerea.

Lea se volvió y miró a Mabel en el otro lado de la habitación, preguntándole con el ceño fruncido: "Mabel, has estado callada desde que llegamos. ¿Qué opinas?"

Mabel miró a las otras tres chicas a través de su flequillo, luego rápidamente bajó la cabeza y metió un pequeño objeto rojo en su bolsillo, diciendo en voz baja: "No tengo ninguna opinión. No entiendo de estas cosas, haré lo que ustedes decidan."

Lea la miró fijamente, observándola de arriba a abajo.

Finalmente, su mirada se detuvo en el bolsillo abultado de Mabel.

Comentarios:

——【¿Qué es eso que tiene? ¿Cuándo lo agarró?】

——【Lo ha tenido desde que se convirtió en un fantasma.】

——【Ahora solo hay cuatro chicas en la habitación, ¿Mabel se atreverá a hacer algo? Ella sola no puede contra tres personas.】

——【Ella no puede hacer nada ahora, si lo hace revelará su identidad, Lea podría acabar con ella con un solo dedo.】

Unos diez minutos más tarde, los dos chicos regresaron.

"La mayoría de las otras habitaciones están cerradas. Las que están abiertas están en peores condiciones que esta." Dijo Lucio.

Amir añadió: "En realidad, esta habitación no está tan mal. Tiene su propio baño y lavabo. Si limpiamos un poco la mesa y las sillas, podemos quedarnos aquí por una noche."

Lea asintió seriamente y dijo: "Supongo que no tenemos otra opción. Empecemos a limpiar."

Todos comenzaron a trabajar.

Los que estaban haciendo las camas, hicieron las camas. Los que estaban limpiando las mesas, limpiaron las mesas.

Cuando terminaron de ordenarlo todo, eran las once en punto.

¡Justo cuando el reloj del edificio de la escuela marcó las once, todas las luces de la habitación y del pasillo se apagaron de repente!

"¡Ah!" Sara gritó.

Lucio inmediatamente se acercó a Lea para protegerla, diciendo: "No te preocupes, probablemente se cortó la luz."

Nerea estaba a punto de llorar: "¿También se corta la luz aquí?"

"Normalmente, en las escuelas se corta la luz por la noche." Dijo Amir.

En ese momento, no sabían si era una alucinación o no, pero parecía que se oía un ruido en el pasillo.

Lea frunció el ceño y dijo: "Shh."

Instantáneamente, todos se quedaron en silencio.

El ruido del pasillo se hacía cada vez más claro.

Era el sonido de unos tacones de mujer caminando y, de vez en cuando, el llanto de un bebé...

Al oír ese sonido, Lea se asustó.

¡Era el mismo sonido que había oído en el primer piso del dormitorio esa tarde!

Después de un rato, los pasos y el llanto se acercaron cada vez más.

Finalmente, ambos sonidos se detuvieron justo fuera de la puerta.

Amir y Lucio corrieron a la puerta para cerrarla con llave.

Un poco más tarde, Amir preguntó: "¿Se fue?"

Lea escuchó en silencio, asegurándose de que los pasos realmente se habían alejado, luego bajó del armario y dijo: "Se fue".

Entonces Amir y Lucio se levantaron.

La habitación seguía oscura, sin luz.

Lucio, apenas manteniéndose de pie, preguntó: "¿Dónde están los demás?"

En ese momento, se escuchó la voz de Mabel: "Estamos aquí".

Desde el balcón, Mabel avanzó, tomada de la mano de Sara con una mano y de Nerea con la otra.

En la oscuridad, Lea y los demás sólo podían ver vagamente tres figuras acercándose.

Comentarios:

- ¡Está acabado, todos están acabados!

- ¡Sara y Nerea ya están muertas, ahora hay tres fantasmas! ¡qué van a hacer!

- ¿Cómo mató Mabel a Sara y Nerea? ¿Por qué no escuchamos ningún ruido?

- Es ese sello, el pequeño objeto rojo que Mabel tiene en la mano, es un sello. Usó ese sello para marcar el cuello de Sara y Nerea, y luego se convirtieron en fantasmas bajo su control.

"¡Espera un minuto!"

Cuando Mabel estuvo a punto de acercarse, Lea de repente tiró de Amir y Lucio hacia atrás y miró fijamente en esa dirección, diciendo: "¿Cómo es que Sara y Nerea están de la mano con Mabel? Ustedes dos, digan algo".

No respondieron, los fantasmas controlados por otras personas no pueden hablar, sólo avanzan como máquinas.

Amir frunció el ceño: "Algo no está bien".

Nerea, que acababa de estar llorando en voz baja, y Sara, que siempre hablaba mucho, ahora estaban tan tranquilas, que era evidente que algo estaba mal.

Viendo cómo se acercaban cada vez más, Lea y los demás ya estaban apretados contra la puerta de la habitación.

Lucio preguntó con urgencia: "¿Qué debemos hacer ahora?"

Amir dijo seriamente: "Aún no sabemos exactamente qué está pasando..."

"¿Qué es lo que no está claro?"

De repente, Lea se remangó, se lamió los labios y las amenazó, diciendo: "¡Solo tienes que golpearlas para saberlo! Son todas estrellas, deberían tener seguro de accidentes, ¿verdad? Incluso si les rompo algunos huesos, la compañía de seguros debería pagar, ¿no? ¡Entonces no me voy a contener!"