ROMANCE ALOCADO romance Capítulo 85

Escucha, esto es lo que hago, no seas curioso ni me lo preguntes, si me voy, no tienes que buscarme, ninguna noticia significa que estoy a salvo, ¿entendido?

Es mejor no haber el amor, solo estamos tomando lo que necesitamos, es bastante justo.

Las palabras de Emanuel, que antes había considerado las más descabelladas, resonaban en sus oídos una y otra vez, y ahora que las volvía a escuchar, todas parecían empezar a calentar, todas parecían tener sentido y sentido, todas parecían estar llenas de afecto infinito.

Catalina sonrió, con el rostro pálido por la preocupación y el miedo, su sonrisa tan rígida. Resultó que Emanuel le había tomado precauciones desde el principio, porque se enfrentaría al peligro en cualquier momento, porque podría morir en cualquier momento.

—Aquí hace frío, será mejor que te vayas a tu habitación

Las palabras de Domingo la despertaron y se abrazó más fuerte, hacía mucho más frío aquí que en su habitación y cada vez temblaba más mientras el frío envolvía su cuerpo en su camiseta.

—La calefacción de tu habitación es la más cálida del campamento, el jefe ha ordenado un calentador eléctrico extra.

—¿Cómo?

—¿Todavía no lo sabes? El jefe dijo que debía ser incómodo para ti estar en un lugar tan frío por primera vez, así que hizo que compraran un calentador. Y las comidas pro ti en los últimos dos días son en realidad para los oficiales.

Al ver la expresión atónita de Catalina, Domingo suspiró y dijo:

Catalina giró la cabeza para mirar fuera, el viento del noroeste azotaba la nieve y el polvo, había poca luz más allá de las puertas. Se tocó el pecho y sintió que el corazón le latía violentamente, estaba preocupada, asustada, de que su marido estuviera trabajando en una ventisca.

Domingo continuó:

—El otro día el jefe se quedó inconsciente durante un rescate, el médico del ejército le dijo que volviera a la capital y él se negó, está trabajando con lesiones estos días. La cocina le dio comidas nutritivas y te las dio toda. El jefe sí se preocupa por ti, lo que pasa es que no te lo ha dicho y no te lo has enterado.

Además de estar sorprendida, se sintió más conmovida por el hecho de que si no hubiera sido por Domingo, nunca habría sabido lo que Emanuel había hecho por ella. Él se preocupa por ella no sólo en el campamento, sino también en la capital. Le respetaba mucho en la casa de su madre, hizo todo lo posible para protegerla y arriesgó su vida para salvarla en el club.

Siempre pensaba que podía confiar en sí misma, pero fue Emanuel quien resolvió sus problemas; siempre pensaba que Emanuel era arrogante y complaciente, pero no sabía que la razón era que ella tenía un complejo de inferioridad.

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: ROMANCE ALOCADO