Si, acepto el contrato (COMPLETO) romance Capítulo 25

Narra Jackson

El beneficio de la duda siempre será algo que aplique, soy joven pero a mi edad he visto diversas situaciones ajenas que afectan a personas cercanas a mí, así que no me hace falta vivir mil cosas para aprender, puedo aprender de los errores externos a mí, es por eso que aplico el dudar, nunca creer al cien por ciento en las personas, había una frase que siempre me ha acompañado y es “nadie está en el corazón de otro” la vida no trae un libro con instrucciones que explique las intenciones de la gente, así que cada vez que conocemos a alguien es como arriesgarnos, es lanzarnos a un ruedo en el cual no sabemos cómo podemos terminar.

Danilo era un chico de pocos recursos, tenía unas capacidades intelectuales sorprendentes, cuando el ingresó a la compañía yo era solo un adolescente, recuerdo que dentro de sus funciones en ese momento, logró persuadir a un grupo de empresarios hasta hacerlos firmar un contrato muy beneficioso para mi padre, sin dudas supo cómo destacarse.

- Danilo, por favor entra – le indico al hombre que entra portando un traje bastante elegante y recatado

- Me sorprender un poco su llamado, dígame que necesita joven Jackson – responde de manera algo informal para mi gusto

- Danilo, es que tengo en mi poder una serie de documentos, una serie de papeles que no logro comprender – saco la hoja y la pongo sobre el escritorio, la deslizo hasta él y parece no asombrarse ni un poco

- ¿Qué quiere que le diga? – pregunta con tono serio

- Que me diga todo lo que deba saber, por ejemplo ¿Por qué no hay registros sobre ese proyecto? Entiendo que su función sea la de revisar y hasta aprobar los distintos proyectos que ingresan a la compañía, pero sobre este en particular no hay nada

Yo continúo haciendo como que no se nada, para saber si sus respuestas están encaminadas hasta la verdad.

- Pues era algo que manejaba de manera directa con el señor Nicholas – responde sin más

- Comprendo, pero ahora el ya no está, estoy yo en su remplazo, creo que debes contarme lo que necesite saber.

Danilo hace una pausa y aprieta sus labios, parece tornarse incómodo

- Bien, si quiere puedo preparar todo un informe para ti, te lo puedo entregar el próximo mes

- No, para el próximo mes es demasiado tarde, necesito que me digas ahora mismo ¿Dónde está el dinero de mi padre? ¿Hacia dónde has estado enviando el dinero de la compañía? Danilo, ya se la verdad sobre lo que has estado haciendo todo este tiempo, te has aprovechado de la confianza que ha depositado mi padre en ti para robarlo, te ha beneficiado mucho el hecho de poder tomar decisiones sin justificarle nada a nadie, ¿verdad?

- ¿De que estas hablando? ¿Cómo te atreves a afirmar semejante cosa sin tener pruebas de ello?

El hombre intenta ser digno donde ya no puede hacer nada, así que giro mi computadora y le muestro los documento que mi amigo Michael me ha enviado

- Ese eres tú, es tu firma, tu número de identificación ¿creías que no lo iba a notar? Fuiste astuto, pero no hay crimen perfecto, dejaste cabos sueltos.

- No diré nada más

Danilo se pone de pie e intenta salir de la oficina

- ¿A dónde vas? – pregunto también poniéndome de pie

El hombre ignora lo que digo y camina hasta la salida, yo lo alcanzo y lo tomo del brazo con fuerza

- Esas no son pruebas suficientes, no puedes señalarme de nada – dice el hombre que empieza a sudar como cerdo

- Tengo pruebas, te tengo en mis manos maldito infeliz – respondo sujetándolo ahora de su cuello

Danilo intenta zafarse, pero en mi momento de enojo solo pienso en abrirle la cabeza con la pared, lo que no veía venir es que el hombre me daría un golpe en el rostro, en ese instante no pude controlarme y estampo mi puño en su pómulo.