TU CITA A CIEGAS FUI YO, PAPÁ romance Capítulo 5

Alice regresó con los cafés y todos se sentaron a degustarlo y siguieron conversando novedades de la fiesta hasta que el sueño hizo que todos vayan a dormir.

Su abuela materna Juliet la empezó a llevar a la escuela de Chefs, fue recibida bien, pues demostró un gran talento, además su abuelo Marcus le pagaba su escuela, estaba muy feliz, estaba cumpliendo uno de sus sueños.

Practicaba en casa, Marck y Alice degustaban las sabrosas comidas de Jenna, ese ambiente tan divertido, feliz y familiar se vivía en esa casa, cuando los visitaban los abuelos era casa llena y comían en la parte trasera, Jenna se estaba volviendo en una especialista culinaria.

Ya cursaba el último año de preparatoria, por sus altas calificaciones se había ganado una beca jugosa para la universidad, quería estudiar doble carrera, administración de empresas y Marketing y había sido aceptada en ambas, su familia estaba muy feliz, pero Diego la intercepto en el corredor para decirle.

—Jenna, por favor ¡acéptame como tu novio!, estoy tras de ti por años mujer, no tengo malas intenciones, te amo, no has tenido a nadie durante todos estos años, ¿por qué no quieres?

Jenna lo miro detenidamente muy enojada y dijo

—Diego, no quiero nada de novio, mi papá me necesita a su lado, tampoco Él ha tenido novia por mí, por protegerme y yo hago lo mismo, quiero que viva tranquilo, solo quiero darle mis logros como regalo, ¡entiende!, tengo becas para la universidad por mis estudios, así que ya debes darte cuenta de que no quiero novio, adiós

Esas duras palabras lo noquearon en su mente, fueron palabras definitivas, solo se sentó a sollozar a vista de todos los que estaban por allí, pensaban reírse, pero al verlo sufrir por amor mejor se alejaron de allí, Christopher era un buen amigo de Jenna y la comprendía también a Diego, se sentó junto a Él para ofrecerle su hombro para reconfortarlo y escuchándolo decir.

¡La perdí amigo!, no me quiere, Jenna, no me quiere —Su amigo le contesto

—Pero Diego, tú sabías esto ya, te lo dije hace años, ella no quiere novio, te dije que no la persigas ni atosigues porque era para nada amigo, bah, ¡hombre cálmate!, ya encontrarás un amor algún día

—Pero como ella jamás amigo, siempre fue tierna, inocente de buenos sentimientos, mujeres así casi no hay

Diego tuvo que resignarse a sacarla de su mente y sentimientos, pues sería en vano, siguió su vida y tarde o temprano encontraría una mujer que lo ame.

5.2 1

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