¿Tuvimos un hijo romance Capítulo 164

Capitulo 164 

Fernanda sonrio y salio sin decir ni una palabra más, sin embargo, tenía una fuerte corazonada de que las rosas cran de parte del gran jefe de arriba. La junta estaba agendada para las 2:30 de la tarde y Fernanda le mandó un correo clectrónico a Elías para informarle, ya era decisión de él si aceptaba ir o 10. pero esta esperaba que si fuera; al fin y al cabo, la propuesta del área de refrigerios se había puesto en espera desde hace bastante tiempo, así que, de hecho, muchos miembros del personal ansiaban que si se lograra la aprobación. En cuanto Anastasia recibió el recordatorio de Gabriela sobre la junta, rejunto con rapidez los borradores en los que estaba trabajando y agarró su teléfono celular con ella mientras caminaba hacia la sala de juntas. Al mismo tiempo, ella notó que todos los que estaban en la sala se dirigian a ella de una manera muy complaciente. 

–Senorita Torres, gracias por las flores. ¡Escuché que cuesta por lo menos doscientos comprar un tallo de esos! 

–isi! Las rosas también pueden durar hasta quince días. ¡El periodo de florecimiento es muy largo! 

En ese momento, Anastasia reveló una leve sonrisa antes de tirar la silla y sentarse en ella; de repente, todos enfocaron su atención detrás de ella, pues Elías había llegado puntual a la reunión. Con rapidez, Anastasia volteó su cabeza para verlo antes de girar los ojos hacia la otra dirección, ya que de forma intencional mantenía su distancia con él en la oficina, pues quería evitar estar involucrada en cualquier tipo de rumor con él. 

–Muy bien, ya basta de platicar, chicos. iHora de empezar la junta! –ordenó Fernanda a sus subordinados. 

Primero, Fernanda hizo algunos anuncios sobre el trabajo y luego también reportó lo de la situación reciente con las entregas de los manuscritos, de igual manera, habló de la situación de análisis de mercado que había encontrado. Mientras tanto, Anastasia estaba sentado junto a Elias y sus pensamientos no dejaban de correr en su cabeza, por ejemplo, recordó el incidente con su gastritis de la noche anterior y el beso que compartieron en su cama, además de las flores de esta manana. 

–Anastasia... Ejem! Anastasia... –dijo Fernanda intentando llamar la atención de ella una vez más. De inmediato, Anastasia volvió en sí y levantó la cabeza para mirar a Fernanda con una mirada que tenía un poco de confusión; justo entonces, Alexis, quien estaba sentada frente a Anastasia, estaba bastante enfadada, así que tomó la oportunidad para soltar un comentario mordaz. 

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–Senorita Torres, parece que cada vez que tenemos una junta usted está bastante distraida. iEs algo muy irrespetuoso de su parte! –exclamó. La cara de Anastasia se sonrojo un poco cuando escuchó aquello, se sintió bastante avergonzada de recordar aquello en lo que estaba pensando hace rato. 

–Disculpenme, estaba muy ocupada pensando en asuntos relacionados con el trabajo se disculpo. 

Para ese entonces, todos en la sala de juntas voltearon a ver a Elías, quien estaba sentado junto a ella, y cada uno de ellos se preguntó cómo iba a reaccionar él, sabiendo que los miembros de su personal estaban soñando despiertos durante una junta. No obstante, estaban asombrados de ver 

la expresión de Elias, pues en ese momento, estaba mirando a Anastasia con cariño y una pizca de diversión 

–Anastasia, estábamos hablando de la introducción de un área de descanso para el té. ¿Qué opinas sobre eso? –preguntó Fernanda escogiendo ese momento para mencionar el tema, al instante, ella se compuso y dio su respuesta

–Eh... creo que deberíamos cambiar el lugar de los postres. Escuché de uno muy popular y opino que sería asombroso si pudiéramos hacer los preparativos para que esa compañía haga los refrigerios para nuestro descanso del té. 

–Oh, ¿podrías compartir el nombre del sitio? –preguntó Fernanda al instante. 

–Es una pastelería llamada La Bella, está localizada en la ciudad y ya he ido muchas veces con mi hijo, los postres en verdad son deliciosos, los ingredientes que usan también son muy frescos. 

–Pero, lo que sé es que los precios de esa pastelería son de gama alta y tenemos un presupuesto apretado. Bueno... –dijo Fernanda con una expresión desgarrada. 

–Entonces hagamos los preparativos para que esa tienda se una a nuestra compañía –mencionó de repente una voz masculina, baja pero dominante. En ese instante, Fernanda volteó a ver a Anastasia y hubo una mirada de aprobación que desprendieron los ojos de esta. 

«En efecto, ieste plan funcionó y Elías está de acuerdo!», pensó Fernanda, mientras que Anastasia estaba en bastante shock cuando escuchó aquello. 

«i¿Cómo es que pudo acceder de manera tan fácil?!”, pensó Anastasia. Por el otro lado, Alexis le dedicó una mirada llena de celos a Anastasia mientras que pensaba algo para sí misma. 

«A Anastasia la tratan de manera tan favorable en esta compañía; hasta el presidente Palomares le cumple sus caprichos». 

– Muchachos, ustedes continúen la junta –dijo Elias mirando su reloj–. Tengo otra cosa que atender, asi que ya me voy. 

Después de que salió de la sala, todos los presentes en la junta soltaron un suspiro de alivio y lo primero que hicieron fue agradecerle a Anastasia por sugerir la nueva pastelería y obteniendo así con éxito tan grandes beneficios para el personal. Ella a penas y lo sugirió, por lo que no esperaba que Elias estuviera de acuerdo con una sugerencia como esa; justo después de que Elías saliera de la sala de juntas, escucho de manera repentina a dos mujeres del personal platicando muy emocionadas al final del pasillo

Las flores nos las dio una diseñadora. iLas rosas son hermosas! Es una pena que no estuvieras aquí hace rato y que hayas perdido la oportunidad

 

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