El gran salón se volvió repentinamente muy silencioso. Tan silencioso que Selene pudo escuchar el sonido de Jorge aplastando la ceniza de su cigarrillo, con chispas cayendo desde sus dedos.
Selene rara vez había visto a Jorge fumar, o más bien, apenas fumaba delante de ella, porque estaba cuidando de ella por su "mala salud".
De repente, Selene sintió ansiedad. Hoy estaba bastante contenta porque anoche había visto accidentalmente un mensaje de texto en el teléfono de Jorge.
Lorena quería divorciarse de Jorge.
También sabía que Jorge había ido a ver a Lorena esa mañana. Pero la expresión sombría de Jorge ahora, parecía diferente a lo que esperaba.
"Jorge, vamos a comer", dijo Selene, tratando de animarse y asegurarse de no tener miedo. La persona a quien Jorge había amado durante tantos años era ella, no esa mujer arrogante y presuntuosa llamada Lorena.
Jorge apagó el cigarrillo en su mano y se acercó a la mesa para ver los platos que Selene había preparado.
Había tres platos y una sopa hechos en poco tiempo, y aunque no estaban mal, seguían siendo algo inferiores a los de Lorena.
¿Por qué estaba pensando en Lorena otra vez?... Jorge apretó fuertemente su mandíbula y eliminó la imagen de su mente.
Selene se sentó frente a él, desviando la vista hacia él mientras comía en silencio, intentando varias veces decir algo, pero al final, no lo hizo.
Ella estaba ansiosa y tenía miedo de que las cosas no salieran como quería y de la decepción.
Ella era una mujer temerosa y pusilánime. Todo lo que pedía era que Jorge la desposara.
Jorge estaba distraído y seguía perdiendo la concentración mientras comía. Selene se dio cuenta varias veces, hasta que no pudo resistirse y dejó caer su tazón. "Jorge, ¿cómo te fue con Lorena hoy?"
Jorge, un hombre guapo incluso cuando sostenía sus palillos, de repente se detuvo al oír la pregunta de Selene. "¿Qué quieres decir?"
Vacilando, Selene respondió: "Sobre tu divorcio con Lorena".
Terminando su frase, la expresión del hombre frente a ella se volvió repentinamente fría. Selene tembló involuntariamente y sus ojos se llenaron de miedo.
Notando su temor, la expresión de Jorge se suavizó un poco. "No nos divorciaremos", dijo.
Selene prefirió creer que Lorena había cambiado de opinión y no que Jorge no quisiera divorciarse.
"Jorge, tú y Lorena... Nunca pensé que me convertiría en la persona que más odio. Me siento tan mala".
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