Un disparo en mi corazón romance Capítulo 86

—Briana está embarazada, vosotros dos estáis enamorados, ¿qué estoy yo en medio? —Yolanda miró incrédula a Jairo— Bueno, no tienes prisa, pero la barriga de Briana pronto será demasiado grand para llevar un vestido de novia. Aunque yo pueda esperar, ¿puede ella?

Ella tenía razón. Él había decidido ser responsable de Briana, y también decidido a conseguir el divorcio. Es que no se esperaba esta situación actual.

Jairo desenroscó la botella de agua mineral que tenía en la mano, irritado. El agua se derramó con demasiada fuerza, manchando su caro traje.

—Joder.

Al ver esto, Yolanda sacó unas servilletas y se lo limpió.

Bajó la mirada y se limpió con cuidado, completamente ajena a los ojos del hombre, que se iluminaron con una chispa de fuego.

Jairo realmente no la entendía. Ella dijo que quería el divorcio, pero sus manos estaban encendiendo fuegos por todo su cuerpo, tentándolo, y ella actuaba como si no lo supiera.

«Realmente no sé si es demasiado astuta o demasiado ingenua.»

—Basta —Bramó, impidiendo que ella siguiera encendiendo el fuego, temiendo perder el control delante de ella.

Durante años, Jairo había sido capaz de contenerse bastante bien, y fue ella quien desafió repetidamente sus límites, dejándolo al borde de la locura de vez en cuando.

—Vale —Yolanda se detuvo los manos.

Tal vez la experiencia de crecer en un orfanato y dependiendo de la comunidad para el apoyo financiero, ella habitualmente siempre se ofrecía a ayudar a los demás, para aliviar la vergüenza.

Como si recordara algo, Yolanda sacó apresuradamente el sobre del premio que le habían dado antes.

Abrió el gran sobre y sacó el cheque que había dentro.

—¡Vaya, hay medio millón! —Los hermosos ojos de Yolanda se iluminaron con un brillo estelar y una sonrisa pura se dibujó en su cara.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Un disparo en mi corazón