Una mate para el Alpha romance Capítulo 77

Edwin sirve la cena que consiste en papa rellena y pasta con camarones, se sirve él toma asiento, le doy el primer bocado.

Nikki - esto está muy bueno amor

Edwin - que bueno que te gusto amor  

Nos ponemos a cenar tranquilamente mientras platicamos de todo lo que nos ha pasado todo este tiempo, algunas cosas buenas y otras no tan buenas, pero que importa ahora es que estamos juntos.

La cena transcurrió de lo más lindo entre platica y chistes, Edwin se levanta de la mesa para ir a la cocina por algo cuando lo veo regresar con unas copas de helado, meda una a mí.

Nikki - gracias 

Edwin - de nada amor, pero ten cuidado abajo hay una sorpresa  

Así que empiezo a comer el helado, pero no muy rápido ya que se me sube al cerebro y no es nada agradable el dolor.

Terminó el helado y en el fondo hay una galleta de la suerte, esas que vende en la comida china.

Tomó la galleta y rompo la envoltura, rompo la galleta para ver lo que dice el papelito que tiene adentro.

Extiendo el papel y leo lo que dice, me lleno la mano a la boca por lo sorprendida, alzó la vista y veo que Edwin se levanta de la silla, viene hacia mí, se pone de rodilla y abre una cajita con un anillo.

Edwin - Nikki ¿te quieres casar conmigo?

Nikki - sí, sí quiero

 

Edwin me pone el anillo y yo sonrió de felicidad, me levanto de la silla Edwin se pone de pie, le doy un beso.

Nikki - es preciso mi amor

Edwin - que bueno que te gusta mi amor

Nikki - gracias por todo

Edwin - no, gracias a ti amor, sin ti nada de esto sería real, yo prometo hacerte feliz con nuestros hijos

Nikki - lo seremos mi amor

Le acarició la mejilla, Edwin sonríe feliz para luego besarme inmediatamente, le rodeo la nuca con mis brazos, Edwin me carga y rodeo las piernas alrededor de su cintura.

Edwin sube las escaleras con cuidado de no caernos, hasta llegar a la habitación donde entra y me baja, para besar mis labios apasionadamente.

Le quito el saco para después desabotonar la camisa y acariciarle los brazos musculosos, Edwin me quita la blusa para desabrochar mi sostén, despega sus labios de los míos para mirarme con ojos de amor, desliza su mano en mi mejilla suavemente.

Edwin - eres la mujer perfecta para mi  

Nikki - tu cambiaste mi mundo eh hiciste que creyera en el amor 

Edwin - por mi nos casamos ahora mismo mi amor

Nikki - lo se mi amor, pero a nuestras familias no les gustara la idea de hacer eso 

Edwin - mi padre me mataría si hago algo así 

Nikki - solo que no hay que esperar mucho tiempo por mi barriga 

Edwin - si amor

Edwin me toma de la cintura y me acerca el, para tomar mis labios dulcemente subo mis al rededor del cuello de Edwin chocando mis pechos desnudos con su torso musculoso.

Edwin me acuesta en la cama despacio sin dejar de besar mis labios, se pone encima de mi sin aplastarme, pongo mis manos en su espalda recorro su cuerpo lentamente y puedo sentir como su cuerpo se estremece a mi tacto.

Separa sus labios de los míos, para besar mi cuello donde está su marca asiendo que se me escape un gemido, los besos de Edwin van bajando hasta mis pechos, se lleva uno a su boca y el otro lo acaricia suavemente.

Nikki - amor no puedo aguantar, te quiero adentro de mi 

Edwin - a sus órdenes señorita 

Edwin se retira de mi para quitarme el resto de la ropa al igual que Edwin, separo mis piernas para que él se coloque entre mis piernas, despacio entra en mi haciéndome gemir de placer al sentirlo adentro de mí.

Edwin también gimió enredo mis piernas alrededor de su cintura, Edwin se mueve despacio.

Los movimientos van subiendo de ritmo, le beso el cuello dejando un rastro de besos húmedos, puedo escuchar sus gemidos.

Las embestidas cada vez más rápido, haciéndome gemir más, Edwin pega su cuerpo al mío dejando sentir su piel con la mía.

Separó un poco más las piernas para que entre en mi todo lo posible, gemía su nombre al oído de Edwin.

Cada vez más rápido las embestidas sintiendo cerca el orgasmo.

Nikki - amor me vengo

Edwin - vente para mi amor

Después de un rato llego al orgasmo soltando un último gemido acompañado de su nombre, Edwin lo alcanzó después de mí.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Una mate para el Alpha