¡Vuelve conmigo,mi cariño! romance Capítulo 884

El precio del primer artículo fue tan alto que todos se quedaron callados durante un rato.

—¿Estás bien? —Edmundo notó que Calessia estaba un poco rara y le preguntó.

—Estoy bien, solo algunas cosas conocidas hicieron un poco efecto en mi ánimo, no pasa nada —ella respondió.

—Tres millones —La voz que venía del segundo piso rompió el silencio.

—Cinco millones —lo más sorprendente fue que Gael agregó directamente dos millones.

Ada le miró y volvió a ver el anillo en la mano de la modelo, poco a poco se puso enojada.

También reconoció que este anillo era de Calessia.

—Diez millones —el hombre del segundo piso seguía subiendo el precio.

—¿Están locos? —no podían creer lo que escucharon.

—Veinte millones —Gael dijo sin dudar.

Todos se quedaron callados. El precio fue inesperado. Aunque no les falta el dinero, su riqueza no se venía tan fácil.

—Veinte millones euros, ¿alguna oferta más? —el moderador estaba muy emocionante y habló en voz alta.

Nadie dijo nada.

—Veinte millones euros a la una, veinte millones euros a las dos... —el moderador seguía hablando.

—Treinta millones —el hombre del segundo piso le interrumpió en el momento crucial.

Todos querían saber quién fue el hombre del segundo piso. «¿En serio? El precio ya ha superado mucho el valor de este anillo.»

—Gael, no vale la pena. La gente de arriba ni siquiera mostró la cara, tal vez fue su intención, subiendo deliberadamente el precio... —dijo Ada.

—Treinta y tres millones —le interrumpió, ni hacerle caso.

—El presidente Gael realmente tiene mucho dinero —alguien dijo sonriendo.

«Un anillo vendido por un precio tan alto, definitivamente todo el mundo va a saber mañana.»

Calessia le miró. «¿Por qué hace eso?»

Todos sabían que el precio ya ha superado mucho el valor de este anillo.

«¿Aún me ama? No, si tuviera sentimientos por mí, no me habría matado. Ahora hace eso solo es para hacerle sentir menos culpable.»

Calessia solo le da curiosidad la persona del segundo piso. El piso superior no estaba abierto, ella levantó la cabeza pero no vio a nadie. Quería saber quién era.

El precio de las pinturas solía ser alto, Edmundo estaba en nombre de la empresa y no le interesaba.

Calessia vino con él, tampoco estaba interesada, por lo que, le llevó a un rincón tranquilo.

—¿Has visto ese anillo antes? —Calessia le preguntó. Edmundo negó con la cabeza.

No pudo pensar en otra explicación. «A lo mejor fue recogido por alguien y luego lo donó»

—Las personas que murieron en ese momento, ¿aún no has averiguado quienes eran? —En aquel entonces, Calessia necesitaba ir al extranjero para su tratamiento, por eso se fue y no le mencionó de esta cosa.

—Sí, no pude encontrar nada —Edmundo asintió.

«No tienen nada que ver conmigo, ¿pero murieron en el incendio donde estaba yo? » Calessia sintió que algo andaba raro. Lógicamente, la policía anunciaría la identidad de los fallecidos, pero no.

—Ahora el precio de este artículo de subasta es treinta mil euros —dijo el moderador.

Al escuchar, Edmundo lo miró. El precio era adecuado para hacer una oferta, no pudo regresar sin nada en la mano.

—Voy al baño —Calessia supo que Edmundo le interesaba este artículo, por eso terminó la conversación y caminó hacia el baño con zapatos de tacón.

—Calessia, ya moriste, ¿por qué aún estás robando el corazón de mi hombre? —En ese momento, Ada se miró en el espejo del baño, con un rostro delicado y una figura esbelta. « No soy peor que ella, ¿por qué en el corazón de Gael no hay mi lugar? »

—¡Debería haberte matado antes! Así no tendrías la oportunidad de obtener su corazón —Ada se sentía triste, había hecho tantas cosas pero no logró nada al final.