Amante peligroso romance Capítulo 114

-Abuelo...- Norberto estaba a punto de decir algo, Antonio lo interrumpió fríamente:

-Aléjate de esa mujer. -

El frío orden de Antonio llegó a los oídos de Norberto, ¡de repente! Norberto entrecerró los ojos y miró a Antonio, - ¿Me investigaste? -

Norberto miró a Antonio con disgusto.

Antonio resopló con frialdad, -Tú provocaste a un oponente tan fuerte, yo soy el presidente de la familia, ¿no debería averiguar la causa? ¿o dejarte a provocar más lío? -

-Abuelo tienes miedo, abuelo tienes miedo de la familia García incluso le das miedo a un joven de la familia García. No era extraño que todo el mundo estaba diciendo que la familia Martínez estaba inferior a la familia García en estos años...-

Antes de que terminaran las palabras de Norberto, Antonio agarró el bastón y se lo tiró a Norberto, -¡Cállate! - Antonio estaba muy furioso, los ojos grises estaban fijándose a su nieto.

Este nieto era el mejor nieto de la generación de la familia Martínez, pero era un poco perezoso, le daba mucha importancia a él, pero nunca había esperado que él provocara un oponente tan fuerte.

Aunque había gente diciendo que La familia Martínez no era tan fuerte como la familia García, este dicho no había ninguno que se había atrevido decirlo frente a Antonio, el rosto de Antonio estaba tan rojo por la vergüenza...esto era el dolor de Antonio.

Norberto no se comportó como siempre, estaba muy serio, el bastón lo tiró a su cuerpo con mucha fuerza, Antonio estaba tan enojado hasta que quería matarlo, pero Norberto estaba super obstinado y no se escondió de los golpes, dejando que Antonio le golpeaba.

El mayordomo que estaba atrás de Antonio no pudo seguir viendo a los golpes y trató de convencer a Antonio, -Señor Antonio, por favor cálmese, el señor Norberto es todavía un joven, lo enseña con paciencia, y le comprenderá. -

Antonio estaba ten enojado y gritó, -No puede volver a ver a esa mujer. -

Norberto apretó el puño de repente y miró a Antonio, -No es posible! -

- ¿Qué dijiste? - La rabia de Antonio se había relajado un poco, pero cuando oyó lo que dijo Norberto, la rabia se volvió a subir, -Norberto, ¡dímelo otra vez! -

“¡Ahora te repito de nuevo!”

- ¡Dije que nunca la dejaría! -

- ¡Carajo! - Antonio estaba muy enojado, su pecho estaba flotando por la rabia, - ¡Está bien! ¡vale! ¡estas tan obstinado! - Mientras que regañaba a Norberto, Antonio fue a buscar el bastón que acababa de tirar, -Jorge Gonzales, ¡dame el bastón! -

El mayordomo detrás de él, Jorge, estaba ansioso, escondió el bastón detrás de él, y miró al Norberto, -Señor Norberto, el señor Antonio está mayor, por favor, obedece el mandato de Antonio. -

Norberto estaba obstinado, y se apretó los labios, pero no dijo nada.

- ¡Dame el bastón! - Antonio estaba furioso, miró al mayordomo Jorge, - ¡Jorge! ¡Dame el bastón! -

- ¡Señor Norberto! -Jorge todavía se negaba a darse el bastón.

Norberto se apretó los dientes y dijo con firmeza, -Jorge, dale el bastón. -

El pecho de Antonio estaba vibrando por la rabia, cogió el bastón de la mano del mayordomo Jorge y golpeó a la espalda de Norberto, - ¡Estas tan obstinado! - El bastón golpeó a la espalda de Norberto.

- ¡Eres un tonto! - Eran otros golpes fuertes que se dañaron el brazo de Norberto.

Antonio se levantó ferozmente el bastón, le dio golpe, uno tras otro, Norberto gimió, pero sus miradas aún estaban obstinadas.

- ¡Por una mujer, estás llevando a la familia Martínez a una situación peligrosa! Norberto, no sé, ¿cuándo aprendiste del enamoramiento de tu hermano? -

¡De repente, los ojos de Norberto se abrieron con odio!

Grrr, Norberto se Levantó la cabeza y miró al enojado Antonio. No había broma en sus ojos hermosos, tampoco había amor, los ojos llenaban de odio, fijándose horriblemente a Antonio,

- ¡Abuelo, mi hermano ya se murió! -

Todo el mundo sabía que la familia Martínez tenía un nieto que se llamaba Norberto, pero no sabía que la familia Martínez también tenía otro nieto mayor, que era el hermano mayor de Norberto, que se falleció hacía mucho tiempo cuando se mudó a los Estados Unidos.

¡La muerte del hermano para Norberto era el dolor de su corazón que no podía quedárselo ¡

¡Miró a Antonio con odio!

Jorge sorprendió por el odio y trató de convencer a Antonio, -Señor Antonio, cálmese. -

Antonio también se sorprendió por el odio en los ojos de Norberto, y la atmósfera cayó en un extraño silencio...Después de pasar mucho tiempo, Antonio soltó el bastó, y el bastón se cayó al piso de mármol, y Antonio suavemente se cayó en el sofá detrás de él.

Como si pasara por un instante, este anciano se puso más mayor todavía, y en los ojos aparecieron un poco arrepentimiento y triste, pero su rostro severo todavía estaba con ira.

Los ojos rojos de Norberto miraron al anciano en el sofá, cerró los ojos cubriendo las complejas emociones, se apretó los dientes, y cuando se volvió a abrir los ojos, ya se calmó un poco.

-Desde hoy, trabajo en el Grupo Martínez. - Se quedaba erguido, sin movimiento, bajó los ojos miró al anciano en el sofá, y dijo con firmeza,

-Denis, es la primera mujer que me gusta mucho. No me rendiré con ella, no importa la presión que ejerza Joaquín sobre a la familia Martínez, no me rendiré con ella.

Yo soy el culpable de la pérdida del negocio, Joaquín tomó la acción para desafiarme, como ya afeccionó a la familia Martínez, entonces trabajaré en la empresa de familia, para resistir a él y salvaré la perdida de la empresa. -

Antonio abrió la boca como si quisiera decir algo, pero al ver los ojos firmes y oír el tono afirmativo del nieto que estaba frente a él, se quedaba callado.

Antes de que Norberto se fuera, miró al anciano en el sofá y dijo,

-Yo no soy mi hermano, no tomaré la misma decisión como él, no por ti, tampoco por alguna persona de la familia, abandonaré a la mujer que me gusta. No seré incapaz de proteger a mi mujer y a mi familia. -

Antonio se levantó repentinamente la cabeza, lo que le llamó su atención fue la figura alta y esbelta de Norberto que se desapareció en la puerta.

El mayordomo Jorge llamó, - ¿Señor Antonio? ¿Norberto dijo...? -

-Déjalo ir. - Antonio resopló con frialdad y dijo, -Estoy cansado, déjame en paz. - Jorge se fue, el gesto de Antonio estaba complicado...A continuación debería hacer opciones, él estaba esperando a observar qué opción tomara Norberto, y si se podía mejorar la situación.

El auto de Norberto corrió rápidamente en la carretera en una velocidad alta.

El viento pasaba por la ventana abierta y el cabello negro soplaba desordenadamente. Norberto marcó el teléfono, se puso el auricular Bluetooth, -Joaquín, me oyes con atención, a Denis, no me la rendiré, y la familia Martínez, lo protegeré, ¡Veamos al final, ¡quién ganará! -

Al otro lado del teléfono, los delgados dedos del hombre tocaban a la carcasa del teléfono. Al oír las palabras, se rio y habló con voz seria, -Está bien, te rebelaré hasta el último minuto, pero los que me pertenecerán, no es posible que los toques. -

Los dos lados cortaban la llamada casi al mismo tiempo, y no hablaban más, cada uno ya estaba de preparación de pelear.

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