Amante peligroso romance Capítulo 116

Cuando Denis salió, vio al hombre con camisa blanca y pantalones, estaba esperando bajo un viejo baniano.

Había una pizca de sorpresa en sus ojos, -Señor Norberto. -

No había aparecido frente a ella por un tiempo.

Apareció de repente hoy.

-Vamos, ¿ya tienes hambre? - El hombre debajo del árbol, caminó hacia adelante, naturalmente extendió su mano hacia ella y sostuvo su palma, Denis quería evitarlo, pero en ese momento, Norberto dijo, -Sabes, yo soy más fuerte. -

La implicación era para recordarle a Denis que no tratara de rechazarlo.

-Sube al coche, estos días estaba muy ocupado, llevaba mucho tiempo sin comer el fideo de Juan, me acompañas a comer. -

Denis se levantó la cabeza en silencio, miró a Norberto y se sentó en el coche...las palabras de separación deberían hablar con él después de comer.

Los dos estaban en el coche y no hablaron de nada.

A Norberto hoy apareció que no tenía gana de hablar, era totalmente diferente a la impresión que tenía Denis.

En el camino, fue a echar muchos vistazos a Norberto conduciendo.

Denis se convirtió más segura en su sospecha...Se veía que Norberto estaba muy cansado, aunque su apariencia era limpia y ordenada, pero las ojeras debajo de sus ojos no se podían esconder.

Los dos bajaron del coche, como antes, Denis siguió a Norberto a entrar al restaurante de fideos con carne.

Al comer, el celular de Norberto seguía sonando sin parar, de vez en cuando entró mensaje de texto.

Después de comer, Denis pensó que ella debía explicarle claramente a Norberto.

-Señor Norberto...- Dejó los palillos en su mano, iba a hablar.

Sonó el teléfono de Norberto sobre la mesa.

Esta vez no fue un mensaje de texto, Norberto miró al teléfono y frunció el ceño, cogió el teléfono de la mesa, se levantó y salió y le dijo a Denis, -Me esperas un minuto, voy a contestar la llamada. -Salió del restaurante de fideo a toda prisa.

Denis miró hacia fuera, vio a Norberto que estaba furioso, caminando de un lado al otro. Se sentía un poco extraño, y cuando Norberto regresó, vio claramente la ansiedad e ira en los ojos del Norberto.

Frunció el ceño con angustia.

-Señor Norberto, ¿Había pasado algo recientemente? -

Norberto no esperaba que Denis que siempre había sido taciturno, de repente le preguntara eso.

Cuando miró hacia ella, - ¿Por qué me preguntas esto? -

-Yo...pienso que en estos días le ha pasado algo difícil. -

Después de que Denis terminó de hablar, se arrepintió...A Norberto le había pasado algo o no le había pasado algo, de toda forma no tenía nada que ver con ella, y además ella iba a decirle claramente que ella no podía quedarse juntos con él, no importaba que él le amaba de verdad o no, ella pensaba que no era razonable que arrastrarlo a una circunstancia tan mala que rodeaba a ella todo el tiempo.

Pero Norberto estaba feliz en ese momento, mirando a Denis, quien inclinaba la cabeza y se negaba de hablar, él se sentía dulce... ¿Denis se preocupaba por él?

-No pasó nada. -Se relajó un poco, dijo, -No te preocupes por las cosas de la empresa, Denis, puedo resolver de todo. -

-Vale...- Pensó, si no fueran problemas graves, entonces las palabras que le iba a decir ya era la oportunidad justa para decir, -Hoy le iba a decir...- “Mis pasados...”

De repente, la familiar campana del teléfono celular sonó de nuevo, tan pronto como sonó la campana, Denis se sintió claramente que el cuerpo del chico grande se convirtió en frío instantáneamente, - Denis, te llevaré de regreso primero a tu dormitorio, nuestra empresa tiene una reunión temporal que se realizará hoy. -

Norberto miró a la pantalla del teléfono, pero no se contestó, dejó que el mágico sonido de timbre reverberara en este pequeño restaurante de fideos, y se puso dinero sobre la mesa, arrastró el brazo de Denis y se apresuró hacia el coche.

En el auto, Norberto finalmente recordó que Denis pareciera tener algo que decir antes, -Por cierto, ¿qué querías decirme? -

-Yo...- “Quería contarte sobre mis pasados”, Denis estaba sentada en el copiloto, iba a decir, pero después no habló, se vaciló un poco, decidió decir este asunto en otra oportunidad, porque Norberto estaba de prisa por problema grave, por eso, dijo, - No son asuntos importantes, después de terminar su trabajo, le contestaré. -

Los ojos de Norberto llenaban de amor... “Esta mujer ya ha comenzado a preocuparme.”

No importaba qué pasó ella con Joaquín, Norberto creía que, si él acompañaba a Denis siempre, ella debería acostumbrase de su acompañía, entonces los pasados serían los pasados, como un cuento que había oído en los tiempos pasados, porque la acompañía era el amor más sincero.

Si Denis hubiera sabido que Norberto estaba pensando en eso, entonces ella debería decir sus pasados a Norberto.

-Recientemente...he estado muy ocupado, Denis me espera un poco, te voy a ver pronto. Antes de eso, protégete, no te lastime y prométemelo. -

El corazón de Denis palpitó más rápido repentinamente, bajó la mirada en las manos grandes de Norberto que envolvían fuertemente a sus manos... ¿cómo era posible no estar conmovedor?

Le dijo, “protégete, no te lastime”.

Denis se levantó los párpados, miró al rostro del chico grande, tenía gana de hablar de todo, dejarle saber los pasados suyos, y conocer bien qué tipo de mujer ella era...quería revelar la verdad...y le presentara el especto más feo de ella.

Ella estaba muy emocionada y tenía mucha gana de hablar de sus pasados.

-Norberto, mi nombre es Denis, ¡es la Denis de la familia Alonso ¡- Habló de repente, con todo su coraje, cerró los ojos y gritó con fiereza.

Era así, gritó, su corazón palpitó muy rápido en este momento, si no gritó las palabas en este momento, no se atrevía a decir en otro momento.

Especialmente se enfatizó que ella era la Denis de la familia Alonso, Denis se apretó los dientes, como ya comenzó a revelar, entonces, revelaría de todo, -Yo había sido...-

Norberto se echó de reír y le besó a Denis amorosamente, dijo, - Ya lo sé, eres Denis, pero no importa que había hecho, eres mi Denis, te amo. -

Denis abrió los ojos estupefactos, y vio al chico grande con una sonrisa alegre, además de alegría, también había un cariño gentil que ella no podía mirar directamente, -Señor Norberto...- Ella estaba aún más estupefacta.

-Baja del coche, cuídate mucho, cuando resuelvo los problemas, vengo a verte. -