Amante peligroso romance Capítulo 118

En el momento que se abrió la puerta, Julián y Venancio se quedaron atónitos.

Pero luego, Julián sonrió y le dijo a Norberto, -Qué bueno, tan rápido. -Su impresión de Denis quedaba en lo que sucedió en el palco en ese día.

Una sonrisa intrigante apareció en el rostro de Venancio que era más hermoso que lo de una mujer:

-Nos encontramos de nuevo, señorita Denis. -

Norberto y Julián estaban sorprendidos al mismo tiempo.

- ¿Os conocéis? -

Norberto volvió la cabeza y sonrió, le preguntó a Denis, - ¿Cuándo conociste a Venancio? -

En este momento, las manos y las piernas de Denis temblaron levemente.

Denis nunca pensaba que estas tres personas fueran muy buenos amigos.

Sin mencionar que Norberto la llevaba conocer a sus amigos.

Denis se preguntó a sí misma, si lo hubiera sabido antes, ¿todavía vendría?

No... la respuesta era clara que no.

Norberto le abrió pensativamente una silla a Denis, -Siéntate. No te pongas tan nerviosa. Julián y Venancio son mis amigos. Los dos parecen que no son personas fáciles de llevarse, pero eran bastante agradables. -

El rostro de Denis palideció, sonrió de mala gana y se sentó.

Julián bromeó, -Norberto, ¿cuándo te conviertes tan solícito? Además, ¿qué significa que Venancio y yo no somos fácil de llevarnos? ¿parecemos así? -

-Venancio, ¿sí? -, dijo Julián, volviéndose para tocar a Venancio con su codo.

Se descubrió que Venancio había estado mirando a Denis con mucho interés.

Julián frunció el ceño, -Venancio, no mires así a la señorita Denis, le da miedo, ten cuidado con que Norberto pelee contigo por esto. -

Venancio se rio, - ¿Qué, en serio? - preguntó a Denis casualmente, - ¿Te asusté, “señorita” Denis? -

La palabra “señorita” que pronunció de Venancio fue particularmente significativa.

El rostro de Denis estaba más pálido.

Norberto prestó más atención inmediatamente a Venancio y dijo, - ¿Por qué siento que estás interesando con mi novia? - Norberto no le gustaba que Venancio miró así a Denis, ni le gustaba sus palabras “señorita Denis” .... no sabía que pensaba más, pero parecía algo saliera mal.

Venancio miró a Norberto, y luego a Denis, le dijo con indiferencia, -No te preocupes, no me interesa ese tipo de chica. -

Julián miró a Venancio... ¿Qué le pasó hoy? Cada su palabra parecía extraña.

Un rastro de disgusto brilló en los ojos de Norberto, miró a Venancio, luego extendió su mano para cubrir el dorso de la mano de Denis, sonrió y le preguntó, - ¿Qué quieres comer? -

-Yo... ¿dónde está el baño? Quiero ir al baño primero. - Si ella estuviera bajo la mirada abrasadora de Venancio, tal vez no pudiera aguantar más tiempo.

-Sal y gira a la izquierda. -

Al terminar de las palabras de Norberto, Denis ya se había levantado y salió apresuradamente.

-Parece está muy apresurada. -Venancio dijo de repente.

Norberto miró a Venancio, - ¿Qué te pasó?, ¿me estás envidiando? -

-No… ¿lo necesito? - ¿Le estaba envidiando? ¿por quién? ¿por esa chica?

Venancio puso los ojos en blanco. -Estás demasiado preocupado. Me voy a fumar. -

Después de hablarlo, apartó la silla y salió del palco.

Julián intentó a mediar la disputa y dijo, -Hoy Venancio se ve poco loco, ignóralo. -

Norberto frunció los labios y no dijo nada, obviamente estaba descontento.

Después de un rato, Julián levantó su cabeza de repente y preguntó, - ¿Por qué conociste a Denis? -

Julián quedó en silencio un rato y no le dijo cómo se conocían, le preguntó a Norberto directamente, - ¿sois pareja? entonces debes saber, ¿dónde está trabajando Denis? -

-Lo sé, Grupo de Entretenimiento Internacional Emperador. -dijo Norberto. - ¿Entonces, te refieres a que la conociste allí?

Al escuchar que Norberto ya sabía que Denis estaba trabajando en el Grupo de Entretenimiento Internacional Emperador, Julián se sintió aliviado. Norberto ya lo sabía, no necesitaba ocultarlo, por lo que habló brevemente sobre lo que sucedió ese día, por supuesto, también omitía algunas cosas.

...

Denis entró al baño de prisa, su mente estaba poco confundida. Ella no quería volver al palco ahora.

Pero llegó la llamada de Norberto.

-Estoy bien, vuelvo ahora. – Suspiró… esconderse no era una buena forma.

Al abrir la puerta del baño y alguien entró corriendo, con un golpe fuerte, la puerta se cerró de nuevo.

-Cállate, no quieres que alguien sepa que tú y yo estamos encerrados solamente en un lugar tan privado, ¿verdad? - Una voz familiar sonó lentamente cerca de sus orejas.

Denis tembló, el brazo sobre su cintura estaba aumentando su fuerza, -Qué indiferente... “señorita” Denis, no espero que tu manera fuera tan astuta, llamaste deliberadamente mi atención, y al mismo tiempo te convertiste la novia de Norberto quien es guapo y rico. -

-No. –

“No llamé deliberadamente tu atención, y no intento de seducir a ningún hombre e incluso Norberto a propósito.”

-Dijiste que no, como si... tu cuerpo dijera que no, - las orejas de Denis de repente le dolían por la mordedura fuerte de Venancio, se rio, -mira, grita si te duele, ¿o la profesión como tuya, ya está acostumbrada a ser persona deshonesta? -

Obviamente es doloroso, pero puede fingirse que no se duele, ¿Eres como esas actrices de la película de acción de Japón, obviamente sientan muy incómodas, pero sigan gritando contentamente? -

Denis se contuvo de golpear el hermoso rostro de Venancio con toda su fuerza... sus puños fueron apretados y liberados de vez en cuando.

- ¿Sabes? Hay personas sí les duele, pero no gritan por el dolor, es por el grito no va a traer ningún cuidado, sin embargo, puede provocar una paliza severa. - Ella estaba describiendo su vida en esos tres años.

-Entonces quiero preguntarte, ¿esas personas que se resisten a llorar de dolor solo para evitar una paliza severa, ¿no se están equivocadas? ¿o no son honestas? -

Venancio estaba visiblemente aturdido, pero luego una sonrisa sarcástica apareció en su rostro.

-Tu pareces ser muy buena para fingir lástima, como si te lastimara e irías a grita, te golpearé de nuevo. -

Denis bajó su mirada... Las personas que no habían experimentado de esa vida, no iban a comprender, se dijo que, en diecisiete días, iba a adaptar un hábito. Si en sólo diecisiete días podían formar un hábito, y… ¿en tres años?

Entonces, no era necesario contarle en más detalles para que lo comprendiese.

-Señor Venancio, déjeme ir, Norberto acaba de llamarme y me pidió que regresara pronto. Si estoy aquí por mucho tiempo, me temo que Norberto salga para buscarme. -

- ¿Estás amenazándome? - Venancio arqueó las cejas, -Bueno, es mejor venir Norberto, también puede ver qué tipo de persona eres. -