Amante peligroso romance Capítulo 156

En el estudio no muy iluminado, Joaquín miró el informe que tenía frente a él con expresión seria.

-¿Este es el resultado de tu investigación?- Solo eran algunas hojas finas de papel que no demostraban la inocencia de la mujer, sino que incluso confirmó aún más las malas palabras y hechos de esa mujer.

Manrique asintió, -Jefe, realmente no hay secretos ocultos en lo que pasó hace tres años. Después de tres años, no hay nadie más que sepa la verdad excepto la señorita Denis.

Solo he podido comenzar la investigación con los compañeros de clase cercanos a la señorita Jimena.

Las tres personas en este documento eran compañeras de cuarto de la señorita Jimena. Según sus recuerdos, antes del incidente de hace tres años, la señorita Jimena estaba muy feliz. Una de las compañeras incluso se burló de que seguramente la señorita Jimena estaba tan emocionada porque iba a ver a su novio.

La señorita Jimena dijo en ese momento que la señorita Denis la llevaría a Vista Nocturna para ganar experiencia de vida.

Esta frase fue escuchada por las tres chicas que vivían en el mismo dormitorio.-

Lo que quería decir era que ese asunto estaba justificado. Además, lo que las tres chicas del dormitorio escucharon juntas no podría ser mentira.

-Hay otros detalles que están anotados en el documento.- dijo Manrique, -Jefe, no puede haber falsedades en lo que pasó hace tres años.-

Detrás del escritorio, el delgado dedo índice de Joaquín se flexionó para golpear la mesa una y otra vez, su mirada se posó en el documento, como si pesara algo.

-Manrique.- dijo de repente, y sonó una voz profunda, -Ve a la cárcel para investigar.-

-Je... Sí, Jefe.- Manrique quiso refutar originalmente, pero finalmente se comprometió.

Si a su jefe le preocupaba tanto el asunto de hacía tres años y el asunto de esa mujer, entonces iba a investigar. Pero daba por sentado que esa mujer no era inocente.

Si esa mujer era inocente, ¿no significaba que la señorita Jimena era la mala?

¡No, eso era imposible!

La señorita Jimena era muy buena persona, gentil y débil. En comparación con la señorita Jimena, la mala solo podría ser esa mujer.

Manrique se dio la vuelta y salió del estudio. Se había reprimido su ira en su interior. El jefe le pidió que investigara los asuntos de hacía tres años y lo que pasó en la prisión. En realidad, en la mente del jefe, tal vez ya había concluido que la señorita Jimena era la mala.

“Que espere a que averigüe lo que pasó en la prisión para exponer la verdad frente al jefe, ¡entonces el jefe ya no podrá estar del lado de esa mujer!”.

En el estudio

Joaquín volvió a leer el documento con una complejidad escondida en su mirada.

Cuando recibió el informe de la investigación y vio los resultados de la investigación, se mostró solemne, pero debía admitir que se sintió aliviado en ese momento.Sabiendo que no la había culpado injustamente, se sentiría más consolado en su interior.

Pero ese tipo de consuelo no podía permitirle ignorar egoístamente lo ilógico que todo eso parecía.

Los resultados de la investigación de Manrique no estaban mal..Pero tal vez, ese asunto ya iba en mal camino desde el principio.

Andrés había estado al lado de Joaquín todo el rato como una persona invisible.

Pero en ese momento.

-Andrés, has visto todo lo que pasó hace un momento, entonces debiste haber entendido algo, ¿no?- Sus ojos perspicaces enfocaron el rostro de Andrés. Cuando este último escuchó eso, de repente se sorprendió por un buen rato, luego asintió con impotencia. Sí, Andrés lo entendió.

También entendió lo que el hombre quería decir que parecía un rey delante de él. El jefe quería decir que Manrique fue egoísta desde el principio, por eso ese informe de investigación tenía problema.

-Jefe, Manrique le ha seguido desde que era un niño. Puede que tenga un poco de egoísmo, pero definitivamente no lo traicionará cuando se trata de grandes asuntos.-

Antes de terminar de hablar, Joaquín levantó la mano para evitar que Andrés siguiera diciendo, -No falsificará este informe. Pero debido a que ha tratado este asunto con prejuicios desde el principio, es muy fácil de que sea aprovechado por gente que trama malas intenciones.

No falsificará el informe, pero es difícil decir si los resultados de este informe son verdaderos o falsos.- Joaquín empujó el informe frente a Andrés.

-Escucha, lo que quiero que hagas es que investigues en secreto lo que pasó hace tres años. Pero tienes que mantener este asunto en secreto, ni siquiera Manrique puede enterarse de esto.-

Egoístamente hablando, esperaba que Manrique no había sido aprovechado por otros, y la autenticidad de ese informe era confiable. De esa manera, no le culpó por error a la mujer en el asunto de hacía tres años. Pero la mujer le estaba demostrando con su propio comportamiento que… ¡Ella nunca haría cosas tan viciosas como las de hacía tres años!

Hacía tres años, podía hacer como si no hubiera pasado nada y no importarle la verdad.

Pero ahora, le resultaba muy difícil volver a un estado indiferente por esa mujer.

Naturalmente, también notó esos pequeños detalles a los que antes no prestaba atención.

Quería averiguar la verdad y debía hacerlo, porque él había hecho que ella perdiera su orgullo, por eso debería darle una explicación.

Andrés recibió la misión improvista, y en ese momento sonó el teléfono de la mesa.

Los dedos delgados presionaron el botón para coger la llamada, y el rostro del hombre se puso descontento en un instante.

Si hubiera un rastro de culpa antes, ahora, ¡en ese hermoso rostro solo se podía ver una cara amargada!

¡En un instante!

¡De repente se puso de pie, su esbelto cuerpo produjo una fuerza explosiva!

-¿Jefe? ¿Qué pasó?- La expresión de Andrés también cambió, ¡rara vez se podía ver a Joaquín así!

-Inesperadamente, ¡esa mujer nunca abandonó la idea de huir de mí!-

¡El hombre apretó los dientes, como si cada palabra saliera difícilmente de su boca!

¡La frialdad estaba por todo su hermoso rostro!

Incluso Andrés que llevaba mucho tiempo a su lado, ¡no pudo evitar temblar de miedo!

¡Cuando escuchó las palabras de Joaquín, Andrés sintió un temor en su interior! Pero antes de que tuviera tiempo de decir una palabra, la persona delante de él ya había salido del lugar rápidamente.

Andrés lo siguió apresuradamente, ¡tuvo que correr para alcanzar ese hombre que tenía delante!

-Jefe, cálmese, ¡tal vez es un malentendido!- Andrés le alcanzó y vio que Joaquín lucía como si estuviera a punto de matar a alguien. Le seguía a Joaquín durante tanto tiempo, había visto el cariño de Joaquín por Denis con sus propios ojos. Si su jefe se alteraba mucho, ¡Andrés tenía mucho miedo de que Joaquín hiciera algo de lo que se podría arrepentir en el futuro!

Si era así, ¿qué podría hacer?

Joaquín iba a toda prisa ignorando a Andrés completamente.

Tiró de la puerta para entrar al auto, hizo una serie de acciones fluidamente, y el auto se fue por la carretera. A Andrés no le dio tiempo de subirse al auto, por lo que solo pudo dar la vuelta para llegar al otro auto, tirar de la puerta, subirse al auto y alcanzar rápidamente al automóvil de adelante.

Pero el auto de delante iba tan rápido como un corredor profesional. Andrés miró a su jefe en el paso sobre nivel con mucha preocupación, a su vista se estaba montando una escena peligrosa de coches a gran velocidad.

Solo podía seguir difícilmente el coche de delante, pero era imposible alcanzarlo.

¡Solo podía quedarse muy atrás!

El coche se bajó del paso sobre nivel y se dirigió hacia la izquierda, ¡de repente frenó bruscamente produciendo un ruido en el espacio!

Se escuchó el freno del coche.

Entonces Andrés finalmente lo alcanzó, pero cuando levantó la vista se sorprendió de ver... ¿la comisaría?

¿Para qué habían venido allí?

Antes de que pudiera pensar en ello, Andrés se bajó rápidamente del auto y corrió tras él.

-Señorita, guárdalo bien, este es tu nuevo carné de identidad.-

-Gra…- Cias…

Antes de terminar su palabra, una mano arrebató repentinamente el carné de identidad de las manos del personal de la ventanilla de servicio.

-Te equivocaste, este es mi carné...- Denis volvió la cabeza, y de inmediato se quedó tensa, sus pálidos labios empezaron a temblar, -Tú-tú, ¿por qué estás a-aquí?-

-¿Quieres huir de mí?- El rostro severo del hombre estaba lleno de frialdad, en vez de responder lanzó una pregunta.

-No-no...-

-¿No?- Los delgados dedos agitaron vigorosamente el carné de identidad que tenía en la mano, -Entonces, ¿qué es esto? ¿Me lo quieres explicar?- Su carné de identidad había sido guardado por él hacía mucho tiempo, pero esa mujer vino para hacer un nuevo carné de identidad.Todo eso, además de decirle que se iba a escapar de él, ¿qué más podía decir?

-Yo...- ¿Qué podía decir ella? ¡Joaquín no era tonto!

-Denis, qué genial, ¿eh? Te has quedado a mi lado obedientemente durante tanto tiempo para acostumbrar mis sentidos y bajar mi guardia, entonces te aprovechas de cuando tengo la guardia baja y no estoy vigilándote para venir a hacer un nuevo carné de identidad.-

Denis se mordió el labio inferior... ¿Al final había fracasado?

-Dame el carné de identidad.- Tenía el rostro pálido, -¡Joaquín, dame mi carné de identidad!-

-Ja, ja.-

-Si no me lo das, llamaré a la policía. Justamente estamos aquí, Joaquín, dámelo-

La ira estaba invadiendo el interior del hombre, su mente solo estaba pensando en que “Esta maldita mujer se va a escapar de él”, ¡esa idea estaba haciéndole perder su juicio!

En ese momento, las palabras de la mujer solo estaban echando leña al fuego.

-¿Llamar a la policía?- Las comisuras de sus labios se levantaron, pero la sonrisa no llegó al fondo de sus ojos, -Está bien, llama.-

Denis estaba tan ansiosa que gritó en el vestíbulo de la comisaría, -¡Policía! ¡Policía! Quiero delatar a alguien, ¿habéis visto? Este hombre me quitó el carné de identidad y no me lo devuelve.-

-Señor, esto...- La funcionaria de la ventanilla aún no había hablado.

Y el hombre extendió su largo brazo para arrastrar a Denis hacia sus brazos, -Ella es mi esposa, solo estamos teniendo una pequeña discusión, es un asunto familiar, ¿no me digan que también se ocupan de esto?-

-Mmm…-

-¿Quién es su esposa? No escuches sus tonterías, porque no lo conozco en absoluto.- En realidad era mejor que Denis no dijera eso, porque ahora que había dicho eso, la gente de allí pensó con más seguridad que ella y el hombre de al lado eran una pareja joven.

Ella dijo que no lo conocía, pero entonces, ¿cómo pudo llamar por el nombre de ese hombre antes?

-Señorita, si es una pelea de parejas, es mejor que volváis a casa para discutir, ¡tenéis que tener en cuenta el lugar en donde estáis!-

-¡De verdad que no soy su esposa!-

De repente, el hombre se inclinó hasta la mitad, apoyó la cabeza en su hombro y dijo de una manera extremadamente peligrosa, -Denis, ¿de verdad crees que nadie de aquí me conoce? Incluso si esta pequeña funcionaria no me conoce, ¿qué hay de la gente con cargos mayor que ella?-

¡En un instante!

¡Ella lo entendió todo!

¡Alguien de allí conocía a ese hombre!

Pero no salió para detenerle... ¡Claramente era porque no quería ofenderlo!

Por un momento, Denis sintió que una amargura llenó su interior.

Joaquín se enderezó de repente, la agarró del brazo con una mano y dijo con voz muy profunda, -¡Ven conmigo!-

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Amante peligroso