Después de escuchar sus palabras, Ángela no tuvo ninguna reacción.
Ella y Stuardo se habían convertido completamente en enemigos. No albergaba ninguna esperanza de que Stuardo le creyera.
"Sra. Fernández, tienes mal aliento. ¿No te ha dicho nadie a tu alrededor?", Ángela levantó la mano y se cubrió la nariz.
Yolanda frunció el ceño, quería explotar, ¡pero no se atrevía a abrir la boca!
Después de que el ascensor llegó al piso designado, las puertas se abrieron lentamente.
Ángela fue la primera en salir del ascensor.
No muy lejos, Stuardo la vio y caminó hacia ella.
Llegó frente a ella, agarró su brazo con fuerza y la llevó hacia un rincón.
Yolanda los vio pasar delante de ella.
Se quedó allí mirándolos.
Vio a Ángela sacudir el brazo de Stuardo.
Luego, Ángela dijo: "¡La llamada fue de tu madre! Lo que dijimos es nuestro asunto, ¡no tiene nada que ver contigo! ¿Cómo murió tu madre, no puedes averiguarlo tú mismo? ¿No tienes otra forma de lidiar con esto aparte de molestarme?"
¡Qué feroz!
Yolanda no esperaba que Ángela se atreviera a ser tan dura frente a Stuardo.
Parece que Ángela fue amable con ella en el ascensor hace un rato.
Stuardo le daba la espalda a Yolanda, pero Yolanda vio que su espalda estaba tensa.
"¡No te estoy preguntando cómo murió mi madre ahora! ¡Solo quiero saber qué le dijiste a mi madre! ¿Qué dijiste en esos cinco minutos? ¡Ángela, me entiendes muy bien lo que dije. ¿Por qué finges no entender?"
Ángela sonrió fríamente: "Tu madre murió y tú no te preocupas por cómo murió. Si fueras mi hijo, estaría muy triste y decepcionada."
"¿¡Qué estás balbuceando?!" Stuardo estaba enfurecido por ella.
Las palabras de Yolanda dejaron algo desconcertada a Ángela.
¿Las palabras que Yolanda le dijo en el ascensor eran todas mentiras?
Pero es fácil distinguir si las palabras de una persona son mentiras o la verdad.
¿Cómo es que Yolanda, que no es una actriz profesional, tiene tan buenas habilidades de actuación?
La mirada de Stuardo se movió de la cara de Yolanda a la de Ángela.
"Ángela, ¿tienes algo más que decir?" Su voz era baja y sus ojos estaban llenos de decepción.
"No." Dijo con voz calmada.
"Pídele disculpas." Dijo él, "¡Pídele disculpas a Yolanda!"
Ángela estaba completamente asombrada. Dijo: "¡Incluso si la difamé, no le pediría disculpas! ¡Porque todo lo que dije fue lo que ella me dijo! ¡Si eso cuenta como difamación, entonces ella se difamó a sí misma!"
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