Aventura Amorosa romance Capítulo 58

Fionna miró el rostro agraviado de Yunuen, y se sintió muy angustiada por dentro.

—Yunuen, ¿te gusta tanto el tío Eric? —preguntó Fionna en voz baja.

—Sí, me gusta como papá. La gente dice que papá es el alguien que está detrás de los niños para protegerlos. Creo que el tío Eric es ese alguien que me protege —Yunuen respondió afirmativamente a Fionna.

La afirmación en los ojos brillantes hizo que Fionna se sintiera culpable.

Eric, al otro lado del teléfono, escuchó con entusiasmo, pero se sintió impotente de nuevo.

—Yunuen, no dependas tanto del tío Eric. Incluso si mamá se lo explicara al tío Eric claramente, tampoco podría ser tu papá. El tío Eric y yo estamos caminando sobre dos rutas paralelas que nunca se encontrarán.

Fionna debía aprovechar esa oportunidad para deshacerse de la dependencia que tenía Yunuen con Eric, de lo contrario la niña resultaría más herida en el futuro.

—Mira, el tío Eric es tan bueno y su estatus es tan alto que sus relaciones interpersonales están en el nivel más alto. Pero yo no estoy a ese mismo nivel, por eso no hay forma de que nos juntemos.

—Pero mamá también es muy sobresaliente, mamá... —Yunuen continuó, aunque no entendía lo que decía su madre, sabía que ella era excelente, amable y digna del tío Eric.

—Yunuen, espera a que a que termine de hablar —Fionna interrumpió a Yunuen gentilmente, luego continuó—. Sé que necesitas a un papá, pero el tío Eric no será esa persona. El papá que quieres tiene que vivir conmigo. Dos personas que viven juntas tienen que amarse para salir adelante. Pero el tío Eric tiene a su esposa y alguien que ama. Yo no le gusto, así que es imposible que estemos juntos.

—Mamá, ¿amas al tío Eric? —Yunuen dijo inocentemente. Fionna estaba atónita de nuevo, y Eric que estaba al teléfono contuvo la respiración inconscientemente. Esperaba con ansias lo que diría Fionna a continuación.

Un momento después.

—Yunuen, el amor es mutuo. Si soy la única que invierte amor no serviría de nada. Dame algo de tiempo, si encuentro a la persona adecuada, a alguien que me ama y yo le amo, definitivamente te daré una familia completa con papá.

Fionna solo podía calmar a la niña de esa manera de momento. Porque no sabía si la persona que amaba y que la amaba existía o no.

—Vale, te daré tiempo.

Yunuen aceptó de mala gana, todavía le gustaba más el tío Eric. Se preguntaba si la gente que su madre conociera en el futuro sería mejor que el tío Eric.

—Yunuen, si todavía tienes la oportunidad de ver al tío Eric, ya no puedes molestarle con este asunto, y no puedes ponerle en una situación difícil —Fionna continuó recordando.

—Sí, lo sé.

Yunuen aceptó, pero no estaba segura de poder controlar su boca.

—Fionna...

Pensaba que ese tema podría terminar y ya podrían comer tranquilamente. Sin embargo, Lucas habló.

—Fionna, Yunuen no puede depender de papá, pero ¿yo puedo seguir dependiendo de ti?—Lucas preguntó en voz baja, obviamente preocupado.

—Sí, puedes depender de mí para siempre —Fionna respondió con una sonrisa amable. No necesitaba a un hombre en su vida, siempre y cuando los dos niños estuvieran a su lado.

—Pero cuando encuentres novio y papá para Yunuen, ¿qué será de mí?

Lucas seguía preocupado, temía que algún día se viera obligado a dejar Fionna.

—Lucas, ya sea que encuentre novio o encuentre papá para Yunuen, si quieres, te llevará a donde vaya —Fionna respondió con sinceridad, eliminando las preocupaciones de Lucas tanto como fuera posible. De ninguna manera enviaría a Lucas de regreso con Gloria.

—Pero no puedo vivir sin papá, y tampoco puedo vivir sin ti.

Las palabras de Lucas dejaron a Fionna sin habla.

Los dos niños tenían diferentes grados de apego a los dos adultos. Ese tipo de sentimiento era algo innato y no era fácil de deshacer.

Podía proteger a Lucas siempre, pero para ello tenía que enfrentarse a Eric y Gloria por el resto de su vida. Eso no era fácil para Fionna.

—Está bien, no hablemos más de esto. Ya pensaremos en una solución en el futuro. Después de la cena, vamos a hacer los deberes juntos.

Fionna cambió de tema para evitar que los dos niños siguieran deprimidos.

La partida de Eric no solo la afectó a ella, sino que los niños también se sintieron confusos y le echaban de menos.

Eric finalmente colgó la llamada, y pensando en la conversación de antes, se sintió muy alterado.

Como decía Fionna, no podía ser el padre de Yunuen en ninguna de las circunstancias y en ningún momento. Sin embargo, la voz agraviada de Yunuen le daba mucha pena.

El anhelo de Yunuen por un padre parecía muy fuerte, por lo que Fionna debería encontrar un hombre con quien casarse por el bien de su hija. Pero si se casaba con alguien... ¿Por qué se sentía tan angustiado pensando en que ella se iba a casar con otro?

Fionna iba a trabajar y llevaba una vida tranquila como de costumbre. Eric llamaba todos los días, pero la persona a la que buscaba siempre era Lucas. Por eso, cuando veía que la llamada era de Eric, Fionna le daba el móvil a Lucas directamente.

Solo pasó una semana, pero Fionna sintió que había sido más de un año.

Cuando fue al trabajo y llegó a la empresa, Fionna tenía un asunto de trabajo que necesitaba hablar con Eric, así que fue a la oficina de secretaria.

—Secretaria Lorena, ¿el presidente Eric todavía no ha vuelto al trabajo?

Fionna pensó que debería estar casi recuperado en una semana.

—Ya ha vuelto, el señor Eric ha vuelto hace cinco días. ¿Qué pasa? —Lorena respondió.

¿Cinco días? Fionna se sorprendió de repente.

No sabía que había vuelto al trabajo en esos cinco días. Sus despachos estaban tan cerca, pero ni siquiera sabía que Eric había vuelto a trabajar. E incluso estaba preocupándose aún por su lesión.

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