(COMPLETO) El Loco De Mi Prometido romance Capítulo 44

Estuve hablando con la policía todo el día y al parecer son más inútiles de lo que pensé, no habían pruebas de lo sucedido pero yo sabía que estaba pasando así, a Alice la habían secuestrado sin dudas.

—¿Cómo que han hecho todo lo posible? si es necesario quiero que pongan esta cuidad de cabeza, quien está en juego es mi esposa la madre de mi hijo— arrojé violentamente el teléfono por la frustración del momento— Así que hagan su trabajo o tendré que hacerlo yo mismo y no creo que eso sea de su agrado.

—Nicolas, tranquilo, la encontrarán— no importa que tratan de tranquilizarme, no estaré en paz hasta que hallen a mi mujer sana y salva.

—Madre, aún no sabemos quién se la llevó y por qué. No han pedido rescate, así que obviamente no es algo por dinero si no personal— cuando terminé de decir estas palabras un pensamiento llegó hasta mi —Kevin, ven aquí un momento.

—Si, señor— se acercó mi mano derecha a toda

prisa.

—Necesito que averigües todos los movimientos de David Lancaster en las últimas semanas— no sé si él es el causante de todo este lío, pero lo descubriremos.

—De inmediato, señor— solo espero que no sea peor lo que estoy pensando en estos momentos.

—Iré a ver como está el pequeño Samuel, debe extrañar a su madre— mi madre podrá estar preocupada por Alice pero el bebé es su prioridad en estos momentos.

—Está bien, ve— recliné mi cabeza en el escritorio, no podía creer que la había vuelto a perder de mi vista, estaba cerca de la felicidad y se me escapó de entre las manos.

Mientras aún me lamentaba por haber descuidado a mi futura esposa, alguien tocó la puerto haciendo que recobrara un poco la compostura.

—Pase— no pregunté quién se estaba presentando ante mi pero todos en la casa saben que no estoy de humor.

—Nicky— error mío, debí haber sabido quién estaba tocando la puerta, no tenía ganas de lidiar con ella ahora.

—Debes estar muy cansado, Nicky, permíteme ayudarte— caminó haciendo un intenso ruido con sus tacones hasta quedar detrás de mi, colocó sus manos en mi hombro y comenzó a masajear, no pude seguir soportando su toque y me paré de golpe.

—Ya vete, Rosalie, quiero descansar, mi día está

siendo una verdadera pesadilla— de repente me sentí mareado por lo que caí en mi silla nuevamente.

—Nicky, enserio, déjame ayudarte— no podía mantener mis pensamientos en orden, cuando quise tener un poco de razón me di cuenta de que estábamos en mi habitación.

—¿Qué...qué me hiciste?— los lapsos de tiempo no estaban claros en mi mente, ¿Cómo y cuándo hemos llegado aquí? Rosalie no tiene tanta fuerza como para cargarme.

—Tranquilo, Nicky, esto debió pasar hace mucho, solo me tomé mi tiempo— cuando me percaté de que estaba sobre mi cama, caí y todo se tornó oscuro.