Capítulo 390
Violeto, con una taza en sus manos, estaba sentada en el sofá, intentando pretender que no habla escuchado nada, pero serio una mentira decir que su estado de ánimo no se había visto afectado
Afortunadamente, no paso mucho tiempo antes de que apareciera Raúl,
Las personas que se asomaban por la puerta para chismorrear también se dispersaron.
“Violets, el Sr. Castillo te esta llamando.
“Mmm,” asintió Violeta.
Sin beber nl un sorbo de su bebida, siguió a Raúl fuera del salón.
La puerta del despacho del director estaba abierta, Rafael estaba sentado solo en una silla alta, ya no habia rastro de Bianco, en el cenicero había un cigarrillo recien apagado, el olor del tabaco aún no se habla disipado completamente.
Raúl cerró la pueria detrás de ella, y Violeta entro
Habia un plan de negocios en el escritorio, claramente Bianca había estado sentada en la silla del otro lado Violeta apretó los labios, no se sento de inmediato, en cambio no pudo evitar preguntarle: ¿Ya viste a tu prometida?
Tan pronto como las palabras salieron de su boca, se sintió un poco molesta
¿Qué le estaba pasando? Ella habia actuado con tanta dignidad, pero después parecia estar quejandose como una esposa resentida. Sabia que no se sentia incomoda, tal vez solo estaba siendo influenciada por las voces chismosas de las empleadas.
¿Tú no eras la que decía que no estabas celosa?” Rafael bromeó con ella al verla.
No estoy celosa… Violeta se sintió incómoda.
Rafael se incliné hacia adelante, mirándola a la cara, ¿Entonces qué te pasa?”
Solo que.. Violeta mordió su labio, pensó por un momento, pero al final no dijo nada, solo se excusó, ¡Solo queria burlarme de til Ve a revisar tus archivos, no te molestaré, estaré aqui revisando mi Twitter en silencio! No queria hablar, y Rafael no insistió en preguntarle más.
Solo que sus ojos oscuros se entrecerraban, su mirada siempre seguía su figura, viéndola sentarse en el sofa, sacar su teléfono del bolsillo y luego mirar la pantalla.
Violets empezó a buscar noticias de temas de su interés, sin darse cuenta que Rafael la estaba mirando fijamente
Había bastantes noticias interesantes, aunque no era adicta a su teléfono, cuando tenia tiempo, le gustaba revisario.
En ese momento, apenas miraba cada noticia antes de salir, no sabia si era por su estado de ánimo, pero no le interesaba nada.
De repente, una sombra cayó frente a ella. Violeta levantó la vista y vio que Rafael se habia levantado del escritorio y habia venido a su lado, mirándola desde arriba.
“Eh, ¿qué pasa?”
Rafael se pasó la lengua por los labios y de repente le dijo: “Hace tiempo que no tomo tu café.”
¿Quieres tomarlo ahora? Violeta se quedó perpleja.
Cuando estaban saliendo, aparte de sus huevos con tacino, siempre le encantaba el cafe que ella preparaba.
“Mmm, asintió Rafael.
“¿Hay café en la sala de descanso?” Violeta guardó el teléfono en su bolsillo y le preguntó. Al verlo asentir de nuevo, se levantó del sofá y dijo, “Bueno, entonces Iré a preparario para ti ahora.”
Rafael de repente la detuvo y dijo, “Dame el anillo por un momento.”
*¿Para qué?” Violeta estaba muy confundida.
“No importa.” La expresión de Rafael era normal, sin decir nada más.
Al verlo asi, Violeta no entendia cuál era su intención, pero aun asi hizo lo que le pidió, con cuidado se quitó el anillo de diamantes de su dedo anular y se lo dio con confusión
Esta era la primera vez que se lo quitaba desde que él se lo puso.
Anteriormente, temia que se perdiero, por lo que nunca se lo quiló, incluso cuando se duchaba.
Rafael no le respondió, pero extendió su mano hacia ella, tomó la taza de café y la llevó a sus labios para dar un pequeño sotho, su ceño se elevó ligeramente, pareciendo apreciar el sabor.
“Bueno, el sabor es el de siempre.”
Violeta queria preguntarle con un tono de reproche, ¿cómo es que aún recordaba el sabor de su café despues de cuatro años?
Capitulo 390
Sin embargo, antes de poder decirlo, recordó los huevos con tocino, y estaba segura de que él siempre los habla recordado,
Con su mano aun agarrando la taza cerca de su boca, cada vez que é tomaba un sorbo de café, rozabe su barbilla. Su rostro se puso rojo
poco a poco, después de todo, estaban en un lugar público y habla muchas.
personas mirando.
Retird su mano con un poco de vergüenza,
Rafael no intentó detenerla. Pero cuando su mano cayó, él la volvió a levantar
*Ya eres lo suficientemente mayor ¿Cómo puedes ser tan olvidadiza?”
Violeta lo miro atónita, cuando estaba a punto de expresar su confusión, el sacó un anillo de diamantes de bolsillo, luego, bajo la vista y lo deslizo en su dedo anular mientras decía, Te lo dije, debes mantenerlo siempre en lu mano, ¿cómo pudo caerse al suelo? Afortunadamente lo encontré, de lo contrario te hubieras buscado un problema conmigo!”
Ella cerro la boca que habia abierto en sorpresa y lo miro atónita
Rafael no se preocupo por las apariencias y su voz aterrizo en todos los oidos presentes
Las dos empleadas que habian estado chismorreando antes, se miraron y se quedaron sin palabras.
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