Dulce Juguetito romance Capítulo 81

"Puedo tomar un sorbo de agua?"

Cuestiono de forma suave y con la cabeza agachada hacia Reynard quien no ha parado de alimentarme

"Agua?"

"Enseguida."

En este momento me es difícil distinguir si es el denominado "anciano" quien me responde o el bastardo hijo de puta.

Su doble personalidad ha estado confundiendome este tiempo.

"Toma mi adorada princesita."

La sonrisa liviana es característica del "anciano."

"Gracias."

Agradezco antes de tomar el vaso rosado con princesas de Disney.

"Aún tienes hambre, princesita mía?"

Niego con la cabeza antes de terminarme mi trago de agua.

"Entonces, puedo jugar contigo?"

Ay no...

Jugar?

Me hará algo...sexual?

"Está bien."

Debo ganarme al anciano.

Si puedo lograr que confie en mi, podré salir de aquí.

Tal vez pueda asesinarlo!

Pero, por ahora, todo lo que puedo hacer es seguirle la corriente.

"Excelente!"

"Dame tu pequeña mano."

Extiendo mi mano, pero entonces me doy cuenta que Reynard de nuevo aparece.

"Te diviertes con el anciano pusilánime?"

La mano de Reynard aprieta la mía antes de colocarla de nuevo en el reposabrazo.

Coloca de nuevo las ataduras en mi, provocando que mis venas sobresalgan.

"Acabemos de una puta vez con esto."

El pinchazo de la aguja es inevitable.

Intento no moverme, ni emitir ningún lamento por mi dolor.

"Lo único bueno del anciano es que te alimenta para que pueda extraer tanta sangre tuya como sea humanamente posible..."

"Sin matarte en el proceso."

Cierro los ojos mientras el sigue extrayendo el vital líquido de mis venas.

El mareo se apodera de mi.

Veo lucecitas destellar frente a mi...

Mi estómago protesta provocándome una arcada que no puedo controlar.

"Está bien, ya es el último frasco de sangre."

Parpadeo repetidamente antes de enfocar bien la imágen a mi costado.

Ese hijo de puta casi me deja sin nada de sangre!

"Con esto..."

Reynard, el malvado besa un frasco enorme lleno de mi preciada sangre.

"Con esto me harás millonario!"

"Y tu..."

No puedo defenderme de ninguna manera cuando Reynard se acerca a mi para besarme en los labios.

Su asquerosa lengua se desliza por mis labios antes de adentrarse en mi boca.

Una nueva arcada hace retroceder a Reynard quien alza la mano para abofetearme, pero...

"Amo."

En ese momento, el Rey sumiso que es el juguetito de Reynard aparece en la puerta.

"Que demonios quieres Rey esclavo?"

Escucho que una cadena se arrastra por el suelo antes de que el juguetito de Reynard vuelva a hablar.

"Rey Séptimo y Miranda requieren de su aprobación para los gastos de reconstrucción."

"Los contratistas ya están aquí y requieren su firma."

Escucho que Reynard resopla como frustrado.

"Está bien, iré pronto."

El Rey sumiso se retira y el sonido de la cadena lo sigue.

"Tengo que subir un momento, juguetito Elizabeth."

"Cuando regrese..."

"Te follare."

Cierro los ojos incapaz de hacer algo.

La puerta se cierra.

El silencio inunda esta habitación antes de que mis ligeros y quebrados llantos resuenen.

Casi no siento mi corazón latir.

Me siento más débil, fría y sin vida que nunca antes.

Ojalá me hubiera muerto hace mucho tiempo para no encontrarme en esta desesperada situación.

Cuando estoy cayendo en la inconsciencia tan anhelada, unas manos masculinas me tocan.

Siento que las ataduras de mi cuerpo caen a los lados de la silla.

Soy transportada en brazos hacia una cama, donde me recuestan.

"Mi amo me ha pedido que cuide de ti."

"Y eso haré."

Es el Rey sumiso de Reynard.

Sin decir ni una sola palabra, Rey sumiso cubre mi cuerpo con una frazada antes de colocarme un suero en mi lastimada vena.

Por más que intento, mis parpados no cooperan conmigo para que pueda dar un vistazo al lugar donde ahora me encuentro.

"Descansa."

"Necesitarás tus fuerzas."

Maldito Rey.

Maldito Reynard de mierda.

Porque tengo que obedecer lo que me indican siempre?

Cierro los ojos, deseando no volver a abrirlos nunca mas.

Mi sueño me transporta hacia el prado donde esta la cabaña de Jack y Logan.

Entro por la puerta y encuentro una orgía de hombres, mujeres y niños desarrollandose dentro!

"Únete a nosotros Elizabeth!"

Escucho la horrible voz distorsionada de Jack antes de que suelte una risotada horrible.

Me alejo de ese lugar y de pronto llego a la tienda de ropa de Sofía donde ella está cosiendoles en la piel, con hilo y una gran aguja, la ropa a unas pobres niñas!

"Muñequita bella!"

"Déjame coserte ropa primorosa!"

La cara distorsionada de la mujer es terriblemente espantosa!

De nuevo me alejo y esta vez...

No lo puedo creer!

Es mi antiguo hogar!

"MAMÁ!"

"PAPÁ!"

Grito cuando entro por la puerta, pero al parecer no hay nadie.

Es entonces que miro detenidamente la casa.

Ahora que me doy cuenta...

Se parece a la casa de Mi Rey.

Algo se estrella en el suelo, por lo que me dirijo para ver de donde provino el sonido.

"No esta bien lo que dices Reynard!"

"Estas loco de remate!"

"Eso no es normal!"

"No es natural!"

El sonido de una bofetada resuena en el aire.

"Es que duele lo que me haces!"

"No me gusta!"

El sonido de un golpe, el grito y la cadena moviendose se entrelazan haciendo eco en este lugar.

"Entonces, te quedarás aquí hasta que quieras jugar con Papi."

El bastardo camina escaleras arriba, cerrando la puerta detrás de él, apagando la luz...

Sumergiendo a la pobre niña en la oscuridad total.

He estado en este lugar antes.

Se como se te sientes, pequeña niña.

Comparto tu maldito dolor.

"Yo, yo..."

La niña rompe en llanto hecha ovillo en el suelo congelado.

Como si el tiempo avanzara deprisa, la niña se consume y fallece ante mis ojos.

La puerta se abre de golpe y un Reynard enloquecido desciende rápidamente.

Grita su dolor al descubrir que la niña esta muerta.

La madre desciende también para presenciar el terrible espectáculo.

Reynard desencadena a la niña para cargarla en brazos.

Empuñando un arma, Reynard dispara en el corazón a la madre, asesinandola.

La puerta del sótano se cierra, dejando el cuerpo de la mujer desangrandose en el suelo.

Eso fue lo que sucedió...

"Te ayudaremos."

Escucho una vocecita infantil susurrarme en el oido.

"Nosotras te ayudaremos."

No se quienes hablan, pero creo que ya estoy loca porque siento manitas de pequeños niños tocandome el brazo.

Abro los ojos de golpe después de quien sabe cuanto tiempo.

La bolsa del suero rosado casi se termina.

Miro a mi alrededor para cerciorarme.

Estoy todavía en el maldito "santuario" de Reynard el maníaco.

No estoy en el sótano original, de la casa original de Reynard.

"Te sientes mejor?"

Una pequeña niña se materializa a mi lado, provocando que me asuste.

"Tu quien eres?"

Un pequeño niño aparece a su lado.

"Somos los que te ayudaremos."

"Somos sobrevivientes de sus perversiones."

No puede ser!

No deben rebasar los siete u ocho años a lo sumo!

"No dejes que nuestro cuerpo infantil te engañe."

"Somos más viejos de lo que te podrías imaginar."

Que mierda?

Espera.

"Ustedes tambien tienen "nuevo hogar?"

Recuerdo lo que Reynard le dijo a Rey.

Ese cabrón de mierda sin escrúpulos quiere pasar su mente y cerebro al cuerpo joven de Mi Rey para ahora si, violarme de la forma...

Sádica, retorcida, pecaminosa y no se que otras mierdas dijo Reynard.

"Así es."

"Somos miembros fundadores del Club."

"Y queremos un cambio de administración..."

"URGENTE."

***By Liliana Situ***

Valoro mucho tu opinión y voto.

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