EL CEO Y LA HUÉRFANA romance Capítulo 105

*** Perspectiva de Sofía ***

Cuando mi hermano se marchó, me sentía tan mal por el  es mi mejor amigo, mi hermano, lo quiero tanto, sabía que se tenía que calmar, él no quería a esa mujer lo suficiente me lo dijo, yo siempre cuestione del porque seguía con ella si no le profesaba cariño  no me contestaba solo encogía los hombros.

Me senté en el sillón no podía creer el comportamiento de mi hermano con una mujer que no quería de repente mi hermana María grito - han visto a Alicia no la veo por ningún lado- me levante de rayo y Salí al patio a buscarla pero solo encontré su bolso tirado a un costado de la puerta de pronto Marisol grito -y Joaquín tampoco lo he visto- pero qué demonios grite para mi adentros.

Me espante porque conozco a mi hermana puede ser muy temperamental, puede comer cualquier locura, subí las escaleras e indique -los buscare arriba - y Luisa subió conmigo se veía muy asustada.

Buscamos en cada una de las recamaras ella del lado de las recamaras de los chicos y yo de las chicas  a la única que encontré dormirá era a la primita de Matías por un instante pensé dejarla seguir durmiendo pero no pude y la desperté –oye niña, despierta tu estúpido primo ya se fue-ella me miro confundida pero le indique - que no escuchaste el escandalo eres tan patética- Salí de la recamara no tenía tiempo para pelearme con esa tonta necesitaba encontrar a Alicia.

Me encontré a Luisa en el pasillo la cual me indicaba que no encontraba a nadie, las dos bajamos y les indicamos que no se encontraban en la casa que todos habían buscado en todas partes, Julián nos indico

-hay que calmarnos e informar a las autoridades correspondientes ya que a lo mejor salieron al bosque, es un poco peligroso salir a buscarlos ya que no conocemos la zona y nos podemos perder, buscare unas linternas y si Esteban y Saúl me acompañan revisaremos los alrededores sin alejarnos mucho porque no sabemos por dónde se fueron y no conocemos el bosque-

  Agradecí mucho, era tan cierto lo que decía pero mi cabeza solo me indicaba que necesitaba encontrar a Alicia sabía que haría lo necesario por encontrarlos ya que era su cuñado el que estaba desaparecido también.

  Saúl indico que el guarda bosque no tardaría mucho en llegar que no se alejan de la propiedad.

  Ellos salieron a buscarlos pero ya había caído la noche no se veía nada, pronto llego el guardabosque cuando les enseño el mapa de los alrededores a los hombres y empezaron a trazar un plan de rescate empezó a llover, el comento que sería más difícil, la búsqueda porque el suelo era muy resbaloso que tendría que buscar gente que conociera los alrededores para salir a buscarlos, ya no estaban todos los carros restantes.

yo le indique que podría salir a buscarlos por la carretera que tal vez los podría ver por el camino, el guardabosque acepto con la condición que no me saliera de la carretera, Marisol se acercó a mí y me indico que ella me acompañaría y María indico lo mismo a lo cual nos dieron bandera verde para salir.

Luisa, Estela  y Laura se quedarían en casa para avisar por si regresaban.

Regresamos 4 horas después y el guardabosque y los hombres también regresaban él nos indicó que necesitaba más personas que conocieran el área. Para poder peinar la zona que sería más apropiado esperar a que saliera el sol y que a primera hora si no regresaban el llegaría con personas que conocieran el área.     

Nadie durmió esa noche todos estábamos muy preocupados, pronto llego el amanecer y el gurda bosque llego con un grupo de 6 personas.

Nos dividieron en grupos Estela y Laura se quedarían a ver si regresaban salimos rumbo al bosque Marisol y yo íbamos en el mismo grupo, juntó con un señor de unos 50 años.

Caminamos y el señor nos indicó que tuviéramos mucho cuidado ya que había muchas trampas dejadas por los cazadores y nos fijáramos muy bien al caminar caminamos por más de dos horas cuando de repente grite ahí están.

Los vi abrazados debajo de un árbol, Marisol y yo corrimos y ella se espantó mucho cuando llegamos y los encontramos con una temperatura muy fría.

Saque una espejo que traía en el bolsillo de mi chamarra y le indique a Marisol –están vivos – al ver que se empañaba un poco mi espejo.

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