En casa de Luisa
Luisa y Joaquín estaban muy preocupados porque Marisol no regresaba del trabajo, le marcaban a su celular y estaba apagado, Cuando llegó Julián el prometió salir a buscarla junto con Joaquín, estaban a punto de salir cuando ella llegó, los reclamos no se hicieron esperar por parte de los presentes ella respiró hondo y solo indico
-discúlpenme pero hoy no fue mi día, en la mañana me topé con un tarado que salía de una cafetería muy cercana a la empresa, traía un café y me lo echo en la mi blusa, y se trató de disculpar pero lo ignore y seguí de largo- indicó y les mostró la mancha.
-Tuve que trabajar así todo el día me sentía fatal, a la hora del almuerzo me caí y me raspe mi rodilla- ella traía un pantalón de mezclilla azul claro y en la rodilla se podía ver una mancha de sangre.
-por la tarde al salir, se me hizo un poco tarde para alcanzar el autobús y tropecé con el mismo tipo de la mañana, y lo tire al piso nos pusimos a discutir porque él me indico que yo había hecho con toda la intención por venganza a lo ocurrido por la mañana por esa situación se me pasó el autobús que siempre tomo como saben pasa cada 20 minutos, así que sin remedio espere el siguiente autobús para venirme pero a la mitad del trayecto se descompuso el autobús y nos quedamos varados por otros 20 minutos hasta que el siguiente autobús pasó y nos levantó y a mi celular se le acabó la batería, por eso no pude llamarlos perdón.-
- ¿porque se te acabó la batería del celular Marisol?- le indicó Julián, ya que recordaba que él mismo le había entregado un celular nuevo.
-porque se me olvidó cargarlo anoche perdón- indicó Marisol con vergüenza en el rostro
-nunca lo vuelvas a hacer Marisol –le gritó Joaquín.
-Marisol vete a dar una limpia hermana con todo lo que te pasó- contestó Luisa
-Definitivamente el día de hoy no fue mi día, terminé regañada por mis hermanos y mi cuñado, pero los amo porque sé que es porque me quieren es lo único bueno del día y definitivamente me daré un limpia- todos comenzaron a reír.
Cuando una llamada telefónica interrumpió el momento era Saúl, indicando que a Esteban lo habían atropellado. Que lo estaban trasladando a un hospital en ese momento.
Julián sin pensarlo les indico que tenía que ir a ver a su amigo y Joaquín se ofreció a acompañarlo. Al llegar al hospital se encontraban Saúl, Estela y Adrián, esperando saber de la salud de Esteban.
-si, pero me segó la ira, mis cicatrices no desaparecerán y él está buscando otra mujer, pensé que si lo mataba acabarían nuestros problemas- dijo ella entre llantos llenos de desesperación.
-¿cuéntame que pasó?- dijo Con mucha rabia.
Ella le contó que había seguido a Esteban y que de lejos lo vio besándose con una mujer y que en cuando vio que se alejaba la mujer y cruzaba la calle lo embistió con la esperanza de matarlo pero que no se quedó a ver si estaba muerto que solo se alejó a toda velocidad para no ser descubierta.
El cuestiono de quien la observó, ella índico que la chica en cuestión había entrado a una tienda y que por eso se atrevió a hacerlo pero que ella suponía que no lo había visto nadie porque estaba despejada la calle.
Pronto dijo que había que desmantelar el carro y que lo tenía que reportar como robado, porque lo más seguro es que alguien la había visto.
En camino a la estación de policía Adrián les contaba a Julián y a Saúl lo que había pasado, que él llegaba a casa de Estela y se estacionó muy cerca de su casa, pero justo cuando iba a salir que recibió una llamada y se quedó a atenderla dentro de su automóvil que el auto de delante de él arrancó su motor, que en ese momento él salió del automóvil y que observó su espejo del lado del conductor que era una mujer, se quedó observando porque ella pisó el acelerador y de repente se escuchó un fuerte ruido el corrió al lugar y encontró a Esteban tirado en la calle donde llamó a urgencias, que no recordaba con exactitud la matrícula del carro lo único que podría decir era el modelo y color del auto.
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