EL CEO Y LA HUÉRFANA romance Capítulo 74

Por la noche   Sara visito a Luisa en su casa tenía tanta curiosidad por los niños acudió sola a la casa.

Luisa la esperaba con ansiedad, aunque se sentía muy nerviosa la esperaba con gran espectativa, en cuanto cruzo la puerta Sara la saludo y mencionó.

-Luisa que bueno verte he salido ya en varias ocasiones con Miranda y  te hemos extrañado tanto- Luis le regaló una enorme sonrisa y con la mirada en el suelo comentó

-Sara te pido una disculpa por quedarte mal, no te mereces mi groceria después de como me ayudaste con mi amigos te agradezco tanto-  ella estaba tan apenada que no podía ni verla a los ojos.

-no querida ni lo menciones era una injusticia después de todo, mi hija  exagero al ser hija unica es un poco caprichosa, pero olvidemos ese asunto no es nada importante, me alegra que no pasó nada- al llegar a la sala de estar se encontraron con los angelitos jugando en la alfombra.

-mira estos son mis hijos Uri e Ian- comento Luisa, los niños jugaban con algunos bloques de plástico.

-vaya son hermosos, ni como negar que son hijos de Julián si son su viva imagen- dijo acercándose a ellos, Ian siempre fue un niño muy tranquilo y muy reservado pero cuando ella se acercó él le levantó los brazos a Sara, Luisa   le extraño la reacción de Ian, ya que este no era muy abierto como Uri.

Sara no lo pensó dos veces y tomo entre sus brazos a Ian, su corazón se aceleró le recordó a su propio hijo nunca tuvo la oportunidad de convivir con el.

-este angelito es la viva imagen de su padre- comento Sara con Ian en brazos.

-hasta en el carácter, es bastante distante y no se relaciona muy a menudo- en eso se acercó Uri y le regalo una enorme sonrisa a Sara, ella se sentó para poder cargar a los infantes en su regazo, su corazón se llenaba de una infinita felicidad, se acordaba tanto de sus hijos.

-vaya Luisa son un encanto de niños, me encantaría tener unos nietos como ellos-

-muchas gracias Sara pero eres muy joven para pensar en nietos- comentó Luisa un poco extrañada por ver a Sara tan alegre.

-no para nada, me encantaría tener nietos, ahora que tengo la fuerza para estar con ellos.- suspiro-

 Estuvieron jugando con los niños era muy extraño para Luisa que los niños se acercaran tanto a ella Uri era muy sociable pero Ian solo se portaba de esa manera con sus conocidos.

y más extrañada estaba al ver a la distante Sara muy alegre junto a ellos.

Media hora después llego Julián, al llegar Uri corrió a su encuentro, la relación que ellos tenían había crecido con el tiempo.

A Sara no le pasó desapercibido ese detalle ya que la cara de Julián se le iluminó en cuanto cargo a su hija y le dio un beso muy tronado en la frente y ella comento.

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